El BCRA evalúa ofertar más dólares si no cede la persión sobre los depósitos

La entidad monetaria analiza tres medidas para modificar los encajes de los bancos en moneda extranjera.
AL ACECHO. El dólar paralelo ayer no tuvo cotización, porque los operadores esperan que ceda la presión oficial.
El proceso para frenar la fuga de dólares de los bancos en la Argentina podría incluir tres medidas que el Banco Central tomaría entre fines de este mes y principios de diciembre. Según el diario «El Cronista», autoridades de la entidad monetaria mantuvieron contactos con referentes de los bancos para analizar una nueva reducción del porcentaje promedio que se les exige a las entidades tener guardado en el Central. Tras el cambio del viernes pasado, la proporción es del 20% para cuenta corriente y caja de ahorro; y algo menor en los plazos fijos (debajo del 20% en los más largos, y más cercano a ese nivel en los más cortos). La propuesta ahora es llevarlo en diciembre a un promedio del 15%.
La segunda decisión recaerá sobre el plazo para cumplir con esa exigencia. Hoy los bancos deben mostrar al Central que el promedio de este requisito de liquidez sobre sus depósitos se ubicó en el 20% en el mes transcurrido. Pero la idea es convertirlo en un promedio trimestral. La tercera propuesta sería reducir la integración mínima diaria que deben cumplir las entidades. Es decir, el encaje que en determinados días los bancos se pueden permitir según la regulación: del 50% actual al 30%.
Ayer, las múltiples presiones formales e informales del Gobierno a los compradores y liquidadores de divisas lograron mantener el dólar sin variaciones pero con mínimos negocios. En este escenario, las operaciones en el segmento marginal se redujeron al mínimo.

«El dólar paralelo no tuvo cotización, no hay precios de referencia, todos están esperando que ceda la presión del Gobierno para comprar o vender», dijo un operador de una mesa de cambio. El dólar mayorista, en tanto, bajó 1,2 centavo a $ 4,263, en una rueda muy volátil en que la divisa tocó un máximo de $ 4,279, tras lo cual «el Banco Central salió a ofrecer dólares a $ 4,276, $ 4,275 y hasta $ 4,271», señalaron las fuentes.

El volumen negociado se limitó a U$S 293,1 millones en el mercado de contado (spot) y a U$S 64,5 millones en el de futuros, donde el Banco Central «puso precios muy agresivos en los contratos de diciembre a mayo 2012».

El dólar marginal, no controlado directamente por el Banco Central, cerró el lunes a un precio de referencia de $ 4,83, desde los $ 5 del último viernes. Precisamente, las presiones informales desde el Gobierno se intensificaron cuando el dólar paralelo saltó la última semana por encima de los $ 5 para la venta, luego de que la AFIP limitó la venta de divisas al público, ante el temor de que esa corrección en el tipo de cambio se traslade a precios.

El recalentamiento del mercado paralelo coincidió con la decisión del sector privado de retirar parte de los depósitos en moneda extranjera de los bancos, lo que llevó al Gobierno a liberar parte de los encajes en divisa extranjeras que las entidades financieras tienen depositados en el Banco Central. La autoridad monetaria informó el viernes que el retiro de depósitos en dólares entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre fue de unos U$S 680 millones, mientras que los analistas estiman que esa cifra se habría duplicado en la semana siguiente, consigna la agencia DyN.

Pérdidas
El goteo de depósitos en dólares provocó una sostenida sangría de las reservas internacionales en poder del Banco Central, que cayeron el lunes otros U$S 204 millones hasta U$S 46.374 millones. Ayer descendieron a U$S 46.170. Las reservas perdieron U$S 1.300 millones en la primera quincena del mes, una cifra que se elevaba a U$S 5.800 millones desde los 52.002 millones del 2 de agosto, un día antes del pago del Boden 2012.
El Gobierno, que utilizó hasta octubre unos U$S 7.500 millones de las reservas para cancelar deuda externa, deberá afrontar en diciembre el pago de unos U$S 2.200 millones de dólares del Cupón PBI. El dólar al público quedó ayer a $ 4,295 para la venta, un alza de 7,11% en lo que va del año, superior al 4,7% de todo 2010.

¿Fin de la corrida?
Bein & asociados proyecta un dólar a $ 4,35
El aumento en la tasa de interés registrado ayer no parecía alcanzar para estabilizar la demanda de pesos en un contexto donde las limitaciones impuestas al acceso al mercado de cambios generaban incentivos a mantener los dólares en cartera, sostiene un informe elaborado por el estudio Bein & Asociados.
Ayer, con la Tasa Call tocando el 17%, aparecieron los dólares de los exportadores, puntualiza el diagnóstico privado al que accedió LA GACETA. Frente a esta situación el dólar oficial bajó casi sin la intervención del Banco Central de $ 4,279 a $ 4,271; a su vez, el dólar marginal cotiza a $ 4,73 y el implícito en las operaciones de contado con liquidación a $ 4,69. Frente a estas operaciones, el diagnóstico pregunta: ¿Fin de la Corrida?
«Sostenemos nuestra proyección de tipo de cambio oficial promedio para diciembre en $ 4,35», acota.

Ejecutivos de finanzas
Aspecto negativo de las restricciones
Los mayores restricciones a la compra de dólares impuestas por el gobierno «inciden negativamente en la formación de expectativas que pueden afectar el nivel de reservas» monetarias, afirmó ayer un informe del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF). «El aumento en las regulaciones para acceder al mercado de cambios, si bien permite el ahorro de reservas en el movimiento del mercado en el corto plazo, tiene efectos colaterales en el mediano plazo; además, esas regulaciones inciden negativamente en la formación de expectativas que pueden afectar el nivel de reservas, lo que podría ser en parte compensado por los anuncios en materia de subsidios», planteó. El estudio evaluó que el escenario monetario de noviembre-diciembre, que estacionalmente demanda más caja al sistema para el pago del medio aguinaldo y anticipos vacacionales, puede «ser más tenso que en años previos».
lagaceta.com.ar

Hubo menos ventas de dólares por temor a represalias de Moreno

“Desalienten las compras de los clientes, como sea”, fue el mensaje que desde la Secretaría de Comercio le habrían hecho llegar a algunas entidades financieras.
Un nuevo capítulo se abrió en la estrategia del Gobierno por mantener controlado el mercado cambiario. “Desalienten las compras de los clientes, como sea”, fue el mensaje que desde la Secretaría de Comercio le habrían hecho llegar a algunas entidades financieras.

Por el temor a las represalias del mismo Guillermo Moreno, también se frenó el dólar paralelo, que cerró a $ 4,73 Por las instrucciones de Comercio a las casas de cambio y bancos, algunas empresas que ayer intentaron hacerse de dólares – incluso aquellas que no superaban el límite de los US$ 2 millones anuales- no consiguieron quién les vendiera en el mercado forma l, según contaron los propios operadores, informa h0y el diario Clarín.

Al frenar la demanda, el objetivo del Gobierno ayer fue que dólar mayorista cayera : cerró a $4,263, más de un centavo por debajo del cierre anterior. No sucedió lo mismo en casas de cambio donde el billete subió medio centavo a $4,295 . La intención de mostrar una caída en el dólar mayorista perseguía a la vez el objetivo de calmar la ansiedad de los ahorristas que buscaban retirar sus dólares ante el temor de nuevas medidas restrictivas y una aceleración de la devaluación. No obstante, el goteo de los depósitos – aunque se desaceleró- continúo: las reservas del Banco Central cayeron U$$ 204 millones a US$ 46.170.

por Clarín

El dólar se mantiene a $4,29 para la venta

La divisa norteamericana comenzó a cotizar esta mañana en bancos y casas de cambio a 4,25 pesos para la compra y 4,29 pesos para la venta, los mismos precios que los registrados en el cierre de ayer.

La intervención del Banco Central logró mantener establece la cotización del dólar que, durante las ùltimas dos jornadas, se mantuvo sin modificaciones.
Fuente: diariohoy.net

Dónde hay un dólar

Impericia o subestimación, ya no importa. Lo cierto es que los ataques especulativos contra el peso, que tienen autores nacionales, no foráneos, siguen poniendo a prueba a un gobierno que tardó en reaccionar. Gabriel Mariotto le salió al cruce al Grupo Clarín: el 28 vence el plazo para vender activos, aunque ese aspecto de la Ley de Medios fue «congelado» por un juez. La guerra que viene.

El ex presidente del Banco Central, Javier González Fraga, un monetarista en los ’90 con Carlos Menem que se reconvirtió más tarde en industrialista por su experiencia de producir y vender dulce de leche, le reclamó este lunes al Gobierno que use «toda la capacidad de fuego» de la entidad monetaria para disuadir a los especuladores contra el peso. En un programa de TV por cable, el reciente ex candidato a vicepresidente por la UDESO que «lideró» Ricardo Alfonsín consideró que la «minicrisis» provocada por la presión sobre la cotización del dólar se debió, básicamente, a la «torpeza» de la titular del Central, Mercedes Marcó del Pont.

