Indec: la venta en shoppings creció en 2010 casi un 40%

BUENOS AIRES.- Las ventas en los shoppings aumentaron un 36,8% en diciembre con relación a igual mes de 2009 y se expandieron un 39,4% en todo 2010, impulsadas por un gran consumo estimulado por créditos, ofertas y la inflación.

Las fiestas de fin de año y el inicio de las vacaciones también animaron en el marcado crecimiento del consumo, dado que las ventas en shoppings despegaron un 63,6% respecto de noviembre. Según informó el Indec, las ventas alcanzaron en diciembre los $ 1.614,7 millones, lo que significó un incremento de un 43,7% respecto de igual mes de 2009. La inflación, que según el Indec fue de un 10,9% en 2010 y que de acuerdo con las consultoras privadas alcanzó un 26% promedio, actuó como catalizador del consumo, dado que los argentinos decidieron adelantar gastos para pagar menos. Los precios en los shoppings aumentaron un 0,5% en diciembre y un 7,4% en todo el año. Las ofertas de financiamiento en plazos extensos y sin interés también estimularon la compra.

Fuente: NA

El INDEC dará a conocer esta tarde la inflación oficial de todo el 2010

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) difundirá este viernes el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que se registró en diciembre último y el de todo 2010.
Desde el sector privado anticiparon que, en términos anualizados, el costo de vida se incrementó alrededor de 30%, casi el triple de lo que informará el organismo público.

Durante noviembre, la inflación «oficial» llegó al 0,7%, y de esta manera, en once meses los precios minoristas acumularon un aumento de 10 por ciento.

Sin embargo, desde el sector privado argumentan que los índices de precios que elabora el INDEC no son reales.

En particular, la consultora Ecolatina, estimó que 2010 cerró con un alza acumulada de 26,6%, casi un 11% más que en 2009.

«Uno de los rasgos distintivos del actual proceso inflacionario es la extraordinaria suba en el precio de los alimentos. Desde 2007 este rubro creció más que ningún otro, superando todos los años el aumento acumulado por el resto de los capítulos que componen el Índice de Precios al Consumidor», explicó la consultora.

Fuente:InvertirOnLine.com

Subió el desempleo en Mendoza por cambios en la metodología de medición

La nueva Encuesta Anual de Hogares Urbanos (EAHU), que presentó el Indec en reemplazo de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), no beneficia a Mendoza, ya que por este simple cambio la desocupación en la provincia pasó del 3,7% al 4,7%. Mientras que la tasa de empleo sigue igual.
El Indec presentó el dia 06/01/2011 la nueva Encuesta Anual de Hogares Urbanos (EAHU) que amplía la medición de actividad económica, empleo y desempleo, al 90% de la población total del país. Esta nueva medición viene a reemplazar a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), que hasta ahora se venía usando para medir, entre otras cosas, el desempleo.

Pero el cambio, a Mendoza no le viene para nada bien. Al ampliarse la muestra a una mayor población relevada surge que en la provincia el desempleo es mayor de lo que se pensaba.

Tomando los datos al tercer trimestre del 2010, las dos metodologías aplicadas para medir el desempleo arrojan datos distintos. Es que mientras la EPH dice que la desocupación en Mendoza alcanza al 3,7% de la población económicamente activa, ahora la EAHU en igual período afirma que la desocupación es del 4,7%.

Esto ocurre mientras la tasa de empleo, que mide la cantidad de personas que tienen trabajo, en ambas metodologías varia sólo 0,2 puntos porcentuales. De 40,7% en la EPH a 40,5% en la EAHU.

La diferencia está en que la EPH toma una población urbana de referencia de 903.000, mientras que la EAHU toma un total de 1,422 millón de personas al tercer trimestre de 2010; último dato relevado en ambas metodologías.

Con este dato, Mendoza tampoco ha podido recuperar los niveles de desempleo anteriores a la crisis. Ya que si bien una tasa de desempleo del 4,7% representa una baja en relación a igual trimestre de 2009 (según la EPH la desocupación era del 6,4%), todavía estaría por encima del 3,7% registrada al tercer trimestre de 2008.

Volviendo a las diferentes metodologías, con la EPH una tasa de desocupación del 3,7% en la zona urbana de Mendoza al tercer trimestre de 2010 significa que hay 14.000 personas sin trabajo, según números “redondeados” por el Indec. Mientras que un tasa de desocupación del 4,7% en la EAHU significa que en Mendoza hay 28.000 desocupados frente a 817.000 personas “inactivas”.
Fuente: mdzol.com

El INDEC quiere lavar su imagen: hizo la primera rueda de prensa en 4 años

A través de una conferencia de prensa bastante particular , los funcionarios a cargo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) presentaron ayer los resultados de la Primera Encuesta Anual de Hogares Urbanos (EAHU). Un relevamiento ampliado de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que informa sobre las condiciones de actividad de la población en localidades que tienen más de 2.000 habitantes.

Este fue el trabajo que el INDEC eligió para volver a la modalidad de las conferencias de prensa para difundir las estadísticas oficiales. Hasta enero del 2007, cuando comenzó la intervención de la secretaria de Comercio en el organismo para manipular el índice de precios (IPC), ésta era una práctica habitual . El cambio ahora sería, además, un intento del Gobierno por “transparentar” la gestión del organismo a partir de la reciente visita del Fondo Monetario Internacional (FMI) al edificio de Diagonal Sur.

Igual, para acceder a la nueva información fue necesario sortear una serie de “requisitos” . El primero: estar en una lista donde figuraban los invitados a la conferencia de prensa. Lo curioso fue que no incluyó a algunos de los periodistas que mejor entienden la temática del INDEC. Luego, acreditarse con documento de identidad y finalmente esperar el turno para hacer las entrevistas con los funcionarios, por grupos. En un salón contiguo, los datos de la encuesta fueron presentados por la directora del organismo, Ana María Edwin, el director técnico, Norberto Itzcovich, y el director de la EPH, Claudio Comari.

Edwin explicó que “en línea con la Encuesta Permanente de Hogares que se realiza trimestralmente, el nuevo instrumento permite pasar de una medición de poco más del 60% de población urbana al 90% de la población total del país”, dijo. Los principales indicadores del sondeo, realizado en el tercer trimestre del 2010, mostraron una tasa general de actividad del 44,7%; de empleo, del 41,4% y de desocupación, del 7,4%.

Así, con una diferencia estadística de una décima, la nueva encuesta ratificó la tasa de desocupación relevada en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del tercer trimestre, del 7,5 por ciento.

Los funcionarios explicaron que la información está desagregada por provincias, que toma una muestra de 45 mil viviendas y una población de 36,4 millones de personas.

La ocasión fue propicia para hacer otras preguntas a los funcionarios, por ejemplo, sobre la próxima reunión que mantendrán con la misión del FMI.

“Estamos por acordar una nueva fecha para la segunda reunión” , se limitó a contestar Edwin. Y agregó que la gestión con el organismo internacional “está avanzando bien y es de carácter estrictamente técnico, es decir, para la utilización de metodología que utilizan los organismos internacionales”, respondió. De todas maneras, resaltó que “las recomendaciones técnicas del FMI no tienen carácter vinculante” para el INDEC.

Con relación al informe que hicieron los académicos universitarios sobre las estadísticas, Itzcovich precisó que “en febrero se va a hacer con ellos un seminario”.

Sobre la realización de un Indice de Precios al Consumidor a nivel nacional -que fue discontinuado en marzo de 2008- Edwin aseguró que “se va a hacer”, pero “no avalando la información de las direcciones provinciales”.

Fuente: clarin.com

Aval oficial a otro acuerdo salarial que desconoce al INDEC

El Gobierno homologó ayer un nuevo convenio salarial en el que empresarios y sindicalistas acordaron negociar los futuros salarios por el IPC que elabora Graciela Bevacqua.

El Gobierno homologó ayer un nuevo convenio salarial en el que empresarios y sindicalistas acordaron negociar los futuros salarios por el Indice de Precios al Consumidor (IPC) que elabora Graciela Bevacqua, la desplazada directora del IPC del INDEC.

Así figura en el acuerdo entre el SMATA y la automotriz Honda Motor, publicado en el Boletín Oficial. En el punto sexto se dice que las partes volverán “a reunirse en la primera semana de enero de 2011 con el objetivo de comenzar las negociaciones salariales correspondientes a los tres primeros meses del año, coincidiendo en elegir que el indicador del IPC sea el elaborado por el Centro de Investigaciones en Economía y Finanzas Aplicadas “Buenos Aires City” perteneciente a la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires”.

Entre enero y noviembre de 2010, el IPC-Buenos Aires City UBA arroja un alza de los precios minoristas del 23,4% , en línea con las mediciones de los Institutos oficiales provinciales.

En cambio, el INDEC registró apenas un 10 por ciento .

Lógicamente, tomar uno u otro índice modifica sustancialmente cualquier negociación salarial.

En el sector automotor casi todos los convenios —como los de Ford, Mercedes Benz y Volkswagen— toman como referencia para la discusión salarial futura, no los datos del INDEC , sino el IPC que elabora Bevacqua.

Pero hay más casos: químicos y petroquímicos de Bahía Blanca, en el convenio con la empresa Praxair, los sindicalistas acordaron como referencia un índice local , que más que duplica las cifras del INDEC.

Fuente: iEco Clarín

¿Crecemos a tasas chinas o deliran los consultores?

Hace bastante tiempo nos dicen que la Argentina viene creciendo a tasas chinas. Otro tanto repiten como loros muchas consultoras y entidades privadas, como si fuera tan difícil demostrar que es otra falacia más del modelo k.
Lo paradójico del caso es que las mismas consultoras y entidades privadas que miden una inflación de más del doble de lo que dice el INDEC, dicen que venimos creciendo a tasas chinas. La incoherencia es interesante. Si la inflación real es más del doble que la oficial ¿cómo vamos a crecer a tasas chinas? ¿Entonces el PBI nominal supera al que emite el INDEC? No cierra.

Empecemos por decir que la tasa de crecimiento es la que mide el avance o retroceso de un país durante un cierto período.

El modo más habitual de este tipo de medición es tomar el ingreso per cápita real y el producto bruto interno y compararlo con otros países.

