El presidente interino de Túnez, Fouad Mebaza, proclamó ayer (3/03) en un discurso televisado el 24 de julio próximo como fecha de elecciones para “la formación de una Asamblea Nacional Constituyente”, encargada de redactar una nueva Carta Magna, pero el éxodo líbio puede ser una bomba de tiempo.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El presidente interino de Túnez, Fouad Mebaza, proclamó ayer (3/03) en un discurso televisado el 24 de julio próximo como fecha de elecciones para “la formación de una Asamblea Nacional Constituyente”, encargada de redactar una nueva Carta Magna.
Asimismo, se renovarán las 2 asambleas con el objetivo de «consagrar las aspiraciones del pueblo tunecino y su revolución», afirmó el mandatario interino en su intervención.
El presidente tunecino aseguró que «se anunciará un nuevo Gobierno provisional que trabajará hasta que sea operativo el consejo constituyente», que será «elegido por los ciudadanos en unas elecciones libres y transparentes por primera vez en la historia del país».
Mebaza añadió que «se elaborará una nueva normativa electoral antes de fin de mes» y precisó que «el proceso electoral se está organizando al mismo tiempo», aunque no ofreció mayores precisiones.
Argumentó asimismo que la reforma es necesaria porque «la Constitución actual no responde a las nuevas aspiraciones del pueblo ni puede consolidar la democracia real».
“Proclamamos la entrada en una nueva era en el marco de un nuevo sistema político que rompe definitivamente con el régimen depuesto”, expresó Mebaza, que asumió el cargo tras la renuncia del presidente Zine El-Abidine Ben Ali el pasado 14 de enero.
El dirigente confirmó que continuará al frente de Túnez hasta que tengan lugar los próximos comicios
Por su parte, Prensalatina informa que el primer ministro interino de Túnez, Beji Caid Essebsi, continuó hoy (4/03) las consultas para completar el Gobierno transitorio que permanecería hasta los comicios presidenciales que sigan a la elección de la Constituyente, previsiblemente este mismo año.
Essebsi intenta conseguir el mayor consenso popular posible para nombrar a 6 nuevos ministros en reemplazo de igual número de titulares que dimitieron a comienzos de esta semana forzados por la presión de manifestantes y activistas inconformes.
De hecho, el propio jefe de gabinete fue el sustituto de Mohamed Al-Ghannouchi después que éste renunció el domingo (27/02), a lo que siguió una ola de abandono de cargos en las carteras de Educación Superior e Investigación Científica, Desarrollo Local, Reforma Económica y otras.
El proceso eleccionario permitirá acabar el período posterior al derrocamiento el 14 de enero del gobierno de 23 años de Zine El-Abidine Ben Ali.
Mebaza hizo un llamamiento a todos los actores políticos, sindicales y representantes de la sociedad civil para «impulsar el proceso de la transición», al mismo tiempo que coinciden todos en que «hay tentativas por parte de algunas entidades de sembrar la violencia, el desequilibrio y el miedo».
Refugiados de Gadafi
Por último, añadió que el problema de la seguridad «está mejorando pero -puntualizó- debido a la influencia de la situación del país hermano vecino, Libia, en el sur es más complicado».
Al respecto, informa Télam del intento de Túnez de descomprimir la frontera con Libia a la espera de más refugiados:
De los 65.000 refugiados de diversas nacionalidades que salieron de Libia esta semana por esta frontera, ayer quedaban en Túnez unos 15.000 que fueron trasladados a campos cercanos para evitar que la situación estallara, aunque para las próximas horas se espera la llegada de entre 15.000 y 30.000 personas que huyen de territorio libio.
Los restantes refugiados fueron o están siendo transportados a sus paises de origen desde el aeropuerto de Djerba, de donde ayer salieron más de 40 vuelos en dirección a Egipto y para ayer se esperaban otros tantos.
La mitad de ellos, aviones de transporte militar Hercules TC 130, dispuestos por el gobierno británico para evacuar a una parte de los ciudadanos de Bangladesh afectados en este conflicto.
El grueso de los refugiados fueron trasladados a un campo que el Ejército tunecino montó en Choucha (Shusha, en español) que está a 10 kilómetros de Ras Ajdir, pero hay otros 2.500 que fueron repartidos entre la Casa de la Cultura, el centro juvenil y el centro de deportes de la ciudad de Ben Garden.
También hay 600 refugiados negros que han sido ubicados en un campamento aparte para evitar los problemas de racismo con la población árabe.
El proceso de evacuación hacia Egipto se complementó el miércoles (2/03) por vía marítima con la fragata HMS Cumberland, que atracó en el puerto de Ben Jhazi para trasladar a parte de los egipcios atrapados en la frontera que une Libia con Túnez.
Para las próximas horas se espera la llegada al mismo puerto de otra fragata, en este caso dispuesta por el gobierno tunecino, que trata de evitar que la crisis en esta frontera se sume a sus propios problemas internos.
El problema es que el flujo de gente que sale de Libia parece inagotable y las informaciones y especulaciones, siempre confusas y mezcladas, hablan de que podrían llegar 15.000 personas más, aunque fuentes militares que se rehusan a ser identificadas hablan de 30.000.
El caso es que si el flujo de personas que salen de Libia no amaina, la situación puede volver a punto de estallido, como ocurrió hace 48 horas, ya que la policía tunecina y el Ejército están desbordados y los que mandan son jóvenes contrabandistas investidos de un poder que ni esperaban ni saben manejar.
Estos jóvenes contrabandistas -en su mayoría libios- van armados con palos y varas de metal con los que tratan de mantener a la gran masa de refugiados que trata de ingresar a Túnez y de paso fustigan a los periodistas que intentan hacer el camino inverso, es decir ingresar a Libia.
Los refugiados que llegaron hasta ahora son en su mayoría egipcios, pero tambien hay gente de Bangladesh, Tailandia, Filipinas, Mali, Vietnam, Chad, Nigeria y Eritrea. Todos ellos mano de obra barata de plantas petroliferas de Libia.
Un avión fletado por el Gobierno de España para devolver a su país a refugiados egipcios que estaban en la frontera entre Túnez y Libia llegaba anoche (3/03) a El Cairo, en el comienzo de una operación humanitaria que durará una semana.
Primer ministro acusa a ex presidente Ben Alí de «alta traición»
El primer ministro tunecino, Beji Caid Esebsi, acusó este viernes (4/03) al derrocado presidente Zine El Abidine Ben Alí de «alta traición», un delito que puede ser castigado con la pena de muerte, en su primera aparición pública.
«No tengo la menor duda que el ex presidente se hizo culpable de alta traición por haber renunciado a asumir sus responsabilidades de garantizar la seguridad y la estabilidad» y por haber «abandonado» el país cuando era «comandante en jefe de las fuerzas armadas», explicó