En verdad, lo que González Fraga califica de incapacidad para el Gobierno es prudencia, y para otros es una lisa y llana subestimación del impacto de las expectativas. Insistimos desde esta columna que se equivoca el candidato de Francisco De Narváez a la vicepresidencia cuando sostiene que no hay una conspiración antiK detrás de la especulación. Ha existido y existe una operación concertada para generar incertidumbre, pero se conjugan en ella dos factores: el fogoneo del Grupo Clarín es el reflejo histórico de ese consorcio, que cuando se trata de boicotear a quien considera su enemigo, no ceja en su intento (Se le puede preguntar al senador Carlos Menem). Y los especuladores de los márgenes del mercado de divisas están de parabienes con tamaño aparato para generar invertidumbre. También es cierto que algunos en el Gobierno le atribuyen una monta al problema, muy probablemente con el fin de esconder detrás de la sábana blanca de los fantasmas su ineficiencia o su falta de previsión.

Pero después de semanas de inacción, una sola medida volteó al dólar «paralelo». Fue la decisión de flexibilizar la normativa para permitirle a los bancos que entreguen los dólares que los clientes reclamen, tanto los que tengan depositados a la vista como los de los plazos fijos a su vencimiento. Que algunos bancos le hubieran pedido a sus clientes que volvieran al día siguiente para llevarse sus dólares dio pábulo para que comunicadores inescrupulosos, en sus medios y en especial en las redes sociales, comenzaran a hablar de «corralito» bancario.

El titular del Banco Provincia, Guillermo Francos, rechazó esas versiones y ratificó la libre disponibilidad por parte de los clientes. Además, destacó el lunes que la divisa bajó su cotización en el mercado paralelo. En efecto, el dólar «negro» pasó de 5 a 4,75 pesos en solo dos días. Francos admitió que «existe un nerviosismo que lleva a generar este tipo de operaciones, pero es injustificado». «El Banco Central le dijo a los bancos que van a poner todos los dólares que sean necesarios a disposición, creo que estamos ante un histeriqueo financiero inconcebible», puso blanco sobre negro el ex dirigente del Partido Federal, para quien los controles de la AFIP sobre la situación fiscal de los ahorristas que demandan divisas extranjeras «tiene lógica, pero fue inoportuna».

Francos fue el único dirigente filooficialista que sacó la cara por una situación que, sin duda, cierta impericia provocó que llegara hasta aquí.

El Central informó el martes que las reservas se situaron en torno a los 46.170 millones de dólares, lo que supuso un descenso de 204 millones respecto del viernes anterior. La pérdida de reservas de las primeras dos semanas de noviembre superó los 1.100 millones de dólares, y llega a 5.600 millones si se toman como medida los 52.002 millones del 2 de agosto pasado.

Ahora bien, cuando se analiza el balance de octubre, entre otras cosas sumando el ingreso de dólares por exportaciones y la venta de reservas, se observa que las reservas internacionales cayeron 1.066 millones de dólares. Se destacó en los medios que miran con lupa cada movimiento, esperando tener malas noticias para amplificarlas, que la autoridad monetaria dilató hasta el 1º de diciembre la publicación del informe de Evolución del Mercado Único y Libre de Cambios y Balance Cambiario del Tercer Trimestre de 2011, que contiene el dato de la Formación de Activos Externos del Sector Privado No Financiero, es decir, la conocida fuga de capitales. Analistas del mercado estiman que esa fuga superó los 20.000 millones de dólares en los primeros diez meses del año, y que se «espiralizó» hasta llegar a 3.500 millones en octubre, pero el dato oficial, previsto para el último jueves, se conocerá veinte días más tarde.

Es evidente que se trata de una información que el Gobierno no quiere darle a la hoguera de los especuladores, que necesitan muy poco para hacer su «trabajo» ya que los rumores y versiones casi siempre se construyen con una parte importante de mentiras. Pero es tan cierto que la fuga existe como que estamos frente a un ataque especulativo que no tiene ninguna posibilidad de crecer hasta una crisis ni nada que se le parezca, incluso a pesar de la impericia de las autoridades monetarias.
Que parientes y amigos llamen a su periodista de cabecera para preguntarle si deben salir corriendo a comprar dólares no indica que se está ante una situación de inminente debacle financiera. Que los vivos de siempre se estén haciendo su «agosto» con las versiones que disparan, ayudados de manera inestimable por medios que sólo piensan en «limar» a la Administración K, explica existe una pequeña estructura especulativa intacta (aunque, lo saben los memoriosos, esto no es 1977 cuando todo el país era una «timba» y gobernaba la «Patria financiera»).

En efecto, la fuga es muy grande pero el Banco Central dispone de más de 47.000 millones de dólares en reservas. Los especuladores son marginales, no son las cuatro empresas agroexportadoras aunque alguna se haya sentado arriba de sus dólares para hacer una diferencia. Ya fueron avisadas del «despiste», de la inoportunidad, y han comenzado a liquidar de manera acelerada. A partir de ahora se verá un flujo más constante de dólares y una disponibilidad de divisas que seguirán reduciendo la brecha entre dólar «para-lelos» y oficial. Cuando se trata de hacer una ganancia, cualquier información sirve: la crisis financiera global, la caída de Berlusconi, el desempleo en España, las elecciones en ese país, la sanción del Manchester City a Carlos Tevez. En fin, los que juegan con la ignorancia de algunos miles de desesperados tienen en esa desesperación el caldo de cultivo indispensable para hacer una diferencia.

Lo grave de esta situación es que hay algunos poderosos que no hacen otra cosa que echarle leña al fuego, lo que en buena medida se debe a lo que admitíamos al comienzo: las autoridades no mostraron toda su batería de herramientas, por incapacidad o por subestimación, ya no importa.

El Gobierno administra el aparato del Estado. Como tal, frente a los «informantes» interesados en «empiojar» el mercado financiero, la Administración de Cristina Kirchner se ha mostrado como un oso que se quita a las moscas del hocico. La ausencia de un ministro de Economía en funciones y la presencia de una presidente del Banco Central inexperta abrieron las compuertas para que se filtren algunos marginales. Darles otro carácter, otro nivel, alimenta el cuento de que avanzamos sin poder evitarlo a una crisis de proporciones. Un verdadero despropósito cuya repetición debería condenar a quien lo haga a la «hoguera de los zonzos», porque si tal cosa llegara a ocurrir, muchos de los que repiten acríticamente este afirmación serán los primeros en irse por el sumidero, de cuyas paredes sólo podrán aferrarse los que jamás sufren ninguna crisis y los más rápidos operadores del mercado informal de cambios, que saben cómo encender la llama y cuándo correr para no quemarse ni un dedo.

Pero algunos de los que, con más empeño, han atizado el fuego, como es el caso del Grupo Clarín, recibieron el lunes una advertencia. El aún titular de la Administración Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (ex Comfer), Gabriel Mariotto, recordó que el próximo 28 se cumple el plazo para que los multimedios que no se ajustan a derecho por la cantidad de licencias que poseen, las vendan. Sobre Clarín, indicó que «el volumen (de medios que posee) es tan alto que cualquier ciudad que abordes encontrás una posición dominante. Por eso Clarín está en el primer plano de ajuste a derecho». El electo vicegobernador bonaerense no se quedó ahí. También apuntó que el Grupo Hadad dispone de más frecuencias que las que la ley le permite en una zona geográfica (la Capital) y que el ex banquero Raúl Moneta deberá transferirle a Matías Garfunkel las radios de CIE que compró a su nombre. Garfunkel es el nuevo socio del oficialista Sergio Szpolsky. Habría que ver si la Ley de Medios realmente permite estas transferencias.

Director de gacetamercantil.com

por Julio Villalonga (*)

La batalla por el dólar

En esta semana el objetivo político central del gobierno de Cristina Kirchner es frenar la fuga de capitales y la salida de dólares del sistema financiero. Análisis del titular del Centro de Estudios La batalla por el dólar.

En esta semana el objetivo político central del gobierno es frenar la fuga de capitales y la salida de dólares del sistema financiero. Su interpretación es que los sectores derrotados en la elección del 23 de octubre impulsan ahora esta batalla para vencerlo en el campo económico, al fracasar en hacerlo en lo político-electoral. Las medidas que se van adoptando muestran que sobre las decisiones presidenciales van ganando influencia el secretario de Comercio (Moreno) y el titular de la AFIP (Echegaray) y la van perdiendo el ministro de Economía (Boudou) e incluso la Presidente del Banco Central (Marcó del Pont). El pedido a las empresas extranjeras para que no remitan utilidades en los próximos meses es trasladar a la salida de dólares el control fáctico que viene implementando la Secretaría de Comercio respecto de los precios y el comercio exterior. Se actúa bajo presión, pero sin adoptar medidas formales (leyes, decretos, resoluciones). Se confirma así la dirección de la profundización del modelo, que implica una mayor dosis de estado dentro del capitalismo y la batalla cambiaria acelera esta dirección, mientras pierden peso quienes propugnaban la normalización de las relaciones con el mundo, comenzando por saldar la deuda con el Club de París. En cuanto a la baja de subsidios, hasta ahora el gobierno sólo la reduce en 600 millones de pesos e insiste en que no implica suba de tarifas. Respecto del presupuesto, el dictamen aprobado en Diputados contempla no bajar el monto destinado a ellos, mantiene la tasa de inflación en 9%, el precio del dólar en 4,4 para fin de 2012 y el crecimiento en 5,1%.