Para llevar a cabo este tipo de estudios se utilizan modelos, entre los que por ejemplo se puede citar el de Harrod-Domar o Tasa natural de crecimiento que

Permite analizar los factores que influyen en la velocidad del crecimiento, es decir, la tasa de crecimiento del trabajo, la productividad del trabajo, la tasa de crecimiento del capital o tasa de ahorro e inversión y la productividad del capital.

En ese contexto, se clasifican los bienes en dos tipos, los bienes para consumo y los bienes de capital. Los primeros sirven para la satisfacción de las necesidades de las personas y los segundos para producir otros bienes.

Producir genera ingresos, que son gastados a su vez para adquirir nuevos bienes de consumo o invertir en capital.

La inversión en bienes de capital es la que incrementa a futuro la producción y ésta se genera en la retracción del consumo de las familias.

Si la inversión supera el nivel requerido para sustituir el capital obsoleto o deteriorado hay crecimiento económico. Entonces, inversión y ahorro determinan el crecimiento.

Si países desarrollados tienen una tasa de crecimiento alto y los países en vías de desarrollo tienen una tasa de crecimiento baja, obviamente la brecha entre ricos y pobres será más grande. En cambio si países en desarrollo tienen una tasa de crecimiento superior a la de los desarrollados y la pueden mantener por un período prolongado, probablemente los primeros alcanzarían un ingreso per cápita similar a los segundos.

Pero la cosa no resulta tan sencilla en la práctica y mucho menos cuando se suma la macrovariable inflación, y en un país donde los indicadores oficiales son falsificados todos los meses a lo largo del tiempo.

Uno de los indicadores más confiables de la expansión económica es lo recaudado en concepto de IVA, pero como ya se ha dicho en otras oportunidades, el IVA se viene calculando además sobre los precios inflados, y de ahí que otra de las falacias del gobierno sea hablar de superávit fiscal, pero esto por el momento lo dejamos de lado. Ante este escenario, nos quedaría medir el crecimiento en términos reales, esto es, en unidades.

Otro elemento para conocer la expansión económica es considerar el consumo de energía eléctrica. Según el organismo oficial, el consumo energético rondó el 10 % comparativo interanual, mientras que para la Fundación para el Desarrollo Eléctrico estuvo en el orden del 2 % aproximadamente.

Como es posible advertir fácilmente, existe una clara contradicción entre los fundamentos que validarían un crecimiento a tasas chinas y los indicadores que refleja la realidad, por lo tanto, el crecimiento a tasas chinas resulta otra falacia, o quizás mejor sería decir, otro cuento chino.

Fuente: tribuna de periodistas/Nidia G. Osimani

Para la misión del FMI, el INDEC manipula los datos

Se tergiversan los precios para subvaluar la inflación, dice un borrador de la delegación del organismo que vino al país. Inversamente, se sobrevalúa el crecimiento de la economía.
El primer examen fue muy crítico: la misión del Fondo Monetario volvió a Washington reprobando al INDEC y la intervención de Guillermo Moreno en las estadísticas oficiales.

Así lo dice el borrador de un “memo” confidencial que Robert Rennhack, el enviado del Fondo, se llevó ayer en su portafolio para entregar a la conducción del organismo financiero. El texto que será dirigido a Nicolás Eyzaguirre, director del Hemisferio Occidental, puntualiza que existe un consenso general en la Argentina sobre la falta total de credibilidad en las estadísticas oficiales.

Los burócratas de Washington concluyen lo siguiente: que la distorsión del INDEC obedece a la manipulación sobre los datos que son incorporados para medir el índice de precios y no es un problema metodológico del indicador de inflación.

En otras palabras: que el equipo de Norberto Itzcovich no incluye los valores reales de los productos y que tergiversa los precios para subvaluar la inflación .

También el FMI sacó otra conclusión preliminar : que si la inflación esta subvaluada, el crecimiento de la economía que promociona el Gobierno en Argentina está sobrevaluado .

El contenido de las notas y del borrador del informe tiene así un fuerte voltaje político. En caso de oficializar esas conclusiones, el FMI le diría a los centros financieros que toda la estadística oficial no es confiable y esto tendría pésimas consecuencias para la Argentina .

Por eso la misión que estuvo en Buenos Aires mantuvo estricto secreto sobre sus primeras conclusiones para evitar un escándalo político.

Amado Boudou aceptó la intromisión, pero con el compromiso de que tuviera perfil bajo .

Ese borrador de las conclusiones transcribe la impresión que el jefe de la misión, Rennhack, tuvo al revisar los documentos confidenciales del INDEC y las opiniones de un grupo de economistas locales expectantes. Figuras como Miguel Bein, Daniel Artana. Rogelio Frigerio y Carlos Melconian coinciden y consideran que el problema del INDEC no es sólo metodológico, ni de confección del indicador . Para ellos también el principal problema es que no se incorporan los datos que corresponden a los precios reales que abona la gente y así se oculta inflación.

Las entrevistas se realizaron en las oficinas que el FMI tiene en un lujoso edificio de Retiro y durante las charlas surgieron polémicas. Rennhack y la delegada permanente del FMI en Buenos Aires, María González, cuestionaron por “falta de solidez” varios indicadores privados de inflación.

El jefe de la misión también polemizó con sus interlocutores.

Rennhack criticó la inconsistencia de los economistas argentinos que cuestionan la inflación del INDEC, pero aceptan la proyección de crecimiento del Instituto. Así lo dijo: “Si ustedes calculan una inflación más elevada, tendrían que calcular un crecimiento mucho más bajo.” El tema del INDEC también estuvo en las conversaciones privadas que Julio de Vido mantuvo con varios empresarios.

Todos coinciden que su normalización sería una verdadera señal de cambio de Cristina Kirchner . Paolo Rocca, el dueño de Techint, fue más directo en ese encuentro secreto: le dijo a De Vido que el Gobierno tenía que desplazar a Guillermo Moreno, para que los hombres de negocios crean que la Casa Rosada impulsa modificaciones reales.

En el fondo, un mensaje similar recibió Amado Boudou en su viaje a París: los estados acreedores quieren hechos, más que dudosas promesas.

Boudou volvió de su promocionado viaje relámpago con las manos vacías. Hasta ahora sólo se acordó un cuarto intermedio para conciliar las cifras. Ramón Fernández, el titular del Club de París, fue claro con Boudou. Primero se dedicó a explicarle algunos códigos que el ministro desconocía de las negociaciones económicas internacionales. Pero después le expresó la exigencia del Club de París: que Argentina pague al contado con reservas, si pretende un acuerdo con los Tesoros de las naciones industrializadas.

En idéntica dirección se refirió Christine Lagarde, la ministra de Finanzas de Francia. Le reiteró que si la Argentina quiere evitar una auditoría previa del Fondo Monetario, la cancelación de la deuda tendría que ser virtualmente al contado.

Lagarde y Fernández después le trasmitieron la máxima concesión que estarían dispuestos: un virtual pago al contado dividido en tres cuotas semestrales, con una cancelación inicial fuerte y con reservas .

Boudou se sorprendió por la inesperada aspereza inicial. El ministro promociona que Argentina tiene el aval de Estados Unidos para acordar sin el FMI. Pero la severidad de la dupla de funcionarios franceses tendría un motivo: el Club de París recibió presiones para que endurezca su posición de empresas europeas que tienen cuestiones pendientes con la Argentina.

La última, pero importante, fue de la Compagnie de Suez, que presentó una nota formal pidiendo que se le exija a la Argentina que pague el fallo del Tribunal Arbitral del CIADI por 1.2000 millones de dólares.

Boudou también volvió con una información confidencial: la cancelación de la deuda no abre automáticamente el crédito para la Argentina.

Eso dependerá de las firmas de seguro estatal de cada nación, las cuales –como la alemana Hermes– exigen la garantía del FMI.

Igual, el ministro volvió satisfecho: utilizó la negociación para lanzar su candidatura en la Capital Federal. Un proyecto político que debe vencer un escollo central: su abultada imagen negativa, según las encuestas.

Fuente: clarin

¿A qué vino el FMI al INDEC?

¿Por qué la Intervención del INDEC llamó al FMI para que la ayudara? ¿No le alcanzaron todos los viajes que ya hicieron?, La Intervención del INDEC, que nos ha acusado de defender a los bonistas y al FMI por tratar de preservar la autonomía de las estadísticas públicas frente al atropello del poder político, es la misma que dice que la misión del FMI que “visita” el instituto desde la semana pasada ha venido para asesorar sobre la elaboración de un IPC (Índice de Precios) Nacional.
Tal vez ahora quieren mostrarse confiables ante el mismísimo establishment, al que tanto denostaron por ser el soporte intelectual de los viejos índices.

¿No existía ya un proyecto muy avanzado de IPC Nacional?

Hagamos un poco de historia. Como se dice en la misma página web del INDEC, www.indec.gov.ar/ índices de precios/IPC Nacional –Primera Etapa en el archivo Aclaraciones Metodológicas con fecha 29/11/2005:

“Continuando con la tarea de mejoramiento metodológico de los programas estadísticos del INDEC y en línea con los avances científicos y técnicos a nivel mundial, el IPC emprendió la labor de ampliar su cobertura geográfica.”

[…] La Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGH) realizada por el INDEC en los años 1996/1997, fue la primera de cobertura nacional y permitió encarar el proyecto del IPC Nacional. La ENGH se realizó en todo el país a hogares particulares residentes en áreas urbanas de 5.000 o más habitantes.
En esta primera etapa del proyecto se incluyen las provincias con porcentaje más elevado de gasto de consumo según la ENGH, con el fin de lograr la mayor representatividad del gasto nacional en consumo de la población urbana. Se adelantó la incorporación de las provincias de San Luis y Catamarca, previstas para una etapa posterior, a pedido y a cargo de las respectivas provincias.”

El gobierno de Néstor Kirchner puso mucho empeño en que se empezara a publicar este indicador en 2005. Fue muy grande la insistencia en su publicación, aún sabiendo que, por razones presupuestarias, estaba en una etapa preliminar, ya que no se habían incorporado todas las provincias.

