La presión y la extorsión de los financistas al gobierno se lo hizo saber a través de las operaciones de Liuzzi , 2do del Chino Zanini , primo político de este.
No sea cosa que se encuentren. Y los allanamientos se frenaron no por las «coimas» sino por lo implicado que están en el gobierno.
No hay más que leer el expediente de la Causa de Lázaro Báez… por decir algo.
Lo que la gente no sabe es que Liuzzi, opero contra Zanini , este, lo mando a operar a través de perfil para bajarlo del cargo. La causa fue enriquecimiento ilícito.
El chino «controla varios medios de prensa » y es dueño de varios , que no han salido a la luz. también maneja un sector de la SIDE y controla al General Milani.
En las últimas horas, la presidenta, bajo de su despacho e irrumpió en el de Zanini y lo increpo por «pelotudo» y por el escándalo publico . A lo que el Chino le habría dicho, Señora, mire que si no lo parábamos quedaban expuestas las empresas de Báez y Cristóbal López y el lavado de los dividendos de Néstor.

A lo que ella habría dicho, no , lo que hiciste fue salvarte vos, porque estas pegado con los negocios de puerto Madero y otros mas…
Por ahora el Juez » en buen criollo» la gambeteo, pero en el gobierno trataran de tapar el tema, considerando además que se sospecha que «esto es un nueva movida del chino para deshacerse de Liuzzi. Ya que Liuzzi , buchoneo a varios periodistas algunos «negocios del chino» y del gobierno.. Algo que el chino se entero por el «chupado de los teléfonos» así como el de varios periodistas.
Además el chino a través de Javier «Fernández» opera en la justicia, como en caso de la causa delos email, para ordenarle a la «arroyo Salgado que hacer» y como. Lo mismo que Oyarbide. Si lo investigan al juez le van a encontrar algunos pesitos de mas, Pero también esta extorsionado.
Javier Fernández y sus hermanos “son los principales operadores de la SIDE en el Poder Judicial”. Darío Richarte, ex número dos del organismo durante la presidencia de Fernando de la Rúa, es otro de los amigos del operador. Luego del estallido del gobierno de la Alianza volvió a trabajar como abogado y, según cuentan dos penalistas de cierto prestigio, aprovechó al máximo su buena relación con Fernández para acceder a información privilegiada sobre el ir y venir de las causas de sus clientes. Ahora es el principal operador de la side y el «ensobrador» de la justicia algo que hacía antes Mac Farlane. Fernandez, tambien era socio de Daniel Hadad , en infobae…
QUIEN ES EL RUBIO:
Liuzzi, de 57 años, es el hombre de confianza de uno de los funcionarios más influyentes del Gobierno, Carlos Zannini. De hecho es primo de su esposa, su mano derecha y ocupa el segundo lugar en la Secretaría Legal y Técnica. En las últimas horas, su nombre quedó expuesto al conocerse un escrito presentado por el juez federal Norberto Oyarbide.

El magistrado reconoció que frenó el allanamiento a una financiera tras recibir un llamado de Liuzzi. Sin embargo, no es la primera vez que el nombre del juez está junto al del funcionario en una noticia. En diciembre de 2012, Oyarbide archivó una investigación sobre Liuzzi por enriquecimiento ilícito.
Según un artículo publicado por el diario Perfil, la investigación sobre Liuzzi se inició porque multiplicó 38 veces su patrimonio desde 2003, cuando declaró $189.339, hasta finales de 2011, cuando la suma ascendía a $7.226.160.
Luego, en 2013, Liuzzi y su secretaria y esposa, Thaiss del Corazón de Jesús Hidalgo, abrieron un SPA en Puerto Madero. Sin embargo, y pese a esta compra, la declaración de su patrimonio ante la AFIP descendió abruptamente a $4.054.200.
Además de ser el subsecretario de Legal y Técnica, Liuzzi cobraba otro sueldo desde 2003 como presidente de la Comisión Fiscalizadora de la AFIP, el ente encargado de regular el fisco.
A su vez, por decreto de la Presidente, administra el «SAF», las «cajas» del Boletín Oficial y la DGA de la Casa Rosada. Es que el «Chino» Zannini, abocado full time a asesorar a Cristina Kirchner, le delegó todo el poder de toda la Secretaría Legal y Técnica.
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LAVADADERO:
Un nuevo artículo de La Nación echa luz sobre más vinculaciones financieras relacionadas con el presunto lavado de dinero, por el cual es investigado Lázaro Báez. En esta oportunidad sale a la luz un personaje del que ya diéramos cuenta: Ernesto Clarens y la vinculación de éste con Báez y la financiera Credisol SA, a través de la cual se sospecha hubo manejos de activos millonarios que podrían estar involucrados en estas acciones financieras ilícitas.