La expectativa de sectores empresarios de que el encuentro Obama-Cristina implique un punto de inflexión hacia un modelo con más mercado se va diluyendo. El gobierno de los EE.UU. volvió a votar en el BID contra el otorgamiento de créditos para la Argentina. Tanto Obama como el vocero del Departamento de Estado dijeron públicamente que ello seguiría siendo así hasta que Argentina resuelva temas pendientes como el pago de los juicios ante el CIADI, el de los bonistas que quedaron fuera del canje y la normalización de las relaciones con el Club de París y el FMI. El gobierno argentino respondió públicamente que los fallos ante el CIADI debían tramitarse ante la justicia argentina. Sobre esta situación, el pedido a las empresas extranjeras de que no remitan utilidades no acerca sino aleja más la posibilidad de que dicho encuentro haya sido el inicio de un giro hacia la moderación o el mercado. Los sectores que dentro del oficialismo pensaron que la reunión con Obama iba a tener dicho efecto se equivocaron. En cuanto a la relación bilateral, la prioridad de Washington está en lograr que Argentina no recomponga las relaciones con Irán, mientras que la prioridad de Buenos Aires es lograr avances en lo económico (finanzas y comercio).

El conflicto sindical se va multiplicando y diversificando mientras se elude la confrontación con Moyano. El conflicto de Aerolíneas Argentinas y los gremios aeronáuticos implica que la Presidente redobla la apuesta a favor de La Cámpora -que conduce Aerolíneas Argentinas y la Administración de Aeropuertos- y en contra de sindicatos del transporte alineados con Moyano. Ello sucede cuando impulsa que nuevos legisladores de esta agrupación accedan a cargos de conducción tanto en el Congreso de la Nación como en la legislatura bonaerense. El conflicto con el gremio rural se profundiza y su titular (Venegas) amenazó con cortes de ruta y dijo que todos los dirigentes sindicales estaban amenazados desde el oficialismo. El Ministerio de Trabajo no homologa el aumento del 35% acordado por el gremio con el sector empresario, buscando imponerle 25%. Pero al mismo tiempo, días atrás a un gremio kirchnerista (Maestranza) le homologó 54% y semanas atrás 33% a visitadores médicos. El sindicato de petróleo y gas privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa inicia medidas de fuerza al frustrarse la negociación salarial. Moyano por su parte mantiene una posición crítica, mientras parece impulsar diversos conflictos sectoriales y muestra que sigue resultando imprescindible para la gobernabilidad. En este contexto, el oficialismo ha dejado en un segundo plano el intento de acordar una pauta salarial que mantenga bajo control la inflación de 2012. Las declaraciones de la Presidente criticando a los controladores aéreos y diciendo que la protección debe tener límites, son el argumento esgrimido por los empresarios que siguen apostando a un giro del gobierno hacia la moderación.

Mientras el peronismo se alinea con Cristina, la oposición se sigue desarticulando. El jueves 17, día del militante, Daniel Scioli -quien sufre crecientes presiones de la Casa Rosada para que dé espacio al cristinismo en su gabinete- en su condición de Presidente del PJ, reunirá a su Consejo Nacional y a los gobernadores del partido para homenajear a Kirchner en su mausoleo inaugurado en Río Gallegos. La intención de varios dirigentes es ofrecer en la oportunidad la Presidencia del partido a Cristina. En el Congreso surgen dudas sobre si el oficialismo logrará aprobar el presupuesto y las leyes que impulsa (prórroga de impuestos y emergencia económica, proyectos anti-lavado, ley de tierras etc.) con el actual Congreso o con el nuevo, después del 10 de diciembre. El apoyo del PRO a la designación de jueces federales apoyados por el oficialismo nacional ha generado fuerte impacto, que hace difícil a este partido votar el presupuesto del Ejecutivo como había acordado Macri semanas atrás en el marco de su política de cooperación con el gobierno nacional. En la UCR la interna se prolonga y diversifica entre alfonsinistas, anti-alfonsinistas y alternativas intermedias centradas en los intendentes electos. En el peronismo disidente, mientras sigue el éxodo hacia el oficialismo, un núcleo que responde a Duhalde se mantiene fuera del mismo. En cuanto al Frente Amplio Progresista, el Ejecutivo retiene fondos para Santa Fe -lo mismo hace respecto a Córdoba- para obligar a esta fuerza opositora a negociar. El cambio en las autoridades del Episcopado permite a la Presidente un acercamiento con al Iglesia Católica tras varios años de tensiones.

En conclusión: la batalla del dólar (evitar la fuga y la salida de depósitos) es el objetivo político central del Gobierno en la semana que se inicia; el encuentro Obama-Cristina no ha resultado el punto de inflexión hacia el mercado y la moderación que algunos sectores del oficialismo y del empresariado esperaban; el conflicto entre el Ejecutivo y los sindicatos muestra a la Presidente redoblando el apoyo a La Cámpora en contra de De Vido y los gremios y el PJ se alinea detrás de Cristina mientras la oposición se sigue diluyendo, como lo muestran las negociaciones del PRO con el gobierno nacional.
www.agenciacna.com

El dólar cotiza a 4,30 para la venta

La cotización del dólar en bancos y casas de cambio experimentó esta mañana una suba de 1 centavo en su punta vendedora, para ofrecerse ahora a 4,25 pesos para la compra y 4,30 pesos para la venta.

Entre bancos o en el mercado mayorista del Siopel, el «billete-físico» subía 0,05 por ciento a 4,277 pesos, y el tipo transferencia se negociaba a 4,276.

Por otro lado, los primeros movimientos en la Bolsa porteña no alcanzaban a definir una tendencia en materia de precios. Con un volumen de apenas 1,5 millón de pesos, el índice Merval subía 0,09 por ciento.
Fuente: diariohoy.net

Desde esta semana, los bancos con más dólares

Mayores flujos de la divisa norteamericana comenzará a tener desde esta semana el mercado local, lo que se espera frene la salida de los dólares de las entidades financieras, así como las reservas del Banco Central.

Esas previsiones surgen de las últimas medidas aprobadas por la autoridad monetaria nacional, que comenzarán, algunas de ellas, a regir desde hoy.

Por un lado, a partir de esta mañana, entrará en funcionamiento la normativa que aprobó el Banco Central para que las entidades financieras puedan disponer de las divisas que excedan el 20% del encaje y que no estén prestadas.

Por otro lado, se estima que en el transcurso de esta semana, o a más tardar a inicios de la próxima, comenzará a ingresar al mercado local el dinero de las petroleras, mineras y aseguradoras que tienen en el exterior.

El viernes, a dos semanas del inicio de las nuevas medidas de control para la compra y venta de monedas, el BCRA reunió al directorio y aprobó una norma que apunta a garantizar la disponibilidad de dólares en los bancos.

Las fuentes consultadas indicaron que «la norma aprobada apunta a flexibilizar la exigencia mínima que los bancos deben tener depositada en el BCRA y permitirles mayor disponibilidad de dólares a los bancos para que puedan hacer frente a eventuales demandas de sus clientes”.

Si bien hace 15 días había terminado con menor demanda de billetes, el viernes las reservas finalizaron en u$s 46.578 millones.

Frente a la demanda de los clientes que tienen depósitos en dólares, el BCRA decidió modificar el actual esquema de exigencia para las entidades financieras.

El esquema hasta ahora es el siguiente: los depósitos en dólares tienen un encaje obligatorio del 20%, monto que debe estar inmovilizado en el BCRA. Además de este 20%, los bancos también deben depositar en el BCRA los dólares que –por encima de ese 20%– no tengan prestados (para prefinanciar exportaciones, por ejemplo).

En síntesis: con la norma que aprobó el BCRA, a partir de hoy los bancos podrán disponer de los dólares que excedan el 20% del encaje y que no estén prestados.

Por otro lado, desde mediados de semana, o a más tardar la próxima, comenzarán a llegar al país los dólares que las petroleras, mineras y aseguradoras tienen en el exterior, en respuesta al decreto publicado a fines de octubre por el Gobierno que las obliga a liquidar sus divisas en el mercado local, publicó el diario Ámbito Financiero.

En ese sentido, la semana pasada trascendió que estaría confirmado el ingreso de unos primeros 30 millones de dólares, pertenecientes a una pequeña minera.

En total, desde el sector de los hidrocarburos y la minería estiman que los recursos que tienen estas compañías en plazas del exterior ronda los u$s 1.400 millones.

Así, con la seguridad de que los bancos dispondrán de los dólares necesarios para hacer frente a las demandas de sus clientes, y la llegada de mayores dividas al país, el Gobierno espera generar confianza en los ahorristas para que rechacen cualquier tipo de impresión sobre posibles faltantes de la moneda norteamericana, y dejen su dinero en el sistema.
elesquiu.com

El dólar siguió «planchado» en el microcentro y bajó el marginal

La divisa norteamericana se negoció al cierre en casas de cambio y bancos de la Capital Federal a $4,29 para la venta y $4,25 para la compra. El dólar paralelo descendió a $4,83.
El dólar al público se mantuvo estabilizado durante todo el desarrollo de las operaciones en $4,24 para la compra y $4,29 para la venta, en el rango promedio de la semana pasada.

La flexibilización de los encajes bancarios en dólares y una abundante oferta suministrada por la banca oficial provocaron una sensible baja del dólar en el segmento marginal que cerró las operaciones en $4,83, al tiempo que en las casas de cambio se mantuvo entre 4,29 y 4,30 pesos.

«El mercado estuvo con pocas operaciones, pero todas con tendencia vendedora luego de los máximos alcanzados la semana pasada», dijo a DyN un operador de cambio de la city porteña.

Los operadores agregaron que «se notaba en el mercado la mayor oferta de dólares, debido a la flexibilización de los encajes en dólares para los bancos. El masivo retiro de depósitos en dólares, estimado en unos u$s600 millones en la primera semana de noviembre, erosionó el nivel de reservas internacionales del Banco Central.