El programa del IPC Nacional – Primera Etapa, incluía a las 7 provincias que representaban el 83% del gasto total del país: Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Tucumán, San Luis y Catamarca.
Ya se estaban incorporando varias provincias nuevas: La Rioja, La Pampa, Chubut y se estaba por firmar convenio con Neuquén.
Las tareas habían comenzado en 2001 y se había empezado a publicar en 2005. Aún en la página web del INDEC figuran los comunicados desde Noviembre de 2005 a Abril de 2008.
Y se implementaba la metodología que recomendaba la oficina de estadística de Naciones Unidas, Metodología 13, pero nunca se consultaba al FMI sobre qué hacer y cómo en materia de indicadores sociales o económicos.
Lamentablemente, cuando en 2007 irrumpe la intervención en el IPC, y descubren que dibujar sólo las cifras del IPC-GBA abría una brecha cada vez mayor con las provincias, también deciden “acordar con los gobernadores” retocar las cifras de las provincias. Todo esto está documentado en las causas de Garrido y Stornelli y fueron denunciados por ello, Paglieri e Itzcovich, entonces simple asesor de la Dirección. Las únicas provincias “rebeldes” en ese momento fueron Mendoza y San Luis. En agosto de 2007, también Mendoza se aviene a “trabajar como el INDEC”, previo desplazamiento de la persona que estaba a cargo de la Dirección de Estadística de esa provincia, Patricia Giménez. También en este caso está probada en la causa la adulteración de las cifras. Incluso se publicaron dos comunicados de prensa del IPC de Mendoza correspondiente a Septiembre de 2007 (datos de agosto), uno que arrojaba una suba de 3,1% y uno posterior, ya retocado, que indicaba un alza de 1,5%. Ambos comunicados habían sido confeccionados por el INDEC.

Luego, Santa Fe retoma su independencia partir de 2008. Todo esto se muestra en los siguientes gráficos y fue explicitado en el trabajo de la Comisión Técnica de enero de 2008.

Frente a todo esto la intervención “corta por lo sano”: se deja de publicar el IPC Nacional (marzo 2008). Se desmantela el equipo de trabajo, despidiendo, desplazando y dejando sin tareas a los que allí trabajaban.

Con fecha 12/09/2007, el equipo del IPC Nacional, desplazado y sin acceso a ningún tipo de tarea dirige una carta a la Directora Ana Edwin, proponiéndole un plan para incorporar a los aglomerados de Bahía Blanca, Corrientes, Neuquén,,,, Paraná y Resistencia para fortalecer el IPC Nacional. Por supuesto, la carta ni siquiera tuvo respuesta. El plan de la intervención era profundizar su tarea: descabezó el equipo central de la EPH (Encuesta Permanente de hogares), violentó las cifras del IPC de Mendoza sin sonrojarse y continuó con la brutal manipulación de las cifras del IPC GBA. Todo esto, a fuerza de persecución, sumarios, desplazamientos, rebajas salariales y, finalmente, despidos.

Cuando en marzo de 2008, el gobierno de Cristina Kirchner, decide “discontinuar el IPC Nacional”, las excusas son ridículas. Que no era “Nacional” porque no estaban todas las provincias. Que las canastas de bienes y servicios de cada provincia eran distintas entre sí (¿será que los patrones de consumo son distintos?). Que las canastas provinciales tenían muchas menos variedades que la del GBA (ahora la del GBA tiene cerca de 400 cuando tenía 818 (¿)) Que no estaban actualizadas: será que aún no son públicos los datos de la ENGH 2004/2005, que la intervención tiene disponibles desde que llegó? ¿O será que los índices de las provincias no manipulados, cuya brecha con el IPC-GBA se agrandaba, empezaban a tomarse como los verdaderos parámetros de la inflación?

Para reconstruir un IPC Nacional se debería en primer lugar calcular un Índice de Precios del GBA confiable, que refleje la evolución verdadera de los precios. Para esto no sólo hay que cambiar la metodología adoptada desde Abril del 2008, implementar fórmulas y mecanismos de imputación de los datos faltantes que no sesguen los resultados, sino que hay que relevar en campo y cargar en la base de datos precios representativos de cada ítem incluido en la canasta. Adicionalmente, es necesario desafectar del operativo a los responsables de la manipulación de las estadísticas, hecho que si bien comenzó con el IPC, actualmente abarca la totalidad de los operativos que a su cargo tiene el INDEC.

Sería mucho más sencillo rearmar los equipos de gente que quiere seguir trabajando en lo que hacía, restituir a sus funciones a decenas de trabajadores – todos de larga experiencia en el INDEC – que fueron desplazados, despedidos, dejados sin tarea u obligados a renunciar por el simple hecho de negarse a manipular los datos.

Y, además, sería imprescindible que la intervención publique de una vez los datos definitivos de la ENGH 2004/2005. Así también podríamos ayudar al Ministro Boudou a ver, a través del impacto de la inflación en los distintos quintiles de ingresos, que los pobres son los que más sufren con la inflación. La intervención dejó de publicar este informe en 2007.

Finalmente, ¿a qué vino el FMI?
¿A asesorar para hacer un IPC Nacional? Es poco creíble. ¿También van a cambiar el IPC-GBA (que representa casi el 50% del gasto de los hogares) o las cifras seguirán siendo las que mes a mes son ignoradas por todos ya que vemos lo que pasa con nuestros bolsillos?

¿Será parte de un “toma y daca” por la negociación con el Club de París?

¿Será para hacer buena letra con el organismo que tanto ha tenido que ver con las recetas que destruyeron nuestras economías como el mismo gobierno dijo en muchas ocasiones?

Seguimos diciendo:
Fuera la Intervención
Fuera la patota
Y ahora,
Fuera el FMI

13 de diciembre de 2010

Inflación: la medición del INDEC volvió a ubicarse por debajo de las privadas

Con atenta mirada del FMI, el costo de vida de noviembre aumentó sólo el 0,7 por ciento, según el organismo oficial. El incremento fue más del doble para las consultoras privadas.
Con atenta mirada del FMI, el costo de vida de noviembre aumentó sólo el 0,7 por ciento, según el organismo oficial. El incremento fue más del doble para las consultoras privadas.

Ni la presencia de los técnicos del FMI acercó al Indec a la realidad. El costo de vida de noviembre registró un aumento del 0,7 por ciento con relación al mes anterior, informó en la tarde de ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

En comparación con igual mes del 2009, la inflación acumulada llegó al 11 por ciento y respecto de diciembre trepó al 10 por ciento, indicó el organismo.

Las estimaciones oficiales volvieron a ubicarse muy lejos de las estimaciones de las consultoras privadas que estiman el avance de los precios en ese mes estuvo entre 1,3 y 1,9%, y la suba anual de 2010 sería del 25 por ciento.

Hace pocos días, una misión de técnicos del FMI arribó al país para trabajar en conjunto con especialista locales para mejorar la medición de los precios.

El titular del Fondo, Dominique Strauss-Kahn, aclaró que la misión no hará una revisión hacia atrás de lo actuado en el Indec. Sólo se concentrará en brindar asistencia técnica para elaboración del nuevo IPC Nacional.

Sin embargo, a nadie se le escapa el significado político del regreso de Fondo Monetario a Buenos Aires. Si bien el ministro de Economía, Amado Boudou, dijo que aceptar la visita no significa que el gobierno se bajó los pantalones, ésta es la primera vez que reconocen que hay un problema con las estadísticas del INDEC.

El Indec comenzó a discutir con el FMI el nuevo índice de precios

Edwin e Itzcovich presidieron la comitiva que ayer por la tarde se entrevistó con el Fondo. Mientras, las universidades proponen índices alternativos.
La directora del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), Ana María Edwin, y el director técnico de ese organismo, Norberto Itzcovich, mantuvieron ayer por la tarde la primera reunión con la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) que llegó al país para asesorar al ente estadístico en la elaboración de un nuevo Índice de Precios a nivel Nacional. En paralelo, un grupo de universidades nacionales propuso elaborar indicadores para medir la inflación a nivel provincial y en todo el país.

El Gobierno intentó bajar el tono al arribo de la misión del FMI, que encabeza el subdirector del Departamento para el Hemisferio Occidental de esa entidad, Robert Rennhack, quien un año atrás inclusive manifestó en un seminario realizado en la provincia de Córdoba sus dudas respecto de las estadísticas argentinas. No hubo comunicación oficial ni recepción a los seis funcionarios del Fondo que arribaron al país el miércoles por la noche.

Por la tarde, Edwin, Itzcovich y un grupo de técnicos que arman el controvertido Índice de Precios al Consumidor (IPC) se reunieron con los enviados del Fondo. Según trascendió, se trató de una presentación formal, que se extendió hasta después de las 19, en la que se elaboraron pautas de trabajo.

Hasta el momento, se desconoce la agenda concreta de los enviados del FMI, aunque trascendió que planean reunirse con autoridades de universidades, economistas del sector privado y dirigentes de la oposición.

Los técnicos del FMI por ahora no tuvieron contacto con el ministro de Economía, Amado Boudou. El funcionario viaja el domingo a Europa para iniciar las negociaciones para saldar la deuda con el Club de París.

Ninguna delegación del Fondo pisó el país en los últimos cuatro años, desde que el ex presidente Néstor Kirchner saldó la deuda con ese organismo e impidió la revisión contemplada en el Artículo IV del estatuto de la entidad.

Otras propuestas

En tanto, los rectores de las cinco universidades nacionales que integran el Consejo Académico del Indec –Tucumán, Buenos Aires, Tres de Febrero, Rosario y Mar del Plata– se comprometieron ayer a confeccionar índices de precios provinciales y nacionales, según informó el rector de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), Juan Alberto Cerisola y consignó la agencia oficial Télam. El resultado de este trabajo será elevado a las autoridades del Palacio de Hacienda y será independiente del que llevan adelante los técnicos del Indec y del FMI. Cerisola, en diálogo con la prensa tucumana, sostuvo que la iniciativa fue propuesta durante una reunión que mantuvieron con el ministro Boudou.
Fuente: cronista

Pacto social a tientas, sin INDEC y con fuertes subas en alimentos

Si, finalmente, Gobierno, sindicatos y empresarios llegan a tejer un pacto social, será a tientas. Pues no habrá un índice de precios confiable para cotejar el cumplimiento de las metas: el INDEC seguirá sin cambios al menos durante un año.

