El canciller estará la semana que viene en Londres donde su par británico William Hague, pretende recibirlo con representantes del gobierno kelper, ya que rechazó que cualquier reunión que abarque el tema ‘Falklands’ se lleve acabo sin representación de los isleños. Pero Timerman rechazó el convite y le dijo a su colega inglés en una carta:»una pena que usted se niegue a una reunión bilateral».
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El canciller Héctor Timerman visitará Londres la próxima semana para discutir temas relacionados con la soberanía de las Islas Malvinas, y allí su par, William Hague, pretende recibirlo con representantes del gobierno kelper, ya que rechazó que cualquier reunión que abarque el tema ‘Falklands’ se lleve acabo sin representación de los isleños.
Pero el convite fue rechazado por el canciller argentino de forma contundente. En una carta dirigida a su par británico, Timerman rechazó la convocatoria tripartita y le dijo a Hague que es «una pena que usted se niegue a una reunión bilateral». «Usted no puede ignorar que la Cuestión Malvinas es un conflicto que debe resolverse mediante el diálogo entre ambos países», criticó.
La negativa del Gobierno Nacional había sido transmitida por un «vocero calificado» de la Cancillería, citado por el sitio Infobae.com, quien explicó que las relaciones exteriores «son entre Estados» y recordó que para la ONU los isleños no son reconocidos como parte interesada en el conflicto por la soberanía de los archipiélagos del Atlántico Sur.
El gobierno argentino decidió no darle entidad a la convocatoria, en línea con los fundamentos legales que viene sosteniendo la administración de Cristina Fernandez en cuanto al no reconocimiento de los kelpers como representantes de un Estado independiente, señala el portal.
«Lamento su carta de ayer en la que señala que no puede reunirse sin la supervisión de los colonos malvinenses», comienza la misiva, en la que Timerman insiste en su solicitud para un encuentro con Hague. «Luego de las reuniones bilaterales han surgido iniciativas que profundizaron los lazos de amistad entre los pueblos», explica.
El diplomático lanzó, además, una advertencia: «Su decisión seguramente perjudicará el interés argentino de trabajar con el Reino Unido en el G20, Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, temas de proliferación nuclear, tráfico de personas, drogas, lavado de dinero, inversiones, comercio, derechos humanos, y tantos otros en los que ambos países somos activos miembros de la comunidad internacional».
En la carta, el ministro espeta al jefe de la diplomacia británica que «no puede ignorar que las Naciones Unidas, su Asamblea General y su Comité de Descolonización han resuelto que la Cuestión Malvinas es un conflicto de soberanía entre el Reino Unido y Argentina que debe resolverse mediante el diálogo entre ambos países», y asegurá que «la comunidad internacional no acepta una tercera parte en esta disputa».
Tras informar que una copia de ese mensaje fue enviado al secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, «ya que fue designado por la Asamblea General para ejercer sus buenos oficios en lograr que se inicie el diálogo», Timerman expresó a Hague que «no es necesario que siga intentando armar reuniones» durante la visita que hará a Londres la próxima semana. «Deje ese trabajo a nuestra eficiente Embajada», dijo.
«Aprovecho esta oportunidad para invitarlo a visitar la Argentina, mantener una reunión bilateral y apreciar que nuestro país es una verdadera democracia donde mis colegas cancilleres se pueden reunir libremente con quien lo deseen sin que yo tenga que presionarlos o condicionar su presencia a reuniones que no me soliciten o no les interesen».
Más temprano un vocero de la Foreing Office había declarado, según a agencia AFP: «Sabemos que el ministro de Relaciones Exteriores argentino Héctor Timerman es esperado en el Reino Unido la próxima semana, y le hemos invitado a venir al Foreign Office a reunirse con el ministro de Relaciones Exteriores y representantes del gobierno británico y del gobierno de las islas Falklands».
Por su parte, el sitio Penguin News, informó que «2 miembros de la Asamblea Legislativa de las Islas han comunicado su intensión de encontrarse con el canciller argentino en Londres la próxima semana, de todas formas el gobierno de las Islas ha dejado claro que no negociarán ningún acuerdo, pero anticiparon, «un completo y franco intercambio de visiones»».
Según la asamblea legislativa de las Malvinas, Hague «querría plantear la seria preocupación del Reino Unido sobre la política de Argentina» hacia el archipiélago del Atlántico Sur bajo control británico desde 1833.
Los representantes de las Islas, Dick Sawle y Jan Cheek, viajarán este fin de semana a Londres a fin de estar disponibles para participar en la reunión.
«Hague también reiteró a Argentina que nunca podrá haber ninguna negociación sobre la soberanía de las islas Falklands al menos y hasta que lo deseen los isleños», subraya el comunicado publicado en la página web del gobierno.
«La asamblea legistativa de las islas Falklands cree que el resultado del próximo referéndum demostrará definitivamente que no lo deseamos. Si el tema de la soberanía se plantea en la reunión, no se discutirá», afirma el texto.
«Exigimos que se respeten nuestros derechos y que se nos deje en paz para elegir nuestro propio futuro y desarrollar nuestro país para nuestro hijos y generaciones venideras», agregó la asamblea legislativa.
Los casi 3.000 habitantes de las Malvinas, en su mayoría británicos, están convocados a las urnas los próximos 10 y 11 de marzo para pronunciarse sobre si desean seguir siendo un Territorio de Ultramar del Reino Unido.
La Argentina rechaza esa consulta, porque considera a los malvinenses como «población implantada» por el Reino Unido.
En un reciente mensaje a los malvinenses, el primer ministro británico, David Cameron, denunció los intentos argentinos para «aislarlos, bloquear su comercio y socavar sus industrias pesquera, de hidrocarburos y turística legítimas».
Los ánimos se volvieron a caldear este año, cuando Cristina Fernández publicó en la prensa británica una misiva a Cameron pidiéndole el «fin del colonialismo» sobre una islas de las que Argentina fue «despojada por la fuerza» y le invitó a acatar las resoluciones de las Naciones Unidas.
El comité de descolonización de la ONU vota regularmente resoluciones que invitan a los dos países a negociar una solución en la diputa por la soberanía; el Reino Unido siempre ha rechazado esos pedidos, amparándose en el derecho de autodeterminación de las islas.
Fuente: Urgente24