Las mayores restricciones a la compra de divisas y trabas a las operaciones en el mercado mayorista catapultaron además el precio del dólar en el mercado paralelo.

El dólar al público registra un alza de 7,11% en lo que va del año, superior al 4,7% de todo 2010. Las operaciones de contado con liquidación, vehículo para la fuga de capitales, se pactaron en $4,72 aunque fueron muy escasas.

En el segmento mayorista del Siopel, el «billete-físico»
entre bancos cerró a $4,2745 y el tipo transferencia quedó en $4,275, el máximo intradiario, mientras que por el lado de los futuros, el contrato que vence a fin de mes tuvo posturas vendedoras en $4,286, frente a los 4,280 que se pagaron el viernes último.

Durante la semana pasada, las liquidaciones de la industria aceitera y exportadores de cereales sumaron u$s290,13 millones, casi un 21% menos que en los cinco días hábiles previos.

Según los operadores, la decisión del Banco Central de flexibilizar la exigencia mínima de dólares que los bancos deben depositar en el ente monetario para facilitar la respuesta de las entidades a la eventual demanda de sus clientes, descomprimió la presión sobre la divisa en el mercado mayorista.

De esta forma, los bancos pueden disponer de todos los dólares que excedan el 20% del encaje y que no hayan sidos destinados a préstamos.

El euro se negoció sin variantes, a $5,73 comprador y $5,86 vendedor, en tanto que el real también se operaba en ascenso a 2,32 y 2,44 pesos, para la compra y la venta minorista, respectivamente.

El contexto general de operaciones bursátiles resultaba desfavorable a pesar de los cambios políticos y aprobaciones de medidas económicas de ajuste en Italia y Grecia.
infobae.com

Los aumentos de precios y salarios duplican al dólar


La presión compradora de dólares es un fenómeno previsible dado el crecimiento de precios y salarios muy por encima de los aumentos en el valor de la divisa norteamericana. marca como imponer barreras administrativas y legales sobre la compra de dólares es una estrategia condenada al fracaso.

Un informe efectuado por IDESA – El deseo de la población por adquirir dólares persevera, a pesar de los múltiples esfuerzos que realiza el Gobierno por obstaculizar administrativamente su compra. Las acciones que toman las autoridades, más persecutorias que persuasivas, no logran el objetivo de desalentar la demanda de divisas extranjeras. Por el contrario, diariamente se producen incrementos pequeños, pero sostenidos, en el valor del dólar, pérdidas de reservas en el Banco Central y fuga de depósitos en el sistema financiero. A medida que la tendencia al alza del dólar se afirma, la demanda de dólares se retroalimenta.

La creciente compra de dólares puede tener diferentes tipos de motivaciones. Una de ellas es que sea una reacción frente a desequilibrios macroeconómicos. Una situación concreta es que cuando no hay un factor estructural que haga sostenible el crecimiento de precios y salarios por encima de la cotización dólar, como sería aumentos de la productividad, aparecen expectativas de futuras devaluaciones y consecuentemente incentivos a atesorar moneda extranjera como forma de proteger los ahorros.

El proceso de encarecimiento de precios y salarios medidos en dólares comienza en el 2002 pero se agudiza en el 2007. Según datos oficiales de inflación de 8 provincias y el Ministerio de Economía, se observa entre los años 2007 y 2011 el siguiente fenómeno:

• Los precios de los bienes y servicios de la economía medidos con el índice de 8 provincias argentinas vienen creciendo a una tasa de casi 20% por año.

• Los salarios nominales del sector privado formal vienen creciendo a una tasa de casi 27% por año.

• Mientras tanto, el valor del dólar apenas crece 8,4% por año.

Estos datos, extraídos todos de fuentes oficiales, señalan con claridad el intenso proceso de elevación de los ingresos de la población y precios internos en términos de dólares. Esto ha llevado a que en el año 2011 los salarios formales medidos en dólares y corregidos por inflación de EEUU sean superiores a los vigentes durante la convertibilidad.

Altos precios internos y altos salarios en dólares, sin un sustento en aumentos equivalentes en la productividad, pueden sostenerse con flujos crecientes de entrada de dólares. Esto ocurre fundamentalmente de la mano de las exportaciones del complejo sojero y las ventas de productos industriales a Brasil. Sin embargo, la persistencia de la apreciación cambiaria (es decir, precios y salarios que crecen a tasas superiores a la devaluación) han ido erosionando también estas fuentes de divisas con riesgo de agotarlas.

La voracidad de la población por comprar dólares manifiesta la percepción de que los vertiginosos aumentos en la actividad económica, el empleo y los salarios empujados por la alta inflación y un dólar “planchado” no son sustentables. La percepción tiene un fundamento objetivo ya que los incrementos sostenidos de precios y salarios muy por encima del valor del dólar fueron socavando la competividad de la producción argentina. Un proceso de este tipo lleva fatalmente a que, en algún momento, la gente empieza a percibir que es oportuno proteger sus ahorros a través de su conversión a dólares.

Así, se explicitan las consecuencias de la baja calidad de las políticas económicas que se han venido y se manifiesta la intención de seguir aplicando. En lugar de apelar a un manejo prudente y racional de las finanzas públicas y generar incentivos a la inversión productiva, se optó por el despilfarro fiscal y el intento de esconder la inflación a través de la intervención del INDEC, controles de precios y persecución a las consultoras privadas. Estos métodos fracasaron, como fracasará el intento de amedrentar a la población para que no compre dólares.

Lamentablemente se usa como argumento para justificar una estrategia con fracaso asegurado un objetivo loable, como es combatir la economía informal. Tampoco es solución permitir la aceleración de la devaluación del peso, ya que esto será agregar combustible al vertiginoso proceso inflacionario. Por eso, es urgente dejar de dilapidar esfuerzos atacando a los que compran dólares y comenzar a atacar la raíz del problema, que es la inflación, eliminado el despilfarro de gasto público y generando incentivos para que aumente la inversión productiva.

Autor de Nota: IDESA

El dólar oficial subió un centavo y cerró al semana a $ 4,29

En las casas de cambio el billete promedió $ 4,29, mientras que se mantiene la brecha con el billete paralelo.
Con los controles de la AFIP un poco más aceitados y la demanda del público que no se frena, el dólar en las casas de cambio porteñas subió hoy un centavo hasta alcanzar los $ 4,29 para la venta en promedio.

Los que no pueden comprar «en blanco», se vuelcan al mercado negro, donde el denominado dólar «blue» o paralelo cotizó hoy nuevamente en torno a los $ 5, aunque levemente por debajo de ayer.

Fue una rueda de bajo volumen porque fue feriado en Estados Unidos (sólo se negociaron US$ 94,7 millones, cuando lo normal es más de US$ 300 millones). El Banco Central impulsó el alza de la divisa con compras en el segmento mayorista. «El mercado estuvo apático y con pocas operaciones, pero todas buscando cobertura en dólares», dijo un operador. Fuentes del mercado agregaron que «se notaba en el mercado la escasez de dólares, debido al problema técnico que causaba la suspensión de vuelos en el Aeroparque metropolitano que impedía la importación de billetes».
Clarin.com

¿Al gobierno le conviene que suba el dólar paralelo?

Metido en el baile de la corrida, la disparada de la divisa “blue” podría ser funcional al gobierno. En la medida que crece su cotización se hace cada vez más gravoso como inversión y además genera un “colchón sicológico” para futuras correcciones del tipo de cambio oficial. El giro del gobierno para frenar la fuga de depósitos.

En las mesas de dinero de la City algunos experimentados operadores, curtidos en cientos de corridas, corralitos, devaluaciones y todas las catástrofes económicas que los argentinos han asimilado como naturales y cíclicas, crece una sospecha: “El gobierno está dejando correr al dólar blue”.

¿Cuáles serían las ventajas de ese movimiento? Por un lado la tentación siempre presente de darle un “escarmiento” al mercado. Algo similar ocurrió en el 2002. El dólar cotizaba a 3,97 pesos y el paralelo se ubicaba en los 5 pesos, igual que ahora. Cinco meses después bajó a 3,15 pesos, causándole una pérdida gravosa a los que apostaron por la moneda norteamericana.

Claro que era otra situación económica: la Argentina no vivía un proceso de alta inflación con un tipo de cambio semifijo, que produce el descalce que hoy ve el mercado y por eso descuenta una devaluación y se vuelca al dólar.

Pero es verdad que en la medida que se dispara el blue se vuelve cada vez más gravoso comprarlo. Hoy los que operan en ese mercado lo hacen con plata negra y le restan a la cotización lo que se ahorraron en impuestos no gravados. Pero en algún momento si la cotización sigue subiendo esa cuenta va a empezar a dar negativa y acaso tengan que empezar a buscar otras opciones que irremediablemente los van a conducir a algún grado de reingreso del dinero en el circuito formal: desde compra de bienes durables hasta plazos fijos. Ese es un objetivo razonable y sano de este y cualquier gobierno.

Finalmente, la disparada del dólar blue va a impactar en los viajes al exterior que se van a encarecer de manera notable y acaso a dos meses de las vacaciones, termine favoreciendo el turismo local.

Consumo de bienes durables más turismo local, es música celestial para el modelo kirchnerista, basado en empujar lo más posible la demanda interna. En ese sentido, puede ser que la disparada del dólar paralelo le sea funcional al Gobierno. No lo es por supuesto en su impacto en la inflación, al ubicarse como valor de referencia para algunas operaciones.

