La salud de Chávez permanece en el misterio, mientras su hijas estarían debatiendo la posibilidad de desconectarlo
Todavía sin información concreta al respecto de la recuperación de Chávez, las conjeturas siguen circulando y las de pronóstico más oscuro cobraron fuerza cuándo Nicolás Maduro salió a pedir que recen por la recuperación del bolivariano. La más reciente indicaría que, por más que se intente ocultar, Hugo Chávez Frías se encuentra agonizando en La Habana conectado a un respirador artificial luego de que los médicos lo hayan colocado en un estado de coma inducido ante lo crítica que es su situación, mientras sus hijas deciden si desconectarlo o no, versión que parece confirmarse con el viaje repentino del hermano del presidente a La Habana.
El pasado 11 de diciembre Chávez debió someterse a una intervención quirúrgica en el Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas (Cimeq) de La Habana. Allí, como consecuencia del cáncer terminal que padece el venezolano, se le practicó la extracción de varios centímetros de intestino delgado. Luego sufrió complicaciones respiratorias durante el postoperatorio y una insuficiencia renal, ante este panorama, por lo que los médicos decidieron mantenerlo en un coma inducido.
Desde entonces, el hermetismo con el que se está manejando la información sobre la salud de Hugo Chávez ya es un indicio de que las cosas no marchan favorablemente para el bolivariano. Y así parece confirmarse, ya que hoy el periodista venezolano Nelson Bocaranda difundió vía Twitter que las hijas del presidente se encuentras decidiendo si retirarle el respirador artificial a ya que «no responde a ningún tratamiento». Mientras tanto, el régimen de visitas fue restringido por el centro médico cubano y Venezuela continúa rezando mientras el oficialismo local se niega a evaluar qué hacer ante un desenlace fatal.
Quién también participa de la decisión es Adán Chávez, hermano del presidente, quien fue consultado por sus hijas, reveló también Bocaranda. Mientras tanto, en Venezuela, el entorno político más cercano a Chávez le recomendó a Marisabel Rodríguez, su segunda esposa de Chávez y madre de su hija Rosinés, que no viaje a La Habana, probablemente en un intento de calmar los ánimos populares y no crear más incertidumbre.
Cabe destacar que las versiones del periodista venezolano coinciden con el viaje de Adán Chávez a La Habana y con el reciente sinceramiento de Maduro, quien reconoció que el estado de salud del presidente se encuentra en una situación “delicada” por problemas postoperatorios y llamo a que recen por su recuperación.
Mientras tanto continúan las especulaciones ya que el secreto en torno al asunto es enorme y el oficialismo venezolano intentará ganar todo el tiempo necesario ya que ante la posibilidad de fallecimiento de Hugo Chávez, la Constitución del país demanda nada más y nada menos que el llamado a elecciones.