Si, finalmente, Gobierno, sindicatos y empresarios llegan a tejer un pacto social, será a tientas. Pues no habrá un índice de precios confiable para cotejar el cumplimiento de las metas: el INDEC seguirá sin cambios al menos durante un año. Este será el tiempo que llevará construir una nueva estadística nacional, en el supuesto de que se vaya adelante con el asesoramiento del Fondo Monetario Internacional.

Pero lo que representa un intento por contener la puja por los ingresos, ya pone al descubierto algunas otras cosas. Una es que, en los hechos, el Gobierno reconoce el avance de la inflación. Otra, que ha advertido que una espiralización del fenómeno puede poner en jaque , por si misma, las chances electorales del kirchnerismo.

Aun cuando haya más elementos sobre la mesa de negociaciones, está claro que las piezas esenciales del acuerdo serán precios y salarios. Como el objetivo es frenar la inercia y las expectativas inflacionarias, un recurso habitual consiste en discutir remuneraciones en base a la inflación futura.

Aquí ya asoma un problema central: cómo proyectar una tasa anual, con cifras oficiales inútiles para tal fin . Encima, cuando la tendencia marcha hacia escalones superiores en 2011. ¿Admitirán los gremios aumentos del orden del 18 % para todo el año, como auspicia el Gobierno y conformaría a los empresarios? “Difícil, difícil”, dice un economista que asesora a empresas y sindicatos. Pone el número más cerca del 25 % , o sea, semejante al índice de precios real de 2010. Y algunos puntos por debajo de la perspectiva que existe para 2011. “Sería mejor que un 30 % o un 35 %”, agrega.

El consultor supone que puede haber un sistema de bandas, al que se acomodarían los reclamos de los gremios y las posibilidades de los empresarios. Tendría la ventaja, dice, de contemplar la situación relativa de cada sector y a la vez evitar lo que ocurrió con las paritarias de este año, cuando los aumentos fueron del 21 % al 35 %.

En sus cálculos también entra la posibilidad de algún retoque posterior, una cláusula específica, si la curva de los precios no afloja. De nuevo el mismo problema: ¿quién estará en condiciones de decir cuál es la inflación verdadera? Un punto crucial en el andamiaje asoma en el costo de los alimentos . Tanto porque es un insumo básico en cualquier canasta familiar, como porque en ese espacio los incrementos superan largamente al resto de los bienes y servicios. Y más aún, porque allí hacen foco todos los gremios.

Las estimaciones privadas difieren en los porcentajes, aunque todas revelan cifras considerables. La consultora LGC, que dirige el ex ministro Martín Lousteau, calcula 33 % entre enero y octubre y 41 % para los últimos doce meses. Con un agregado significativo: en alimentos, el corrimiento de los precios luce generalizado.

La estrella, sin ninguna duda, es la carne vacuna. LGC resalta el encarecimiento de los llamados cortes delanteros, como paleta y falda, o sea, aquellos que consumen los sectores de menores ingresos: llegó al 22 % en algunos meses. En general, las consultoras le dan a la carne bien arriba del 50 % promedio en el último año.

Hay explicaciones diversas sobre el fenómeno. Desde la escasez de oferta, por la constante caída del stock ganadero, hasta la falta de inversiones y la ausencia de una política oficial que estimule la producción. Lo cierto es, finalmente, lo que pasa.

Con semejantes precedentes no resultará sencillo colocar las demandas sindicales dentro de los límites que pretenden Gobierno y empresarios. O en todo caso, será necesario ponerles cotas verificables y controlar que se cumplan. La figura cantada es Guillermo Moreno, aunque según se ve sus estrategias hace tiempo dejaron de garantizar resultados serios.

Es también previsible que entre las cláusulas figuren compromisos empresariales de inversiones, necesarias para acrecentar la oferta. Pero se sabe que las inversiones rinden frutos bastante después de ser anunciadas, para el caso de que hubiese voluntad efectiva de acometerlas y en la magnitud necesaria. No es lo que se percibe, pese al fuerte crecimiento de la economía.

Por lo demás, así muchos lo nieguen, los pactos sociales son una forma de contornear los reclamos gremiales. Siempre el punto de partida son los salarios. Si el proceso inflacionario no cede y luego se aplican ajustes correctivos, los precios ya se habrán comido parte del aumento inicial.

Todavía sembrado de dudas, el acuerdo tripartito que procurará contener la inercia y las expectativas generadas por el proceso inflacionario no representa, por si mismo, un plan de ataque general. Es una pata, la llamada política de ingresos.

Hay otras que caen directamente en el campo del Gobierno , como el gasto público y los instrumentos monetarios. ¿Aceptará incluirlas en el pacto social, tratándose de herramientas clave para seguir fogoneando la demanda en la economía? Como sostiene el asesor de empresas y sindicatos, “difícil, difícil”.

Puede ser que se trate de una movida oficial destinada a ganar tiempo, parecido al caso del FMI. El riesgo, en ese supuesto, es que los resultados estarán a la vista. Y lo que podría resultar un arma política para jugar en el año electoral, terminaría con forma de búmeran.

Está claro que los gremios reclaman porque la inflación recorta los sueldos y también por conservar espacios de poder, cada cual según su capacidad de presión o sus alinemientos. Así, existen salarios mayores a $ 14.000 mensuales, como los de los petroleros, y otros que no llegan a $ 3.000 , como en construcción y empleados de comercio. Todo, con independencia de los porcentajes negociados en paritarias.

Esto pasa entre los trabajadores convencionados, presumiblemente los más protegidos. Ni hablar, entonces, de la brecha con los empleados en negro. O con cualquier otro sector que tenga escasa o ninguna chance de pelearle a la trepada de los precios.

Fuente: clarin

Según Boudou, quienes “fogonean” el tema de la inflación, quieren el ajuste

El ministro criticó a quienes dan difusión al tema. Aceptó que hay “tensiones de precios” pero dijo que esto se resuelve con más oferta. Amado Boudou aceptó que los precios se modifican pero lo definió como “tensiones”. Y además, señaló que, detrás de quienes fogonean sobre la inflación, están quienes promueven un «ajuste» económico.

El ministro de Economía habló anoche por canal 9 y aseguró que “no es casualidad desde dónde se fogonean estos temas. Detrás del tema de la inflación viene el ajuste. Hay tensiones de precios que se resuelven con más oferta», detalló el funcionario nacional.

Boudou culpó a «los grupos concentrados» de pretender el ajuste y darle al aumento de precios «una difusión permanente» y «un lugar que no tiene» en la realidad. Hay que recordar la declaración del jefe de la cartera laboral respecto de que la inflación castiga a las clases media y alta y no a los sectores más bajos.

El ministro también criticó a las consultoras privadas que realizan relevamientos sobre el valor de los productos de primera necesidad: «Con tres llamados por teléfono pretenden hacer una encuesta de precios. No pueden ser creíbles y serias, no son comparables con el INDEC», opinó en una nueva defensa del organismo de estadísticas.

Además, cuestionó la «escalada mediática que se ha dado en el tiempo» sobre el aumento de precios. Y respecto de la decisión del Gobierno de pedir asistencia técnica al Fondo Monetario Internacional (FMI) para elaborar un índice de precios al consumidor nacional, el ministro aseguró que eso no significa que el organismo mundial venga «a echar un vistazo» a las cuentas del país.

«El Fondo no viene a echar un vistazo a las cuentas, que nadie espere un cambio de políticas públicas», señaló Boudou quien dijo que seguirá «trabajando» con los técnicos de universidades que realizaron un informe crítico sobre el funcionamiento del INDEC.

«Vamos a seguir trabajando con las universidades, pero no voy a hacer un circo para darle la tapa a un diario», indicó el ministro, a pesar de las duras críticas efectuadas por los autores del informe de las universidades al comportamiento actual del INDEC.

Fuente: clarin

El Indec advirtió que el nuevo índice de precios no afectará a los bonos indexados

El director técnico del organismo aseguró que el Índice Nacional de Precios al Consumidor demorará cerca de un año en salir a la luz. Bonos ajustados por inflación seguirán atados al índice actual que abarca a la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires.
Norberto Itzcovich dijo en una entrevista con Reuters que el índice CER seguirá funcionando como en la actualidad. «El CER está basado en el IPC del Gran Buenos Aires y va a seguir así», dijo el técnico con 18 años en el Indec, organismo cuyos datos de inflación son cuestionados por consultoras privadas y políticos de la oposición desde enero del 2007, cuando el Gobierno desplazó funcionarios clave de las áreas de medición de precios.

Itzcovich explicó que la medición nacional dará resultados distintos a los del índice de Buenos Aires debido a que son diferentes los patrones de consumo de cada ciudad y provincia. «Está claro que (…) puede arrojar diferencias con el del Gran Buenos Aires», firmó.

El funcionario, al referirse a los plazos en los que estará listo el nuevo indicador que recogerá los precios a nivel nacional, expresó que «es muy probable, no lo puedo asegurar, pero de acá a un año, de acá a un año y algo».
Un esfuerzo similar fracasó el año pasado pero Itzcovich enfatizó que se trata de un «proceso». «La certeza que tenemos es que está la decisión política de hacerlo, está el interés del Indec de hacerlo, y de hacerlo lo más rápidamente que se pueda», sostuvo.

La misión técnica del Fondo llegará a Argentina en la primera quincena de diciembre.

Hoy los títulos públicos emitidos en pesos tenían la mayor demanda, especialmente los que ajustan sus rendimientos en base al índice de precios al consumidor. El Indec reporta una inflación mensual estimada en torno a un tercio de la calculada por economistas privados y admitir que la Argentina ha mentido podría generar demandas de parte de los tenedores de bonos indexados por la evolución de los precios.

Alcances limitados
La cooperación anunciada entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Argentina no reemplazará los datos que alimentan al Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), un índicador ligado a la inflación minorista del Gran Buenos Aires, cuya cifra subestimada ha servido al Gobierno para reducir el costo de la deuda pública.

Un 24% de los bonos de la deuda pública de la Argentina se indexa por el coeficiente CER. La aplicación de un índice creíble es un demorado reclamo de economistas, opositores, calificadoras de riesgo y hasta del propio organismo que difunde las cifras, dado que las estadísticas actuales supuestamente esconden el impacto sobre la economía de una elevada inflación.