Por otro lado, está claro que el valor del dólar oficial va a subir y de hecho lo está haciendo. Históricamente se correlacionó la cotización de la divisa con el valor del litro de nafta, acaso por ser el petróleo uno de los motores de la economía global. Como sea, esa paridad se perdió en la Argentina en los últimos tiempos.

El gobierno liberó en buena medida el precio de la nafta Premium que oscila entre los 5 y los 6 pesos, y el dólar se mantuvo planchado. Eso lleva a pensar a los operadores que el valor real de la divisa sería 5 a 1 y finalmente el Gobierno irá convalidando ese ratio.

Contribuye en este sentido el estudio de distintos analistas del mercado, que señalan que limpias de polvo y paja las reservas reales del Central sólo alcanzan para respaldar la mitas de la base monetaria. Apreciar el dólar mejora ese cociente.

En ese marco, que el dólar paralelo se dispare puede funcionar como una suerte colchón sicológico para que la sociedad vaya asimilando la nueva cotización. Es brutal claro y está en las antípodas de cualquier planificación macroeconómica sofisticada. Es muy probable incluso que no haya sido el efecto buscado, sino producto de la impericia nomás. Pero hecha la macana ¿Porqué no aprovechar lo poco que puede arrojar de positivo?

Por supuesto que en el Gobierno niegan todas estas especulaciones y minimizan el impacto del dólar blue. “Antes de los controles de la AFIP, el mercado del dólar paralelo era un 2 por ciento del mercado, hoy bajó al 1 por ciento”, argumenta un funcionario del Banco Central.

“Magnificar la incidencia del dólar paralelo en la economía es una maniobra para meter miedo a la gente, no más que eso”, agrega. Desde la frialdad de los números es razonable el argumento, pero sería ingenuo negar la incidencia de esa variable en la sicología de los argentinos. Sólo que ahora quizás el gobierno haya encontrado en medio de la tempestad, razones para utilizarla en su favor.

Autocrítica estilo k

Como sea, hoy la preocupación central del Gobierno ya no es tanto el dólar sino la pérdida de depósitos de los bancos, que provocó la torpe implementación y peor anuncio de los controles de la AFIP para comprar divisa extranjera.

Es que si bien es razonable que el gobierno quiera controlar el origen de los fondos, lo que se vio con los rechazos masivos y ridículos de la AFIP de los primeros días, fue un intento por bloquear las operaciones, que no hizo otra cosa que traer a la memoria los fantasmas del corralito. Y la consecuencia lógica fue que la gente comenzó a retirar sus depósitos.

El gobierno parece estar elaborando una autocrítica, a su estilo. Esto es seguir manteniendo el discurso, pero ir modificando las medidas en los hechos. No parece casual que Mercedes Marcó del Pont y Amado Boudou se hayan encargado de garantizarle a los bancos extranjeros –los más afectados por la corrida-, que tendrán todos los dólares necesarios tanto para los ahorristas como para la prefinanciación de exportaciones.

Es que en otro efecto indeseado de las medidas, los bancos ante la presión de los ahorristas habían dejado de prefinanciar exportaciones para poder afrontar la demanda de billetes de sus clientes minoristas. Marcó del Pont habilitó así una línea de acceso inmediato a dólares denominada “pases” del Banco Central.

Es que la falta de billetes –que deben importarse de Estados Unidos- acrecienta los temores del público y frente a esto los bancos optan por atesorarlos para responder a sus clientes minoristas. La gran diferencia de la crisis que puso fin a la Convertibilidad es que ahora no hay creación secundaria de dólares y en el Gobierno afirman que si es necesario perderán los 7.000 millones de dólares de reservas que se necesitan para cubrir la totalidad de depósitos en esa moneda que corresponden a encajes del Banco Central.

O sea, existen los dólares para enfrentar la corrida, pero gracias a la torpeza de las medidas está derivó en una presión sobre todos los depósitos y ahí es donde los bancos pusieron el grito en el cielo.

Ahora el kirchnerismo estaría regresando a su estrategia original de presionar uno a uno a los “grandotes” del mercado, como está haciendo Guillermo Moreno con las cerealeras, multinacionales de la alimentación y automotrices, para que liquiden divisas y posterguen la remisión de utilidades. Retoman así la línea que habían insinuado cuando emitieron el decreto que obligaba a liquidar divisas en el país a mineras y petroleras; y silbando bajito parecería que van desmontando la presión sobre el pequeño ahorrista.

Se trata de una estrategia de contención de daños, que en buena hora se instrumente, pero que hacia delante revela que el nuevo entorno macroeconómico –con márgenes de maniobra mucho más reducidos-, está demandando un abordaje integral y con buena calidad técnica de los desajustes de la economía.
Fuente: lapoliticaonline.com

Las reservas del Central cayeron otros US$ 150 millones

El Banco Central perdió US$ 150 millones pese a que no intervino vendiendo dólares, lo que marca una aceleración en el retiro de depósitos bancarios. El dólar paralelo se disparó casi 20 centavos, hasta tocar un máximo de $ 4,90.

Los nuevos controles para la compra-venta de dólares en casas de cambio y bancos potenciaron la demanda en el mercado paralelo. Ayer el billete que venden las cuevas se disparó casi 20 centavos, hasta tocar un máximo de $ 4,90 en “cuevas” del microcentro, aunque en el interior del país se llegó a pagar más de $ 5, según publicó el diario Clarín.

Desde que se instrumentó el nuevo sistema de controles, el también llamado “dólar blue” escaló 42 centavos.

En el mercado sostienen que ante la imposibilidad de comprar divisas en la plaza formal, muchos ahorristas optaron por sacar sus pesos de los bancos y salieron a comprar dólares en el mercado negro de billetes . Ayer, el Banco Central perdió US$ 150 millones de sus reservas, pese a que no intervino vendiendo dólares, lo que marca una aceleración en el retiro de depósitos en dólares.

Mientras el dólar formal se mantiene en $ 4,28, el “blue” sigue creciendo, impulsado por la demanda y la escasez de billetes en este circuito. Es que con los operativos de la AFIP, se interrumpió la venta a los “coleros”, la principal fuente de abastecimiento de dólares a las cuevas. Antes, estos se hacían de los billetes con sólo presentar en los mostradores una copia de su DNI (según los propios vendedores muchas veces presentaban documentos falsos y hasta llegaban a contar con 5 de distinta identidad). Luego los revendían a los operadores del mercado informal y cobraban como “honorarios” no menos de $ 100 por día. Así alimentaban de dólares al circuito informal. Tampoco se observan ya los “arbolitos”, que ofrecían en las principales calles turísticas de la ciudad (especialmente la calle Florida) el “blue”.

A su vez, la presencia de los sabuesos cortó el negocio paralelo de muchas agencias de cambio, que aunque operaban el billete formal en los mostradores, invitaban, de manera discreta, a un segundo piso a todo aquel que quería comprar sin dejar registro alguno de la operación.

Sin embargo, la fiebre por el dólar y la falta de billetes en el circuito informal hizo que quienes tenían los billetes impusieran precios cada vez más caros para la venta. Sucedió l o esperable: a más controles, más precio .

Además, apelaron a su creatividad para ensayar artimañas que le permitan negociar el billete informal burlando las inspecciones de los agentes de la AFIP. Es así como ya no hay “segundos pisos”, pero si depósitos de mercadería y hasta garages que se convirtieron en mostradores del billete paralelo. También, según cuentan en el mercado, algunos kioskos y locales de ropa del microcentro porteño utilizan la fachada legal como centros de distribución de dólares.

Otro tanto ocurrió con el contado con liqui, que escaló ayer un centavo a $ 4,76 y su demanda se mantiene estable pese a los controles. Incluso, algunas sociedades de bolsa bajaros sus comisiones del 3,5% al 1,5% para las operaciones que permiten sacar divisas del país, temiendo que las restricciones de la AFIP desalentaran este negocio.
Fuente: lapoliticaonline.com

La Nación: el dólar y la acción del gobierno

Roberto Cachanosky, de La Nación, culpa a la gestión nacional de la generación de miedo respecto del futuro del sistema financiero.
“De acuerdo a la versión del Gobierno, estamos en un etapa de crecimiento que supera cualquier período los 200 años de historia argentina. Además, según Cristina Fernández, Obama la felicitó por el modelo económico. Curiosa felicitación la de Obama porque a los dos días de felicitarla EE.UU. votó para que el BID no le otorgara a Argentina dos créditos de solo U$S 33 millones y, entre otras de las virtudes que nos relatan es que la inflación apenas llega al 10% anual y el dólar no tiene porqué subir.

“Ahora bien, si el peso es tan sólido como dicen desde el Gobierno, ¿por qué razón la gente quiere dólares y no quiere los pesos? Es más, ¿por qué se preocupa el Gobierno por la compra de dólares si la gente no va a ser tan tonta de comprar una mercadería que está artificialmente cara con un contexto económico de prosperidad imparable gracias al «modelo»? Si es como dice la historia oficial, en algún momento la gente dejará de comprar dólares cuando advierta que está haciendo un muy mal negocio. Por otro lado, si los supuestos grupos concentrados -solo Dios sabe qué quieren decir con esta frase- están haciendo subir el dólar y no la gente común, entonces los famosos «grupos concentrados» perderán fortunas cuando se descubra que el dólar, de acuerdo a la versión del Gobierno, bajará por la habilidad de las autoridades económicas para manejar el mercado cambiario y demostrar que el BCRA tiene poder de fuego para dominar el mercado y la economía está muy sana”…
por La Nación

Dólar: ¿Qué hacer si te rebota la AFIP?