El periodista e investigador Hugo Alcona Moon, devela hoy una trama que asegura el involucramiento de otras empresas del medio, como aportantes al ingreso millonario que ha tenido la familia Kirchner en sus hoteles en El Calafate, sin que (claro está) se haya producido la ocupación efectiva de los mismos, una forma clara de justificar una facturación inexistente. Para ello, Lázaro Báez se valió de sus empresas, las cuales, sin siquiera una estructura acorde a la magnitud de los alquileres anuales que se acordaron o sin poder justificar, en algunos casos, la permanencia de tanto personal en la villa turística, figuran como rentadoras permanentes de los hoteles propiedad del matrimonio presidencial.
En esta oportunidad Alconada Moon en el diario La Nación hace referencia a dos empresas de Báez que hasta el momento no habían aparecido en este contexto. Diagonal Sur Comunicaciones SA y Credisol SA. La primera es una empresa que intentó liderar el comercio comunicacional en Santa Cruz, encargada de colocar los postes S.O.S en las rutas, los cuales no funcionan y la segunda, una vieja financiera desde los años de Néstor Kirchner, sobre la que se ciñen sospechas de lavado de dinero y de la cual forma parte Ernesto Clarens, un individuo bastante oscuro en el ámbito de las finanzas, de quien diéramos cuenta en OPI, mostrando la facturación a Credisol y que el propio Alconada cita en su nota que transcribimos.
Los acuerdos confidenciales y retroactivos que firmaron el hotel Alto Calafate, de la familia Kirchner, y el conglomerado de firmas que rodea a Lázaro Báez fueron más de siete. Al menos otras dos empresas vinculadas al constructor santacruceño pactaron convenios similares en los últimos años con el mismo fin: garantizarles ingresos millonarios a los Kirchner a cambio de cientos de habitaciones que jamás usaron.
Los dos nuevos convenios que salen ahora a la luz los firmaron Diagonal Sur Comunicaciones SA, también controlada por Lázaro Báez, y Credisol SA, vinculada a ese empresario y al financista Ernesto Clarens. Ambas tienen baja cantidad de empleados propios y operaciones centradas en Río Gallegos, lejos de El Calafate.
Ambas firmas se suman a las siete de Báez que se comprometieron a pagarles a los Kirchner 935 habitaciones por mes por un total de $ 10,1 millones entre mediados de 2010 y de 2011.
Esas siete empresas, que pagaban por habitaciones que no necesariamente eran utilizadas, son La Estación (20 empleados verificados, 90 habitaciones por mes), Don Francisco SA (23 empleados y 90 habitaciones por mes), Kank y Costilla (79 empleados y 235 habitaciones por mes), Loscalzo y Del Curto (53 empleados y 180 habitaciones por mes), Alucom Austral (13 empleados y 70 habitaciones por mes), Badial (9 empleados y 180 habitaciones por mes) y la nave insignia del grupo, Austral Construcciones (615 empleados y 90 habitaciones por mes).
Credisol y Diagonal Sur, en tanto, aportaron al menos otras 100 habitaciones por mes, por un total que superó los $ 65.000 al mes, es decir, más de $ 800.000 anuales, según reconstruyó La Nación.
Ese tercio de ocupación que garantizó Báez se combinó, a su vez, con otro tercio diario que durante ese período se encargó de cubrir Aerolíneas Argentinas, ya en pleno proceso de expropiación, y aun cuando otros hoteles de la misma categoría en El Calafate ofrecían tarifas más bajas.
Así, de combinarse ambos ingresos, el Alto Calafate se garantizó una ocupación superior al 65 por ciento, al que a su vez deben sumarse los convenios y eventos pagados por el gobierno nacional en ese hotel, como el III Congreso Federal de la Industria, en noviembre de 2012.
La primera de las dos nuevas firmas que le garantizaron ingresos al Alto Calafate es Diagonal Sur Comunicaciones, que se constituyó en diciembre de 2003. Por entonces, Kirchner llevaba apenas siete meses en la Casa Rosada. La registraron Báez y Carlos Alberto y Jorge Pedro Algorry como una firma multipropósito: energía, comunicaciones, informática, automotores y máquinas viales, importación y exportación, constructora, inmobiliaria, agropecuaria, hotelería, gastronomía y operaciones financieras.
En la práctica, Báez apeló a Diagonal Sur para tres metas: intentó monopolizar los servicios de comunicaciones en la región e incursionó en la prestación de servicios de Internet. Y terminó por facilitar las comunicaciones entre sus empresas y estancias dispersas por Santa Cruz.
De Clarens a Venezuela
Una década después de su creación, Diagonal Sur quedó en el centro de una investigación judicial. El fiscal José María Campagnoli, que luego sería suspendido a pedido de la procuradora Alejandra Gils Carbó, detectó más de 3000 llamadas desde los teléfonos de esa empresa entre el contador de Báez, Daniel Pérez Gadín, el entonces dueño de la financiera SGI Federico Elaskar y el valijero Leonardo Fariña. La Nación se comunicó ayer con el vocero de Báez, pero no hubo una respuesta oficial a la consulta.