Cálculos de la consultora local Analytica indican que el Estado argentino ahorró unos 1.000 millones de pesos (u$s250 millones en el costo de su deuda pública en el primer semestre del 2010 por la subestimación de la inflación.

Fuente: Reuters

FMI e Indec harán juntos un nuevo Índice de Precios

El Gobierno busca descomprimir la presión por las críticas y sospechas de manipulación en torno a las mediciones de inflación en la Argentina, por lo que acordó con el organismo multilateral de crédito coordinar acciones para elaborar un nuevo índice conjunto que mida precios en el país.
El Gobierno apuesta a dar un salto de calidad en las estadísticas con la elaboración de un nuevo IPC a nivel Nacional, cuyo diseño estará a cargo de los técnicos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, que tendrán la cooperación y asistencia de sus pares del FMI, dijo ayer el ministro de Economía, Amado Boudou.

«Hemos solicitado al FMI una asistencia técnica para el diseño de un índice de precios a nivel nacional, en lo que será un salto de calidad en las estadísticas argentinas, impulsado por el Gobierno e implementado por el equipo del INDEC», señaló el ministro de Economía, Amado Boudou.

Norberto Itzcovich, director del Indec, enfatizó que el entendimiento consiste en un «acuerdo de cooperación.
El Gobierno busca descomprimir la presión por las críticas y sospechas de manipulación en torno a las mediciones de inflación en la Argentina, por lo que acordó con el organismo multilateral de crédito coordinar acciones para elaborar un nuevo índice conjunto que mida precios en el país.
por Télam
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«Hemos solicitado al FMI una asistencia técnica para el diseño de un índice de precios a nivel nacional, en lo que será un salto de calidad en las estadísticas argentinas, impulsado por el Gobierno e implementado por el equipo del INDEC», señaló el ministro de Economía, Amado Boudou.

A través del acuerdo de cooperación los técnicos del Departamento de Estadísticas del FMI colaborarán con los especialistas del INDEC en la elaboración del índice de precios al consumidor a nivel país.

La medición del IPC que se lleva adelante actualmente en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense, no registrará modificaciones.

El jefe de la cartera de Hacienda realizó el anuncio durante una conferencia de prensa que se llevó a cabo en el microcine del Ministerio de Economía, junto con la directora del INDEC, Ana María Edwin, y el director técnico del Instituto, Norberto Itzcovich.

Edwin aseguró que desde que se hizo cargo del INDEC, a mediados de 2007, «resultaba clara la necesidad imperiosa de actualizar los marcos metodológicos de las estadísticas oficiales, por ejemplo el Indice de Precios al Consumidor (IPC)».

«El IPC es simplemente una variación de precios y en el caso de nuestro país sólo se toma el aglomerado del Gran Buenos Aires», sostuvo Edwin, para luego añadir que «cada provincia tiene su propio índice, con métodos diferentes, algunos sumamente arcaicos como los autoponderados».

En tal sentido, la funcionaria recalcó que «es una fuerte necesidad, a semejanza de otros países, que nuestra República cuente con un IPC representativo de la totalidad del territorio nacional».

En cuanto al rol de los técnicos del FMI, adelantó que se mantuvieron «distintos intercambios con la otra parte desde principios de 2008, tales como metodología técnica y enfoques, a veces semejantes y otras diferenciales».

«A partir de la primera quincena del mes de diciembre vamos a comenzar a recibir a distintos técnicos del FMI, con la experiencia de que todos los países están representados en este organismo y podemos retroalimentarnos de distintios tipos de aportes», indicó.

Itzcovich fue más concreto en el terreno técnico y reconoció que será una tarea muy «compleja porque nuestro país es muy grande, con muchas distancias y climas, y en cada una de las regiones hay diferentes tipos de consumo».

«No es lo mismo el consumo de alimentos en la Ciudad de Buenos Aires, que en Misiones, Santa Cruz, Chubut o Tierra del Fuego», señaló Itzcovich.

A modo de ejemplo, hizo una especial mención al consumo de asado, cuyo gasto en «La Pampa duplica al de Chubut y más que duplica a la provincia de Mendoza, por lo que medir todo esto no es sencillo y el FMI tiene los técnicos para ayudarnos».

Las diferencias en el consumo también son claras a nivel nacional, en el transporte y la indumentaria, y todas estas cuestiones «tienen que estar reflejadas en el IPC nacional».

Si bien los funcionarios no precisaron los plazos de elaboración del nuevo índice, coincidieron en que «después de las reuniones con los técnicos del FMI, durante la primera quincena de diciembre, vamos a tener un panorama más claro en cuánto a los tiempos».

Itzcovich, en diálogo con Télam enfatizó que el entendimiento consiste en un «acuerdo de cooperación donde los técnicos del FMI van a colaborar con nosotros en la elaboración de un ínidice de precios al consumidor a nivel nacional».

El director técnico del INDEC dijo que esta la elaboración de un índice a nivel país es una «decisión que tenemos desde hace años, de manera de reflejar la diversidad de la estructura de gastos y consumo que existe en el país».

Fuente: Télam

La inflación de octubre fue del 0,8 por ciento, según el INDEC…

El INDEC informó este viernes que la inflación de octubre fue del 0,8 por ciento y reconoció que los precios de los alimentos y bebidas se ubicaron entre los que más subieron durante ese mes, al crecer un 1,4 por ciento, una situación que golpea sobre los sectores más humildes.

Si bien el nivel de subas que admite el organismo estatal está por debajo de la mitad del que miden las consultoras privadas (2,3), la coincidencia se da en que ambos señalan que son los alimentos los que impulsan hacia arriba a la inflación general.

Con el incremento de octubre, los precios acumularon un aumento del 9,2 por ciento en los diez meses transcurridos de 2010 y una suba del 11,1 por ciento con respecto a igual mes del año pasado.

A este ritmo, la inflación de todo el año se ubicará por encima del 12 por ciento, un número duplica a la suba de precios proyectada en el 6,1 por ciento por el Gobierno en el Presupuesto 2010, aprobado por el Congreso.

El organismo estatal reconoció que en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires los alimentos impulsaron la suba general de precios, con un incremento del 1,4 por ciento durante octubre, respecto de septiembre.

Pero al revelar la suba anual de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) a la que deben acceder todas las familias para no caer por debajo de la línea de la indigencia, el organismo dio un índice del 22,8 por ciento.

Ese nivel de aumentos se ubica por encima del doble de la suba general de precios, por lo que la inflación está golpeando más en los sectores económicamente más vulnerables, que son los que destinan la mayor parte de sus ingresos a esos productos.

Con esas cifras, el organismo contradijo al ministro de Economía, Amado Boudou, quien había sostenido días atrás que la inflación golpea sólo en los sectores más pudientes de la economía, por lo que «no es un tema» para el Gobierno.

El alimento que más subió en octubre fue el tomate redondo, que aumentó un 62,2 por ciento en sólo un mes, seguido por la entraña, cuyo precio avanzó un 19,2 por ciento, y en tercer lugar quedaron los cortes populares de carne, con un 4,4 por ciento.

Los lácteos y huevos subieron 0,3; las frutas aumentaron 0,8; las verduras se incrementaron 1 por ciento; los precios del azúcar, la miel, los dulces y el cacao avanzaron 1,4; los de las gaseosas y jugos variaron un 0,8 y los de las bebidas alcohólicas subieron 1,5 por ciento.

Siempre según el INDEC, productos de panificación, cereales y pastas bajaron 0,2 por ciento; los aceites y grasas retrocedieron 0,1; el zapallito descendió en una 27,4; la frutilla bajó 20,5 y la berenjena, 13,3.

«Los bienes, que representan un 62 por ciento de la canasta, tuvieron una variación del 1 por ciento, mientras que los servicios, que representan el restante 38, registraron una suba del 0,6, con respecto al mes anterior», dijo el INDEC.

Fuente: 26noticiass

Boudou y Arlía: Dos K que se enfrentan por el Indec

Que Moreno niegue la inflación no sorprende, que Boudou diga que “la misma solo preocupa a la clase media” tampoco, pero que un ministro oficialista la reconozca es un gran hallazgo.
Todo el mundo sabe, hasta el más kirchnerista, que los datos que revela sobre inflación el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos no coinciden con la realidad.

A pesar de esto el ministro de Economía de la Nación, Amado Boudou dijo hace unos días que “en grandes porciones de la población argentina, la inflación no es un tema» aunque «en algún sector de la población, clase media alta, puede tener algún impacto». Por su parte Guillermo Moreno aseguró: “La inflación que tenemos es la que publica el Indec”.

Para diferenciarse de estas apreciaciones y como una mancha en el paraíso kirchnerista, Alejandro Arlía, el ministro de Economía de la provincia de Buenos Aires, contradijo los dichos del propio Boudou. El titular de la cartera bonaerense manifestó: “Cuando tenemos un problema de precios, evidentemente, no hay ninguna posibilidad de que los pobres no se vean afectados por este aumento”. Si bien criticó las mediciones privadas de inflación, Arlía advirtió: “No hay que ‘comprar’ lo que no sucede pero tampoco hay que negar la realidad”.

Según los datos del Indec, la inflación en lo que va del año no supero un digito, mientras que casi todas las consultoras privadas han pronosticado en estos 11 meses una inflación del más del 20 por ciento.

Alejandro Arlía, evitó polemizar con los dichos del titular de la Cartera de Hacienda, porque “Tengo una relación de afecto entrañable con Amado Boudou” y porque, además, “no me gusta opinar sobre lo que dicen los ministros nacionales, cada uno tiene su responsabilidad y sus fundamentos, y por lo tanto se me hace muy difícil” hablar sobre las polémicas declaraciones de su par nacional.

Pero igualmente el funcionario bonaerense admitió que le “preocupa” la disparada de precios, aunque aclaró que “más que preocupase, hay que ocuparse y yo creo que el Gobierno Nacional está haciendo fuertes esfuerzos para reducir la Inflación”, intentó remendar su error de criticar al Ejecutivo nacional.