Mediante la resolución 3.212 del 2011, publicada el 8/11/2011 y que entra en vigencia a partir de 09/11/2011, la AFIP explicó cuáles son los pasos a seguir por aquellos que intentaron comprar dólares pero fueron rechazados por su “insuficiente capacidad económica financiera”.

La AFIP detalló cuál es el procedimiento para comprar dólares a pesar de haber sido “rebotado” en bancos o casas de cambio. Con documentación respaldatoria del origen de los fondos y una copia de los motivos por los que el sistema de la agencia de recaudación rechazó sus compras, los afectados deberán acudir a una dependencia de la AFIP correspondiente a sus domicilios y quedar sujetos a la decisión del organismo, informa hoy el diario El Cronista.com.

Los que después del rebote pretendan adquirir dólares de todas maneras, deben acercarse a la dependencia de la AFIP que corresponda a su domicilio fiscal y presentar una nota “redactada en base a un formulario que provee la propia agencia”, acompañada de una impresión de la respuesta que le dio el sistema del organismo al rechazar la operación. También deberá llevar “documentación fehaciente que acredite el origen y cuantía de los fondos a utilizar para el pago de la compra de la moneda extranjera”.

Si los motivos del rechazo fueran otros, deberá hacerse la misma presentación, además de regularizar su situación impositiva.

Fuente: mdzol.com

La AFIP aclaró cómo proceder en el caso de haber sido rebotado

La AFIP detalló cuál es el procedimiento para comprar dólares a pesar de haber sido “rebotado” en bancos o casas de cambio. Con documentación respaldatoria del origen de los fondos y una copia de los motivos por los que el sistema de la agencia de recaudación rechazó sus compras, los afectados deberán acudir a una dependencia de la AFIP correspondiente a sus domicilios y quedar sujetos a la decisión del organismo.
Mediante la resolución 3212 del 2011 publicada ayer, y que entra en vigencia a partir de hoy, la AFIP explicó cuáles son los pasos a seguir para aquellos que intentaron comprar dólares pero fueron rechazados por su “insuficiente capacidad económica financiera”.
Los que después del rebote pretendan adquirir dólares de todas maneras, deben acercarse a la dependencia de la AFIP que corresponda a su domicilio fiscal y presentar una nota –redactada en base a un formulario que provee la propia agencia–, acompañada de una impresión de la respuesta que le dio el sistema del organismo al rechazar la operación. También deberá llevar “documentación fehaciente que acredite el origen y cuantía de los fondos a utilizar para el pago de la compra de la moneda extranjera”.
Si los motivos del rechazo fueran otros, deberá hacerse la misma presentación, además de regularizar su situación impositiva.
La resolución publicada ayer también establece códigos para bancos y casas de cambio puedan agilizar las compras de personas eximidas de los controles, como turistas extranjeros o beneficiarios de jubilaciones percibidas en el exterior.
Fuente: elcronista.com

La bolsa porteña sube 2,05 por ciento y el dólar se cotiza a $4,28

Los negocios en la Bolsa de Comercio porteña se movían en terreno positivo, alentados por la fuerte suba de la acción de YPF, 9,27 por ciento, luego del hallazgo de más petróleo no convencional en el sur del país.

Cuando aún no había transcurrido la primera hora de rueda, el índice Merval de las empresas líderes estaba 2,05 por ciento arriba, una diferencia que se sustentaba en un volumen de 12,12 millones de pesos.

En tanto, el dólar al público se cotizaba a 4,23 pesos para la compra y 4,28 pesos para la venta, mientras que en el segmento mayorista las operaciones entre bancos y empresas reconocían un valor de 4,262 pesos.
Fuente: diariohoy.net

El Gobierno dejó en claro su objetivo N°1: no devaluar y sostener el consumo «cueste lo que cueste»


Para quienes dudaban sobre qué medidas tomaría el Ejecutivo tras asegurarse la reelección, lo ocurrido en pocos días sirvió para entender lo que viene. Y esta «profundización del modelo K», que arrancó con el fuerte control en la compra de dólares es sólo el principio ¿Quién hará de árbitro?.
«Las medidas que tengan que tomarse, llegarán apenas transcurran las urnas», decía una semana antes de los comicios un funcionario que visita frecuentemente la Casa Rosada.

Y si los empresarios y el mercado financiero pedían señales post-electorales sobre en qué iba a consistir la profundización del modelo K, la catarata de medidas lanzadas en apenas siete días los ayudó a calmar su ansiedad.

En tan solo una semana pasaron más cosas que en los últimos meses.

Desde el «ejército» de inspectores y funcionarios de AFIP, UIF, Banco Central, Gendarmería y Prefectura desembarcando en las casas de cambio de la city porteña.
Pasando por nuevas medidas oficiales para controlar más de cerca el movimiento de billetes verdes de petroleras, mineras y aseguradoras.
Hasta la frutilla del postre, que es que todo argentino que quiera comprar dólares deberá «pedirle permiso» a la AFIP. Tendrá que tramitar online el pedido y la entidad podrá aprobar o no la operación en base a su capacidad contributiva (ver nota: Dime cuál es tu ingreso declarado y te diré cuántos dólares podés comprar).
Así las cosas, la cruzada «anti-dolarización» no se hizo esperar.

En realidad, todo este arsenal de iniciativas forma parte de un paquete de medidas pensadas de antemano, en los meses previos.

Y que estaban en la «gatera», a la espera de que concluyeran los comicios para hacer su debut.

Muchos analistas apelan a la conocida frase «esto recién empieza», ante la pregunta acerca de si esta avanzada se va a profundizar.

Es que lo que sí quedó más que claro es que desde el Gobierno se echará mano a todo tipo de medidas para evitar que el dólar suba a un ritmo más acelerado que el que imperó hasta ahora.

También, que su objetivo «Número 1» es (y será): «No a la devaluación, al menos en el corto plazo, y sostener el consumo, cueste lo que cueste».

Y en este «cueste lo que cueste» se incluye:

Reducir, como sea, la demanda de divisas.
Aumentar, como sea, la oferta de billetes.
Controlar a los bancos para que no encarezcan los créditos.
Impulsar planes para fomentar el consumo.
Devaluación, mala palabra
En este marco, banqueros que participaron en la reunión que tuvieron con Marcó del Pont -a horas de transcurridas las elecciones- cuentan, off the record, que la titular del Central «puso el grito en el cielo» cuando le plantearon subir un poco más el dólar para compensar la pérdida que sufrió la divisa en relación con los fuertes ajustes salariales y la inflación.

Pero, de momento, esta alternativ «no es una opción» para el oficialismo, que ve en ese escenario un posible enfriamiento de la economía. En el mercado no se descarta una aceleración de la devaluación en el mediano plazo, pero recién después de haber conseguido el objetivo de transmitir un mensaje de estabilidad y de que no perdería la pulseada contra el mercado financiero.

Tampoco el Ejecutivo con buenos ojos que se encarezcan los créditos y que esto mate a la «gallina de los huevos de oro», es decir el boom de compras, que lo ha llevado a una contundente victoria en las urnas.

Del otro lado del mostrador, los ejecutivos de las entidades financieras se ven un poco más ajustados para cumplir esta misión.

«Se nos hace muy cuesta arriba mantener las tasas cuando por cada dos pesos que prestamos nos está entrando sólo uno como depósitos y además se nos fugan muchos fondos al dólar. No tenemos la misma liquidez que antes», expresa un alto directivo de un banco con marcada preocupación.

Más controles a un «mal negocio»
Claro está, que la gran cantidad de reservas que ha venido sacrificando el Banco Central también forma parte del «cueste lo que cueste».

No obstante, la idea del Gobierno es que, con las nuevas medidas dirigidas a la compra de dólares, las ventas por parte de la entidad sean lo más bajas posible.

Por lo pronto, el tener que sacrificar tantos dólares de las arcas del BCRA hasta borró la sonrisa de Mercedes Marcó del Pont, que ya no repite su célebre frase: «Este modelo se la banca».

En tanto, el discurso de otros funcionarios va por el lado de convencer a los argentinos de que comprar billetes verdes no es redituable.

«La gente que adquiere dólares hace un mal negocio. Sólo basta con sacar la cuenta de la rentabilidad contra un plazo fijo», afirmó Miguel Pesce, vicepresidente del Central.

Ante semejante argumento de persuasión, el escepticismo de los analistas ahora es más grande que la ventaja que Cristina le sacó al resto de los candidatos el domingo 23.

Para el economista José Luis Espert, resulta hasta contradictorio decir que es un mal negocio comprar y, a la vez, implementar toda una batería de controles para evitarlo. «Son absurdas desde lo conceptual y desde lo numérico», dijo el economista.

A la hora de analizar las medidas que apuntan a aumentar la oferta de divisas, como la de obligar a empresas a liquidar sus dólares en el país, el economista Carlos Melconian afirma: «El problema de la Argentina no es de oferta, sino de demanda, que va a continuar alta».

¿Y por qué seguirá elevada? «La percepción en la sociedad es que el tipo de cambio está atrasado», argumenta Jorge Todesca, de la consultora Finsoport.

Y tal percepción de dólar barato, de la ya que viene dando cuenta iProfesional.com desde hace casi dos años, resulta ser la visión de la mayoría de los economistas (ver nota: «La paradoja del dólar: cuanto más lo «congela» el Gobierno, más seducirá a ahorristas»).