La segunda firma que pactó comprar habitaciones en el Alto Calafate, Credisol, casi monopolizó los préstamos a los empleados públicos santacruceños mediante códigos de descuento mientras Néstor Kirchner era el gobernador. Muestra a Antonio Ramfos como su rostro visible. Pero también otros dos nombres, Clara Lamberti y Eduardo Roca, de 63 años, que llevan al poderoso dueño de Invernes, Ernesto Clarens, un financista de extrema confianza de Kirchner.
Abogado domiciliado en la ciudad de Buenos Aires, Roca trabajó en la Secretaría de Energía durante la dictadura. Luego se volcó al sector privado. Figura en múltiples sociedades. Entre otras, Cabaña San Néstor SA, Campo Austral, Patagonia Financial Services y Excel Servicios Aéreos -en las dos últimas, junto a Clarens-, y las fiduciarias Atria y Edificio Northville, en ambas junto a José Luis Colombo, yerno a su vez de Clarens.
Pero los lazos van más allá de Clarens. Porque en Northville también figuraron el ex presidente nominal de Austral Construcciones Julio Mendoza y también Fernando Butti, ex mano derecha de Báez, como así también su propio hijo, Martín Báez.
Credisol también deja en evidencia la profusión de vínculos entre Clarens y Báez. Entre otros porque esa firma vendió inmuebles en Río Gallegos al ex empleado bancario devenido empresario multimillonario. Le traspasó cinco departamentos, la planta baja y un subsuelo por $ 1,8 millones, el 20 de diciembre de 2011, según corroboró La Nación con documentos oficiales.
La otra figura de Credisol, Clara Lamberte, también lleva a otros nombres. Entre otros motivos, porque integró Dixonia SA, a la que renunció para ser reemplazada por Roca y Ana María Sangiorgio, esposa del financista, que a su vez cobró cientos de miles de pesos como “asesor financiero” de Credisol, según reveló el portal de noticias Opi Santa Cruz en mayo pasado.
Juntos, Roca y Clarens son dos eslabones de una cadena más extensa que llega lejos. También alcanza al operador judicial Horacio Díaz Sieiro, al empresario Juan José Levy, y se extiende hasta Venezuela a través de José María Olazagasti, el hombre de confianza del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido.
Más de 9500 kilómetros al sur de Caracas, sin embargo, Diagonal Sur Comunicaciones y Credisol pagaron durante meses por habitaciones en el hotel Alto Calafate. Para eso, debieron pasar por Valle Mitre SA-la firma de Báez que gerenció ese hotel-, la hostería Las Dunas y los alquileres de otros inmuebles de la familia Kirchner.
Con tarifas oficiales fijadas en US$ 169,40 por noche y a un tipo de cambio de casi 4 pesos por dólar, Diagonal Sur y Credisol pagaron siempre, aunque sus empleados jamás gozaran de, como los califica el Alto Calafate en su página de Internet, sus “distinguidos servicios”.
La trama y sus protagonistas
El hotel Alto Calafate, eje de un vínculo de negocios que les reportó millones a los Kirchner
Lázaro Báez
Empresario de Santa Cruz
Nueve firmas ligadas a él rubricaron acuerdos reservados con el Alto Calafate, que les reportaron a los Kirchner ingresos millonarios.
Ernesto Clarens
Financista y empresario
Está ligado a Báez a través de la firma Invernes. También está vinculado con Credisol, que ocupaba habitaciones en el hotel de El Calafate.
Clarens, una pieza más del rompecabezas
A los 63 años, el financista Ernesto Clarens puede afirmar que ya vivió varias vidas. Se desarrolló en la City porteña, se fundió, debió marcharse de apuro al Sur, resurgió de sus cenizas y retornó a Buenos Aires, donde ahora lidera un conglomerado de sociedades, empresas y propiedades.
En los papeles, su nombre sólo aparece en unas pocas firmas: Excel Servicios Aéreos, Procredit, Pampa Sports y Patagonia Financial Services. Pero el entramado llega mucho más lejos, de la mano de colaboradores y parientes. En una de esas empresas, incluso, Clarens figuró como empleado en relación de dependencia. Se trata de Invernes, conocida en la Patagonia como “Inversiones Néstor”, aunque el nombre proviene de “Inversiones Ernesto”.
Los libros societarios de Invernes exhiben vínculos profusos con Báez. Entre sus directores aparecen Carlos Calvo López -el hombre que transportó valijas con millones de pesos desde Uruguay, según el testimonio ante la AFIP del propio Báez-, y a Guido Santiago Blondeau, que también figura en Austral Construcciones con Báez. (La Nación/OPI Santa Cruz)
Nota: OPI Santa Cruz, además de las notas que ha venido publicando en relación con Clarens-Credisol-Báez, está trabajando en una investigación sobre actividades de esta financiera y de la casa de cambio Thieles y sus operatorias en la Patagonia con cambio de divisas, negocios financieros y mutuales, la cual será publicada cuando sea completado el apoyo documental que exigimos. Allí se desnudarán verdades históricas del manejo financiero y sus vinculaciones con el poder.
Fuentes ; Seprin, Infobae, Perfil y Opi Santa Cruz
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