¿Cómo tomará Boudou estas declaraciones?, porque antes cuando acusaciones de este tipo venian de la oposición él manifestaba que lo que hacían desde la vereda de enfrente es criticar y poner palos en la rueda. Ahora la realidad se la mostró el ministro de Economía bonaerense, el ministro de Scioli ¿Quién tendrá el tiron de oreja, Boudou o Arlía? Siempre el hilo se corta por lo más delgado.

Fuente: www.agenciacna.com

Inflación: el INDEC desmiente a Boudou

El ministro de Economía negó que haya inflación y aclaró que en todo caso la suba de precios afecta a los sectores de ingresos más altos. Pero hasta los mismos datos del IPC del INDEC desmienten las afirmaciones del funcionario.
La semana pasada, el ministro de Economía Amado Boudou afirmó que “la inflación no es hoy un tema en grandes porciones de la población argentina” y agregó que “sí puede afectar a un sector de la clase media alta”. También sostuvo que la inflación es la que publica el INDEC.

Realmente llaman poderosamente la atención las afirmaciones de Boudou porque es de manual de economía que la inflación siempre afecta con mayor intensidad a los sectores de menores ingresos dado que tienen una escasa o nula capacidad de ahorro y su salario lo destinan al consumo. Es más, cuánto más humildes son los sectores sociales, un porcentaje mayor de su ingreso es destinado al rubro alimentos y bebidas. La gente más humilde no tiene ingreso suficiente para comer y además ahorrar.

Ahora bien, aún haciendo el enorme esfuerzo de imaginación que supone creer que los datos del INDEC son válidos, surge el curioso hecho que tomando el IPC del INDEC se observa que lo que más aumentó en los últimos 12 meses (septiembre 2010 versus septiembre 2009) fueron los alimentos y bebidas.

Para el período mencionado, el IPC del INDEC muestra que el rubro Alimentos y Bebidas subió el 15,5%, luego le sigue Esparcimiento con un incremento del 14,4% y en tercer lugar está Indumentaria con el 13,6% de suba. Es decir, de todos los rubros del IPC del INDEC, el que más subió fue justamente alimentos y bebidas.

De lo anterior se desprende que, aún tomando como serios los datos del INDEC, Boudou no puede afirmar que la inflación es un tema que afecta a los sectores de clases altas porque lo que más subió fueron los alimentos que es el rubro en el que más dinero destinan de sus ingresos los sectores más humildes. Puesto en otros términos, ni los datos del INDEC avalan la afirmación de Boudou.

Segundo punto, si tomamos la Canasta Básica Alimentaria (CBA) que define la línea de indigencia, los datos de FIEL muestran que entre octubre del año pasado y octubre de 2010 la CBA subió el 36,2%. Este solo dato nos muestra la ferocidad con que la inflación que genera el BCRA está lastimando sin piedad a los sectores más humildes. Por su parte, la Canasta Básica Total (CBT), que define la línea de pobreza, subió, en el mismo período, el 25%.

Si tomamos los datos del Buenos Aires City, entre diciembre 2009 y septiembre de este año, el IPC aumentó el 18,9% y Alimentos y Bebidas creció el 29,3%. Nuevamente, el rubro más sensible a los sectores de menores ingresos fue el que más subió. Si tomamos la CBA de FIEL, desde diciembre hasta septiembre, subió el 23%. Considerando que la CBA tiene menos componentes que el rubro alimentos y bebidas del IPC, los números son bastante consistentes. Los precios de los alimentos están haciendo estragos en la población.

Por donde se miren los datos, siempre los sectores más humildes son los más afectados, con lo cual caben dos posibilidades: a) que Boudou tenga traspapelados los datos o b) considere que negando la realidad se solucionan los problemas.

En rigor sería muy poco profesional creer que no hay inflación cuando el BCRA viene expandiendo moneda al 32% anual al punto que los billetes de 100 pesos ya no alcanzan y el gobierno argentino le ha tenido que pedir a Brasil que imprima billetes de 100 pesos porque la Casa de la Moneda local no llega a tener la capacidad de producir billetes a la velocidad que exige la inflación.

Humildemente quiero resaltar que hace rato que vengo insistiendo que estamos devorando series de billetes de 100 pesos y que vamos por la letra L. Hasta en algún momento dije, en forma irónica, que si seguíamos a este ritmo íbamos a terminar haciendo billetes de 100 pesos con un sistema alfanumérico. Ironía que creo haber escrito en la Lanación.com y que me hizo ganar el insulto de los conocidos ciberk. Esto confirma una vez más que podrán insultarme todo lo que quieran, pero lo concreto es que ya no dan abasto las maquinas de imprimir billetes del la Casa de la Moneda. La realidad se impuso por sobre los insultos, de la misma forma que la realidad se impone por sobre las insólitas afirmaciones de Boudou.

En general el gobierno se niega a reconocer la inflación que se acelera (en octubre tuvo un notable aumento) y cuando habla del tema utilizan palabras como tensiones de oferta y demanda o cosas por el estilo. En definitiva el argumento del gobierno pasa por afirmar que si algunos precios suben es porque la demanda crece más rápido que la oferta. Por lo tanto, sostienen desde el kirchnerismo, la solución a este problema “menor” de la inflación no se corrige dejando de emitir moneda sino con más inversiones.

Hagamos el enorme esfuerzo de imaginación de suponer que las expansión monetaria del 32% que está haciendo el BCRA es absolutamente inocua desde el punto de vista inflacionario y que el problema tiene que ver con tener más inversiones.

La CEPAL, una institución que no puede ser catalogada de neoliberal, lacaya del FMI o hija del menemismo, acaba de dar los datos de la Inversión Extranjera Directa (IED) en América Latina y el Caribe para el primer semestre de este año.

En total la región recibió U$S 50.345 millones de IED en los primeros 6 meses de 2010. El ranking fue el siguiente: 1) Brasil recibió U$S 17.130 millones, 2) México U$S 12.238 millones, 3) Chile U$S 8.029 millones, 4) Colombia U$S 4.115 millones, 5) Perú U$S 3.444 millones y 6) Argentina U$S 2.174 millones.

Dos datos a considerar. En primer lugar, Perú ya nos desplazó del 5 puesto. Segundo, en los primeros seis meses de este año Argentina recibió U$S 2.174 millones de IED y en los recesivos primeros 6 primeros meses del años pasado recibimos U$S 2.016 millones. Es decir con crisis internacional o sin crisis internacional la IED es mínima en Argentina. Literalmente estamos fuera del mundo.

La pregunta que deberían formularse en el Gobierno es: ¿por qué a la hora de invertir todos miran para otros países como Brasil, Chile, Colombia o Perú y a nosotros nos tacharon del mapa? Si tan exitoso es el modelo k, ¿por qué no atrae inversiones?

Nuevamente la realidad muestra que ni siquiera las arrevesadas teorías inflacionarias del gobierno para explicar la inflación tienen sustento en los datos de instituciones como la CEPAL. Los datos de la CEPAL muestran que no es cierto que Argentina navega en un mar de inversiones como afirman desde el gobierno y que el mágico modelo k ha aumentado tanto la demanda, que necesitamos un tsunami de inversiones para abastecer la fenomenal demanda interna. La inversión no existe, la IED es casi un dato marginal y lo único concreto es que el Central está inundando la economía de billetes, mientras el gobierno inunda el país de incertidumbre jurídica al avasallar los derechos de propiedad espantando cualquier proceso sostenido de inversiones.

En síntesis, Boudou podrá decir que hoy la inflación no es un tema y que solo afecta a los sectores de la clase media. Si tan convencido está de esa afirmación, podría demostrarlo caminando solo por el conurbano y entrando a los supermercados y comercios para que la gente más humilde lo aplauda y le agradezca la estabilidad de precios.

Fuente: Roberto Cachanosky

Para el Indec, la inflación de septiembre fue del 0,7%

El Indec informó el viernes que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) creció 0,7% el mes pasado. La cifra representa menos de la mitad de lo estimado por las mediciones privadas, que reportaron aumentos en los precios de entre 1,5% y 1,8%. Los precios subieron 8,3% en el año, según la medición oficial.

Para el Indec, los alimentos se incrementaron apenas 0,8% el mes pasado. Los privados mencionaron a este rubro como el principal impulsor de la canasta básica de septiembre, con subas de entre 1,7% y 2,5%. La carne, que para las mediciones extraoficiales subió más del 5%, se valorizó para el Indec 1,7% mensual.

El IPC oficial remarcó un fuerte incremento en el rubro Esparcimiento, del 1,8%. El aumento fue superior incluso al estimado por consultoras privadas. Gabriel Rubinstein y Asociados, por caso, midió una suba en este rubro del 0,5%.

Del otro lado, el Indec informó una suba de precios del 1% para el rubro indumentaria en pleno cambio de temporada, contra los privados que reportaron subas de hasta 2%.
Fuente: cronista.com

Según el Indec una persona vive con $ 4,55 por día(…)

El organismo que maneja el Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, sigue mostrando sus estimaciones que parecen no estar muy acorde a la realidad que se vive. Según el Indec el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para un hogar tipo es de $ 545,63 mensuales. Mientras tanto las consultoras privadas demuestran que la cifra se duplica.

El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, vive otra realidad o así parece. El costo de la Canasta Básica Alimentaria para un hogar tipo de cuatro miembros, que representa a una familia que vive en el Gran Buenos Aires y está compuesta por un jefe de familia de 35 años, su esposa de 31 años, una hija de 8 años y un hijo de 5 años, es 545,63 pesos según el Indec.

Para ser aún más explicativo con estos números, se puede resaltar que según Guillermo Moreno, una persona se puede alimentar durante un mes con $ 4,55 por día, es decir con $ 18,18 diarios una familia puede comer bien y no caer en la indigencia.

Sin embargo los números que muestran las consultoras privadas son mucho mas elevados, para el mismo grupo familiar, la medición del mes de septiembre, afirma que en septiembre se necesitaron $1037,50 para la CBA y en el caso de la Canasta Básica Total (CBT) para ese mismo hogar ascendió a $ 1953.20 lo que, en este último caso, determina un aumento de 362 pesos en un año.

En septiembre, el costo de la CBA registró un aumento del 0,1% respecto de agosto. Se trata de la menor variación mensual registrada desde mayo del año pasado. La CBT, por su parte, mostró en septiembre un incremento de 0,2%, el menor desde julio de 2009.