Todesca remarca: «Mantenerlo planchado es una política que cada vez se distancia más de la realidad. Las corridas cambiarias sólo terminan cuando se alcanza un nuevo punto de equilibrio».

El «modelo» va por todo
Lo cierto es que, a juzgar por las últimas medidas, el «nuevo» Gobierno intenta conciliar varios objetivos, difícilmente compatibles, como ser el de que el dólar no suba pero, a la vez, mostrar que es mal negocio comprarlo.

O reforzar la caja verde en lo que hace al comercio exterior (exportaciones menos importaciones).

Al respecto, ya son varios los rumores que dan cuenta de una «nueva normativa» que apuntará a «limitar el envío de utilidades al exterior» o, mejor dicho, incrementar los controles a los giros de dividendos.

En definitiva, queda claro que «El modelo K no se mancha». Ni siquiera por el faltante de dólares (o porque éste haya quedado barato).

Vivir con lo nuestro
Por otra parte, el cerrojo al ingreso de productos importados también será una herramienta clave para cumplimentar el objetivo oficial.

En particular, ante la desaceleración de la economía internacional.

Ante ello, tal como adelantó el viceministro Feletti -ante un panorama en el que resulta factible que la Argentina tenga dificultades para exportar- el Gobierno busca que la demanda interna pueda «compensar» ese problema.

Vale decir, que se pueda consumir en casa todo aquello que originalmente estaba previsto ser vendido en otros mercados.

«En la memoria y en el diagnóstico oficial está presente que así como en el 2009 se logró salir rápida y exitosamente de la crisis financiera internacional, en el 2012 se puede volver a repetir este escenario», observa Mario Brodersohn, titular de Econométrica.

Sin embargo, algunos analistas muestran su escepticismo sobre esta cuestión.

«El consumo va tener una variación moderada, porque ya no hay condiciones económicas para que se pueda sostener a las tasas que hemos visto. Y entre los sectores que más sentirán el freno se encontrarán el de los bienes durables», advierte Ernesto Kritz, titular de Sel Consultores.

En la misma dirección, Eric Ritondale, de la consultora de Miguel Kiguel señala: «Quienes pronostican un consumo alto se equivocan. Están extrapolando lo ocurrido en los últimos dos años como si pudiera repetirse indefinidamente. Nuestra proyección es que no se caerá, pero variará en torno del 3,5%».

Los bancos, árbitros del partido
¿Quiénes serán los que podrán torcer la cancha a favor del apuntalamiento del boom de compras o, por el contrario, producir un enfriamiento?

Claramente los bancos, a partir de no aumentar el costo de los créditos y mantener en el partido a un jugador clave: las ya tan arraigadas cuotas sin interés.

Sin embargo, la menor liquidez actual los lleva a una cierta moderación.

En efecto, un alto directivo de uno de los 5 bancos privados que pelea fuerte en el segmento de descuentos con tarjeta, advierte que las promociones de 24 cuotas fijas sin interés, una vez transcurrida la temporada navideña, pasarán a formar parte de aquellos recuerdos que se evocarán con nostalgia.

En su línea argumental, lo que frena el crédito es la menor liquidez.

Y es lo que explica por qué en pocos meses se hayan encarecido el uso de tarjetas, descubiertos bancarios y créditos personales (ver nota: «Efecto dólar: plazos fijos ya pagan «casi» la inflación pero se encarecieron hipotecarios, tarjetas y descubiertos»).

«El dinero que estaba disponible para financiar el consumo ya se entregó todo, y ahora se hace difícil mantener el ritmo de crédito cuando el crecimiento en los depósitos ha venido mucho más lento», agrega el directivo de la entidad.

Y destaca que si bien las alianzas estratégicas con los supermercados y las cadenas de electrodomésticos seguirán, ya no tendrán los mismos beneficios.

«Lo único que es factible es que se mantenga sólo el descuento sobre el precio de lista», dispara.

La pregunta y la respuesta del millón
Un tema que queda claro en el sistema financiero es que la posibilidad de financiar consumo se reducirá en tanto la fuga de capitales siga alta.

Y la pregunta que cabe hacerse en este punto es: si aun con la suba de tasas de los plazos fijos los argentinos siguen comprando dólares, ¿cuánto más deben pagar para enfriar la demanda de billetes verdes?

La respuesta a este interrogante la dan los propios directivos de los bancos: «Lo importante, en sí, no es la tasa que se paga por los depósitos en pesos, sino si la misma es mayor o menor que la suba que espera la sociedad para el dólar».

En este sentido, el mercado de futuros de la divisa estadounidense muestra que la expectativa de los inversores es de un tipo de cambio en torno de los $5.

Vale decir, una devaluación del 17 por ciento anual.

Pero los bancos encuentran otro problema. Aun cuando estuvieran dispuestos a pagar mucho más por los depósitos, temen que el comunicar tipos de interés muy altos sea contraproducente, al generar en el público una sensación de iliquidez.

Fuga persistente, tasas de interés que suben, reservas que se erosionan, catarata de controles en el mercado de cambios… Todo lo que ocurre en estos días tiene olor a película ya vista.

Salvo, claro, por el detalle de que los argentinos siguen en su fiesta consumista, gracias a que el «financista de última instancia», es decir, la soja, aún sigue firme.

Pero nadie se anima a decir por cuánto tiempo podrá cumplir a rajatabla con ese rol.
Fuente:iprofesional.com

El dólar subió medio centavo y cerró en $4,28

La divisa estadounidense comenzó la semana con una suba en las principales casas de cambio de la city porteña. El dólar comenzó la semana con una suba en las principales casas de cambio de la city porteña. La divisa registró hoy un alza de medio centavo en el precio para la venta y cerró en 4,28 pesos.

La semana pasada el dólar mayorista cerró en torno a los $ 4,256 y el minorista quedó a un promedio de $ 4,275. El dólar que resulta de la operatoria bursátil «contado con liquidación», vehículo para la fuga de capitales, subió el viernes 5 centavos, a 4,80 pesos, luego de que el jueves la ANSeS vendiera bonos cortos en dólares e hiciera descender el precio hasta 4,75 desde los 5,15 previos.

El Gobierno dispuso a partir del último lunes un control de solvencia de la AFIP al público minorista, una medida que se sumó a otras anteriores que procuraban frenar una fuga de divisas que superaba los 20.000 millones de dólares en el año y que ha erosionado las reservas del Banco Central.
Fuente: clarin.com

El dólar abre la semana estable a $4,28 para la venta

La divisa comenzó la semana en la city con una suba de un centavo con respecto al cierre de última jornada. Continúan los controles para la compra.

El dólar comenzó la jornada con una suba de un centavo con respecto al cierre del viernes, y se cotiza a 4,23 para la compra y 4,28 para la venta en bancos y casas de cambio de la city porteña.

Las medidas implementadas por la AFIP la semana pasada mantienen el precio de la moneda norteamericana, que había cerrado el viernes en 4,23 para la compra y 4,27 para la venta.

En tanto, El Euro cerró la semana a 5,77 y 5,89 y el Real a 2,30 y 2,34 respectivamente

El dólar al público se mantiene

El dólar al público cerró hoy sin cambios, a $4,23 para la compra, y a $4,27 para la venta, en las principles casas de cambio de la city porteña.
En tanto, la Bolsa porteña caía 0,35%, con un nivel bajo de operaciones, en línea con las bajas ocurridas con las bolsas europeas, y el Down Jones, que caía 0,68%.
Fuente: diariohoy.net

Dólar a la Venezolana: ¿Qué hace Chávez para frenar al dólar?

En vista de lo que podría llegar a venir, la consultora de Carlos Melconián elaboró un informe sobre cómo opera el mercado cambiario venezolano. En este nota, publicada hoy por el diario El Cronista.com, te lo mostramos.
Los nuevos controles sobre la compra de dólares disparó un sinfín de especulaciones. Si el Gobierno no detiene la demanda por el billete verde, ¿irá por más? En vista de lo que podría llegar a venir, la consultora de Carlos Melconián elaboró un informe sobre cómo opera el mercado venezolano.

Desde 2003 rige un sistema de control que centraliza la compra venta de divisas en el Banco Central de Venezuela (BCV), con un tipo de cambio establecido por las autoridades. Cuando se introdujeron los controles se creó la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) para realizar la tarea de control sobre el mercado cambiario.

El primer paso fue la obligatoriedad de liquidar ante el BCV el 100% de las operaciones de exportación. Simultáneamente, la compra de divisas dejó de ser libre para requerir una autorización previa. La Cadivi tiene por finalidad otorgar esas autorizaciones. Creó una base de usuarios del régimen cambiario y estableció los requisitos que deben cumplir los que pretendan acceder al mercado de divisas.

Tanto las personas físicas como las jurídicas que quieren comprar dólares deben inscribirse ante la CADIVI y completar una «carpeta» con información. Luego hay requisitos específicos para avalar cada operación en particular. En el caso de la compra de divisas por turismo o para cancelar gastos efectuados en el exterior, se pide documentación como pasajes, tarjetas de crédito, etc. Las personas tienen fuerte limitaciones para hacerse de dólares en el mercado oficial de cambios. En el caso de viajes, están limitados a un máximo de U$S500 en efectivo por año y U$S2.500 para el pago de tarjetas.

por Cronista.com

En el tercer día de controles, el dólar sigue concentrando la atención

Ayer el BCRA casi no vendió reservas y el billete igual trepó un centavo a $ 4,27. El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray aseguró que sólo se rechazó el 5,7% de las operaciones.