Pero lo más sorprende esta por venir, según el gobierno ellos enarbolan la bandera de la redistribución y así lograr erradicar la pobreza, sin embargo la realidad muestra otra cosa.

La CBA, es decir la canasta de alimentos para los que menos tienen, aumentó desde 2007 a la actualidad 166 por ciento, mientras que la CBT lo hizo en un 147 por ciento.

Ampliando un poco más estos datos, si se clasifica a la población según su nivel de ingresos en diez partes la proporción de recursos destinados a cubrir el gasto en alimentos del estrato más pobre duplica al del más rico, al ser de 53,9 contra 23,8 por ciento, respectivamente.

De acuerdo a esta clasificación, desde enero de 2007 el segmento más pobre de la población registró una inflación de 129 por ciento, unos 24,8 puntos más que la suba de precios que afectó al estrato de mayores ingresos, que fue del 104,2 por ciento.

Los precios de los alimentos aumentaron un 162 por ciento entre principios de 2007 y este mes, lo cual golpeó principalmente a los sectores económicamente más vulnerables, dado que ellos destinan la mayor parte de sus ingresos a esos productos.

La realidad es que el Indec, encabezado por Guillermo Moreno, lo único que hace es tergiversar los números, mediante herramientas matemáticas, estadísticas, econométricas, pero lo que no pueden hacer es tapar la indigencia y la pobreza que se refleja en los sectores más vulnerables del país. Se puede reconocer que durante el mandato de los Kirchner la pobreza e indigencia se redujo teniendo en cuenta los números del 2003 pero lo que ellos, el gobierno, tiene que sacar a la luz es las cifras reales, los números que hay en los comercios, porque en ningún lugar de nuestro país se puede comer por $ 4,50 por día para no ser indigente.

1 DE CADA 3 EMPLEOS EN EL SECTOR PRIVADO NO ESTÁ REGISTRADO

El fuerte crecimiento de los empleos registrados en el sector privado se detuvo en el año 2008, al punto que el INDEC recientemente reportó 8 trimestres seguidos con la incidencia del empleo no registrado estabilizada en el entorno del 36%. Esto pone en evidencia que uno de los pilares en que se sustentó la generación de empleos “en blanco” fue la fuerte licuación de costos laborales que produjo la megadevaluación. En la medida que los salarios recuperaron el nivel que tenían antes de la crisis del año 2002, se explicita que para avanzar en la disminución de la informalidad es imprescindible reformas en materia laboral e impositiva.

La informalidad laboral es un fenómeno que se integra por una multiplicidad de modalidades. Incluye, por un lado, una gran cantidad de personas (aproximadamente el 25% del total de ocupados) que desarrolla actividades no asalariadas, como cuentapropistas, que en la mayoría de los casos lo hacen sin cumplir con las normas tributarias y de la seguridad social. Por otro lado, aparecen las contrataciones que realizan las empresas por fuera de la normativa laboral. Finalmente, la informalidad se integra por contrataciones irregulares en el sector público, servicio doméstico, planes de empleo y trabajadores sin salario.

Recientemente el INDEC ha publicado las bases de datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) correspondientes al 1º y 2º trimestres del 2010. Con esta fuente disponible se puede desagregar la información y concentrar la atención en las contrataciones irregulares que realizan las empresas privadas. Considerando el período para el cual se cuenta con información comparable, que proviene de la nueva EPH continua, aparecen las siguientes tendencias:

· En el año 2004, la tasa de empleo asalariado no registrado en empresas del sector privado superaba el 45% del empleo total.

· Entre los años 2004 y el 2008 la registración aumenta en casi 10 puntos porcentuales, llegando la incidencia el empleo no registrado a menos del 37% del empleo total.

· Entre el segundo trimestre del año 2008 y el segundo trimestre del año 2010 la tasa de empleo asalariado no registrado se mantuvo oscilante en el entorno del 36%.

Los datos oficiales muestran una acelerada mejora en la calidad de los empleos entre los años 2004 y 2008. Pero la misma fuente señala que este proceso está detenido desde hace 2 años. Si bien hay oscilaciones entre trimestres, la tendencia es claramente hacia una estabilización en la proporción de los empleos que se generan en las empresas privadas por fuera de la normativa vigente.

Para interpretar estas tendencias hay que considerar que la masiva generación de empleos “en blanco” a partir de la salida de la crisis del año 2002 se sustentó en la combinación de alto crecimiento en la producción con una fuerte licuación de costos laborales asociada a la megadevaluación. Resulta muy ilustrativo en tal sentido que el INDEC reporte una caída de los costos laborales del orden del 45% luego de la devaluación. En este contexto, la novedad en los últimos trimestres es que si bien la economía ha retomado la senda de la expansión, la recuperación de los salarios ha llevado los costos laborales a niveles parecidos a los que había antes de la devaluación. Sin costos laborales licuados, la incidencia del empleo no registrado ha tendido a estabilizarse en el entorno del 36%, aun cuando la economía muestra dinamismo. La buena noticia de que los salarios recuperaron el poder de compra, viene asociada con la explicitación de que la informalidad laboral tiene un carácter estructural.

Más de la mitad (55%) de la informalidad laboral en el sector privado es generada en emprendimientos con menos de 5 trabajadores. Otro 20% en empresas con entre 6 y 10 trabajadores y un 10% adicional en empresas con entre 11 y 25 trabajadores. Es decir, el 85% de los asalariados no registrados trabaja en empresas con menos de 25 trabadores. Sin negar que el fenómeno de la informalidad responde a una multiplicidad de factores, es muy sugerente la clara asociación entre niveles de incumplimiento de las normas y las restringidas capacidades financiera y administrativa de los pequeños empleadores.

La experiencia muestra que impulsar la generación de empleo en base a licuar salarios, como ocurrió hasta el año 2008, es un mecanismo no sostenible. Planteado en otros términos, se acumulan las evidencias de que sólo con cambios estructurales en el sistema impositivo y laboral se podrá aumentar y mejorar de manera sustentable el empleo.

El maravilloso mundo de Néstor y Cristina

A pesar de la crisis financiera que asola a buena parte del mundo occidental, el Indec asegura que la pobreza bajó 2 puntos porcentuales en Argentina en el último año. Los datos que el oficialismo impulsa para favorecer una candidatura oficial en el 2011 y las cifras que alejan cada día más al organismo público de la sociedad.

El maravilloso mundo de Néstor y Cristina
A pesar de la crisis financiera que asola a buena parte del mundo occidental, el Indec asegura que la pobreza bajó 2 puntos porcentuales en Argentina en el último año. Los datos que el oficialismo impulsa para favorecer una candidatura oficial en el 2011 y las cifras que alejan cada día más al organismo público de la sociedad
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Si faltaba algo para generar todavía más dudas sobre la situación en nuestro país, era que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) asegurara que la pobreza en nuestro país, en medio de la crisis financiera que azota a una buena parte del mundo, descendió dos puntos porcentuales en el primer semestre del 2010, ubicándose en el 12 por ciento.

El organismo público, que se mantiene intervenido desde el año 2007 y en su comandancia hay funcionarios adictos al régimen de trabajo del polémico Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, ha sido desde el momento mismo de su intervención, uno de los grandes karmas de la gestión kirchnerista.

El Indec aseguró que la pobreza afecta al 12% de la población y descendió 1,9 puntos en los últimos doce meses, así como también que la indigencia sigue en baja, ubicándose en el 3,1%, descendiendo 0,9% en el período estudiado. El descreimiento popular en los números del organismo estatal, ha dado en todo este tiempo números que muchas veces sonaron ridículos a los oídos de la ciudadanía, que van desde la cifra oficial de la inflación, hasta el nivel de inversión, tanto nacional o extranjera que tiene nuestro país.

Los menores niveles de pobreza se registran en Ushuaia, 1,9 por ciento; Río Gallegos, 2,7; Capital Federal 3,7; y Comodoro Rivadavia, 4,4 por ciento, entre otras ciudades. En tanto las regiones con mayor nivel de pobreza fueron las del Noreste con un promedio del 21,8 por ciento, y la del Noroeste, con el 14,7 por ciento.

La pobreza afecta al 23,5 por ciento de los ciudadanos de Corrientes, al 21 por ciento de los de Formosa y Resistencia, y al 20 por ciento de Catamarca, y Concordia, entre otras. En el Gran Buenos Aires, los niveles de pobreza alcanzaron al 11,2 por ciento de los habitantes, entre los cuales 2,5 por ciento son indigentes.

El manejo de los números del Indec por parte del gobierno nacional, no ha hecho más que aumentar el recelo popular a las cifras que brinda el organismo público, que había pasado las décadas en forma totalmente independiente, sin que ningún gobierno pudiera tocar las cifras oficiales, ya que ni siquiera la última dictadura militar, que gobernó el país a sangre y fuego, lo tocó.

En medio de una campaña electoral naciente, donde todos los candidatos miran de reojo las elecciones presidenciales del año que viene, estos números del organismo público son un bálsamo para el oficialismo, que puede salir a mostrar un retroceso sustancial en los índices de pobreza e indigencia, aunque dichos números muchas veces tengan poco que ver con la realidad.

Desde el kirchnerismo más duro y ortodoxo, se señala que entre ambas mediciones, la economía creció el 9,0 por ciento, la desocupación bajó al 7,9 por ciento, desde el 8,8 de junio del 2009, y se implementó la Asignación Universal por Hijo, una de las políticas implementadas por la actual administración que mayor incidencia han tenido al momento de medir la pobreza y la indigencia.

Es válido preguntarse cuáles son las ganancias que tiene el oficialismo al ocultar los datos de la realidad con las mediciones “dibujadas” que hace el Indec mensualmente con la inflación, los índices de crecimiento, de construcción, de empleo, etc, etc, y que han hecho que no sólo se pierda la credibilidad en los números oficiales en la Argentina , sino en el exterior donde la Argentina sigue perdiendo cada día más el respeto internacional.

Todo este marco de situación ha llevado a la sociedad a tener un alto grado de descreimiento hacia los números que da a conocer periódicamente el estado nacional, porque es vox populi dentro de la ciudadanía que nada de lo que hace o dice el Indec es verdad. Las cifras oficiales, que son las que mueven a un Estado para hacer sus negocios tanto dentro como fuera del mismo, como por ejemplo negociar con los bonistas “old hout”, son indispensable para la construcción de un país serio, pero mientras las cifras se sigan manejando desde un despacho de la Casa Rosada o desde la Secretaría de Comercio Interior, va a ser muy difícil para el gobierno forjar una imagen de unidad ante la comunidad internacional.

Fuente: www.agenciacna.com

La mitad de los hogares gana menos de 3.000

Según Indec, el 10 por ciento más rico del país recibía el 29 por ciento de los ingresos en el segundo trimestre de 2010. Según Indec, el 10 por ciento más rico del país recibía el 29 por ciento de los ingresos en el segundo trimestre de 2010. En tanto, el 10 por ciento más pobre apenas logra el 1,7 por ciento, según se desprende de los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

De acuerdo con el informe de la Evolución de la distribución del Ingreso, basado en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), los hogares de más altos ingresos cobraban, en promedio 11.053 pesos por mes durante el segundo trimestre de 2010. En cambio, en el decil (el 10 por ciento de las familias) más pobre es de 658 pesos.

La relación muestra que los ingresos en el 10 por ciento de los hogares más ricos es 8,1 veces más que en los que están en la base inferior de la escala.

En tanto, la mitad de las familias argentinas vive con menos de 100 pesos diarios (tres mil pesos por mes). Un cuarto de los hogares cobra más de cinco mil pesos mensuales y sólo 10 por ciento gana más de 7.650 pesos, sumando todos los ingresos del grupo familiar.

En otro orden, para el Indec, la distribución del ingreso mejoró en lo que va de 2010, según el coeficiente de Gini.

Si se observa a la población según su ingreso per cápita familiar (lo que percibe la totalidad del hogar dividido la cantidad de miembros), el Gini bajó a 0,442 punto en el segundo trimestre de 2010, frente a 0,447 que es el indicador de los primeros tres meses, y 0,446 el del mismo período del año pasado.

Para el organismo oficial, la distribución del ingreso mejoró durante los últimos seis años.

Asimismo, el Indec indicó que la mediana (valor que divide en dos partes iguales la escala) del ingreso según la ocupación principal es de: 3.500 pesos para la categoría profesional; 2.300 pesos la técnica; 1.800 la operativa y mil pesos, la no calificada.

De acuerdo con estos valores, los ingresos para los profesionales subieron 16 por ciento en un año, mientras que los correspondientes a los técnicos aumentaron 21 por ciento, 20 por ciento para operarios y 25 por ciento para los ocupados no calificados.
Fuente: lavoz.com.ar

Para el Gobierno, la pobreza sigue «disminuyendo»…

Según el INDEC, durante el primer semestre del año la pobreza se redujo en 1,2 por ciento, mientras que la indigencia bajó 0,4 por ciento. Sin embargo los números de una consultora privada estima que hay más de un 30 % de personas en situación de pobreza.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos manejado por el Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, publicó los nuevos índices de pobreza, según el informe en la primera mitad de este año la pobreza bajó de 13,2% a 12%, en tanto la indigencia se redujo del 3,5% a 3,1% . Esto significa que ahora en todo el país, según la estadística oficial, habría 4.256.000 pobres, de los cuales 1.253.000 serían indigentes. Y destaca que estos números “reflejan la continuidad de una pendiente descendente de las tasas que se inicia en el primer semestre de 2003”.

Según el INDEC, los menores niveles de pobreza se registraron en las ciudades de Ushuaia (sur, 1,9%), Río Gallegos (sur, 2,7), Capital Federal (3,7) y Comodoro Rivadavia (sur, 4,4).

En tanto las regiones con mayor nivel de pobreza fueron las del noreste con un promedio del 21,8% y la del noroeste con el 14,7%.

En la populosa periferia de la Ciudad de Buenos Aires — donde viven unos 11 millones del total de 40 millones de habitantes — el nivel de pobreza alcanzó 11,2%, entre los cuales 2,5% son indigentes.

En base a los números informados por el INDEC, el índice de pobreza en 12%, es el menor desde 1994 a la fecha, cuando se ubicó en 16,1%.

Sin embargo, un trabajo realizado por la consultora privada Ecolatina, revela otros números totalmente ambiguos, el 31,4% de los hogares no logra reunir los ingresos suficientes para comprar la canasta básica total de alimentos y servicios, y 11,3% están vedados de poder comprar la cesta mínima de alimentos.

Habrá que estar atento que sucederá con los números oficiales cuando se apruebe en el Parlamento la “normalización del INDEC”. Recordemos que hay un proyecto que ya tiene media sanción, el mismo marca algunos cambios en el manejo del Instituto.
Fuente: www.agenciacna.com

El Indec choca otra vez con el cálculo privado de la inflación

El organismo estimó un alza de precios del 0,7% en agosto, lejos de otras mediciones. Las consultoras relevaron incrementos del orden del 1,4% o más durante el mes pasado. Se encarece la canasta de alimentos. La inflación de agosto fue de 0,7%, impulsada por los aumentos en alimentos, indumentaria y salud, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

De esta forma desde enero el costo de vida sufrió una variación positiva de 7,5%. Si se computan los últimos 12 meses (agosto 2010/agosto 2009) la suba de precios es de 11,1%, que supera holgadamente la pauta de 6% estipulada en el presupuesto nacional para este año.

En tanto, los precios mayoristas subieron el mes pasado 0,9% y 10,3% en ocho meses.

A su vez, el costo de la construcción aumentó 2% en agosto y 12,7% lo que va del año.

Las cifras difundidas por el Indec están sensiblemente por debajo de los cálculos de consultoras y economistas privados.

Tras conocerse los datos oficiales, Ecolatina dijo que la inflación de agosto fue de 1,8%, mientras que para la consultora Buenos Aires City que dirige la ex directora de IPC del Indec, Graciela Bevacqua, la calculó en 1,5%. Los trabajadores del Indec enrolados en ATE realizaron ayer un nuevo abrazo de protesta al edificio del organismo, en rechazo de lo que consideran una manipulación de los índices oficiales.

La inflación oficial de agosto estuvo impulsada por aumentos de 3,1% en atención de la salud, 1% en indumentaria y 0,8% en alimentos.

El incremento en salud es producto de los ajustes que efectuaras las empresas de medicina prepaga. En el Congreso Nacional está parado desde diciembre un proyecto que procuraba regular el sector.

En indumentaria el alza de 1% se produjo a partir de aumentos de 1,2% en la ropa y de 0,7% en calzado. El alza de 0,8% en alimentos fue arrastrado por alzas de 0,8% en panificados, 0,7% en carnes, 1% en lácteos y huevos, 1,2% en verduras y 0,5% en frutas. El costo de la vivienda mostró un incremento de 0,5%, impulsado por aumento de 0,6% en los alquileres, que se compensó parcialmente con suba de 0,1% en los servicios.

El índice general se atenuó por la estabilidad en el sector esparcimiento luego de cumplido el período de vacaciones invernal. A consecuencia, el índice turismo mostró una baja de precios de 1,5%.

Peor para los más pobres
En ese orden, la inflación para los estratos más pobres de la sociedad se ubicó entre el 15% y el 20% en los últimos 12 meses. El Indec indicó que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) -que marca la línea de indigencia- aumentó 0,7% en agosto contra julio y 20,3% respecto al mismo mes de 2009. En ocho meses la CBA acumuló un incremento de 13,2%, contra un índice de precios al consumidor que subió 7,5%. En tanto, la Canasta Básica Total (CBT) -con la que se mide la línea de la pobreza- subió 1% en agosto respecto al mes anterior y 15,7% en 12 meses.

De esta forma, en siete meses la CBT creció 10,1%.

De acuerdo con los cálculos del organismo una familia tipo necesita ingresos por $ 1.186,53 por mes para no caer en la pobreza. Y para superar la indigencia el mismo grupo tiene que obtener recursos por $ 545,63.

La diferencia en los porcentajes de aumentos entre ambas canastas obedece a las distintas conformaciones. Mientras la CBA sólo incluye alimentos mínimos para la subsistencia de un matrimonio y dos hijos, la CBT agrega una serie de servicios básicos. En consecuencia en ambas canastas el comportamiento de los alimentos resulta fundamental. Fuente: (DyN)

JURISTAS Y TÉCNICOS DISCUTIRÁN EN LA UBA SOBRE EL CUESTIONADO FUNCIONAMIENTO DEL INDEC

El próximo jueves 9 a las 18.30 en el Salón Verde. La Asociación Civil “Ciudadanos Libres por la Calidad Institucional” realizará el próximo jueves 9 una conferencia en la Facultad de Derecho de la UBA, en la que juristas y técnicos en materia estadística debatirán sobre el cuestionado funcionamiento del INDEC.

El encuentro se realizará en el Salón Verde de la UBA a las 18.30. Disertarán el abogado constitucionalista y diputado nacional, Ricardo Gil Lavedra, el doctor Féliz Loñ, la profesora y ex Directora de Precios del INDEC, Graciela Bevacqua, y el abogado, presidente de “Ciudadanos Libres”, José Lucas Magioncalda.

Magioncalda advirtió que el “deficiente” funcionamiento del INDEC, consecuencia, a su criterio, de la política de manipulación de dicho organismo que ejerce el gobierno nacional, pone en riesgo la seriedad y legalidad del CENSO NACIONAL convocado para el 27 de octubre del corriente año.

“La realización del CENSO en las actuales condiciones del cuestionado organismo importa un riesgo para la protección del secreto estadístico, implica condenar a nuestro país a regirse con estadísticas dudosas durante la próxima década y hasta podría poner en riesgo el sistema de representación política, si el gobierno nacional decidiera disminuir o aumentar artificialmente la cantidad de habitantes censados en las distintas provincias, conforme las posibilidades electorales que estime para sí el oficialismo en cada estado provincial”, alertó.

Para Magioncalda el tratamiento en el Congreso del proyecto de ley destinado a normalizar el INDEC torna “conveniente” la postergación del CENSO para evitar un dispendio inconducente de recursos que “serían bien aprovechados si el CENSO se realizara después de la esperada normalización”.