Se largó la tercera rueda cambiaria desde la imposición de nuevos controles gubernamentales sobre la compra de dólares.

El billete abrió a 4,22 pesos para la compra y $ 4,27 para la venta, tras avanzar ayer un centavo en los principales bancos y casas de cambio de la city porteña.

En la rueda del martes, el Banco Central (BCRA) mostró un cambio de estrategia, al cuidar sus reservas y apenas intervenir la plaza con unos 30 millones de dólares.

El titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, aseguró anoche en conferencia de prensa que sólo se rechazó el 5,7% de las operaciones, en un intento por disipar las críticas de los ahorristas que aseguran que se torna casi imposible adquirir divisas por las vías tradicionales.

Fuente: Cronista.com

Sin cambios a pesar del control: el dólar se mantiene a 4,26

El dólar inició la jornada con una cotización de 4,22 pesos para la compra y 4,26 para la venta, en los bancos y en las casas de cambio del centro porteño. Así, la moneda norteamericana no registraba variaciones en su valor respecto del cierre de ayer, cuando comenzaron los controles para la venta de moneda extranjera dispuestos por el Gobierno.
Fuente: diariohoy.net

Los inversores pagan hasta casi $5 por el dólar

Hoy, todos aquellos que efectúan la operatoria a través del mercado de capitales (eludiendo los controles cambiarios) pueden hacerlo a un tipo de cambio implícito que está al borde de los $5 y pagar un costo en pesos del 15% del monto a retirar del país. Los títulos más elegidos son el Boden 2012 y el 2015 y las acciones de empresas como Galicia, Tenaris, Petrobrás, Francés y Telecom.
Las nuevas disposiciones emitidas por el Banco Central para el mercado cambiario dificultaron la fuga que realizan los inversores mediante el arbitraje de títulos y elevaron sus costos. A tal punto que hoy todos aquellos que efectúan la operatoria a través del mercado de capitales (eludiendo los controles cambiarios) pueden hacerlo a un tipo de cambio implícito que está al borde de los $ 5 y pagar un costo en pesos del 15% del monto a retirar del país.

Los operadores consultados por El Cronista explicaron que el negocio no perdió volumen a pesar del mayor esfuerzo del Banco Central por erradicarlo. El jueves pasado, el organismo había resuelto que, a partir de entonces, quienes compraran más de U$S 250.000 anuales deberán determinar con qué flujo de ingresos adquieren las divisas. La medida, a pesar de que se advirtió que recaería sobre un tercio del mercado minorista, no tuvo ningún impacto en el volumen de las operaciones.

Los títulos elegidos para realizar el contado con liqui son los nominados en moneda extranjera de mediano plazo, como el Boden 2012 y el 2015, y las acciones que tienen sus respectivos ADR en el exterior, como Galicia, Tenaris, Petrobrás, Francés y Telecom. El tipo de cambio implícito entre los precios locales y los que tienen esos mismos activos en Nueva York se ubicó el último viernes en los $ 4,89. Son 60 centavos más que el dólar mayorista que se esmera en dejar congelado el Banco Central ($ 4,236).

Suspenderían las remesas de utilidades al exterior

Según adelanta hoy el diario El Cronista.com, se estudia la suspensión de hasta 180 días de las remesas que envían al exterior las empresas multinacionales y los bancos extranjeros. En particular la medida recaería en empresas petroleras y mineras que han sido obligadas a liquidar el total de sus exportaciones en el país luego de las normativas del BCRA de la semana pasada.
En su cruzada en contra de la compra de dólares, que el Gobierno inició con la aplicación del Programa de Control de Operaciones Cambiarias, los técnicos del Ministerio de Economía, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y el Banco Central (BCRA) estarían trabajando para implementar más normas para evitar la fuga de divisas al exterior, informa hoy el diario El Cronista.com

Entre esas medidas, se estudia la suspensión de hasta 180 días de las remesas que envían al exterior las empresas multinacionales y los bancos extranjeros.

En particular la medida recaería en empresas petroleras y mineras que han sido obligadas a liquidar el total de sus exportaciones en el país luego de las normativas del BCRA de la semana pasada.

La idea de frenar las remesas por hasta 180 días sería para que el Gobierno no pierda más reservas internacionales y llegue tranquilo a mayo próximo, cuando se empiecen a liquidar con fuerza los dólares por las exportaciones de soja y derivados.

Una de las mayores preocupaciones del Gobierno pasa por el aumento de las remisiones de utilidades al exterior que viene creciendo durante la gestión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Los números del Balance de Pagos que publica el Indec muestran que en 2007 se remitieron utilidades y dividendos al exterior por unos U$S4.948 millones. Esa suma pasó a U$S6.882 millones en 2008 cuando estalló la crisis del campo. En el 2009 el valor llegó a los U$S7.159 millones, en tanto que para este año se estima un récord de unos U$S10.000 millones.

El dólar paralelo oscila entre los 4,70 y 4,80 pesos

El dólar paralelo se cotiza en las mesas de dinero en 4,70 pesos, mientras que los vendedores callejeros lo ofrecen a 4,80 pesos. El viernes, antes de los nuevos controles, promediaba los 4,45 pesos.
Era previsible. El dólra parelelo pegó un fuerte salto luego que el gobierno lanzará su nueva batería de controles para dificultad la compra de divisas en el mercado formal.

Acercándose de manera derática al 5 a 1, valor que en el mercado se estima que debería estar la paridad, pasado el mediodía aparecieron los primeros valores para el dólar paralelo, que lo ubicaron en la fraja que va de los 4,70 a 4,80 pesos.

Según pudo averiguar LPO, en las measas de dinero que sólo operan con contactos conocidos se ofrecía la divisa a 4,70 pesos, pero habría algunos inconvenientes de disponibilidad inmediata del billete, según las cantidades demandadas.

En tanto que en la calle la divisa que ofrecen operadores que repine la palabra «dolár» como un mantra, alcanzaba los 4,80 pesos. El viernes el paralelo cerró a 4,45 de promedio.

Mientrsa que el oficial hoy se mantenía en 4,26, aunque numerosos bancos y casas de cambio no podían venderlo por demoras en instrumentar la nueva operatoria que exige consultas previas a la AFIP antes de realizar una venta.

La ampliación de la brecha entre el dólar oficial y el paralelo o «blue» ofrece argumetos a quienes ostienen que con estos controes el gobierno avanza en los hechos en un desdoblamiento del mercado cambiario.

Normalmente el mercado paralelo espera que avance la jornada, para ver como evoluciona el dólar oficial, la liquidación de divisas de las exportadoras y otras variables claves de la economía, para fijar el valor del dólar “blue”, por lo general después del mediodía.

Pero hoy ese dato económico cobró significancia por los nuevos controles de la AFIP que sugieren que comprar dólares de manera oficial será mucho más complicado de lo habitual, lo que por lo visto está potenciando el mercado paralelo.

Esta incertidumbre incluso alcanza a los que operan en el mercado oficial, a los grandes jugadores a los que se refirió esta mañana el ministro de Economía Amado Boudou, que según supo LPO, en muchos casos van a tomarse unas 48 horas para definir sus posicionamientos en el mercado del dólar.
Fuente: lapoliticaonline.com

Anticipo: Toda operación de mostrador deberá aprobarla la AFIP

El directorio del Banco Central y los gerentes y subgerentes a cargo de las normas cambiarias decidieron un texto que supedita a la aprobación de la Afip toda compra de moneda extranjera en mostrador. Parece un acto de desesperación que empuja el dólar marginal y establece una devaluación implícita que, si se estaciona en $5, la estiman en 20%.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). La decisión ya fue tomada por el Banco Central (Amado Boudou y Hernán Lorenzino, en el Palacio de Hacienda, han dado un paso al costado en estos temas cambiarios, probablemente una pequeña venganza por haber sido dejados de lado en los anuncios sobre liquidación de cambio de petroleras y mineras). El Banco Central fijará que toda operación cambiaria de mostrador deberá ser autorizada por la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip).

Así, la autoridad regulatoria supone que levanta un filtro importante en el mercado de contado de moneda extranjera, aunque es obvio que se potencia el mercado ‘blue’, a niveles importantes.

En los últimos días, el mercado marginal de cambio (que no se hace ni en bancos ni en casas ni agencias de cambio. Suficiente experiencia hay al respecto en la Argentina), ya fue beneficiario de que con las normas del BCRA se distanció el tipo vendedor del tipo comprador, o sea que los operadores ganan más dinero por operación.

Ahora, entre el BCRA y la Afip empujarán una oferta adicional a ese mercado, estimándose que levantará el precio de la paridad, probablemente hasta $5, si la plaza luce agitada, y ese es el piso del tipo de cambio que se instalará en los agentes económicos. O sea que se vaya preparando Guillermo Moreno, secretario de Comercio.

Dado que el verdadero impulsor de la demanda de moneda extranjera es el índice de variación de precios que descuenta la sociedad (que no le cree al INdEC), el embrollo cambiario puede darle nuevos bríos al deslizamiento de precios.

Luego, sorprende la inexperiencia del Banco Central para lidiar con los temas cambiarios. Por un lado, hay un directorio integrado por funcionarios sin experiencia real de mercado. Luego, hay gerencias integrada por funcionarios formados en otra filosofía del mercado.

El resultado es patético, más allá de que Cristina Fernández siga creyendo, equivocada, que porque ganó con el 53,9% de los sufragios puede imponerle a la sociedad su punto de vista sobre variables como el tipo de cambio.