Denuncian que el Gobierno manipuló la cifra de casos de síndrome urémico hemolítico
El reporte del Ministerio de Salud muestra un descenso en las ocurrencias de la enfermedad, de las que la Argentina concentra el 51% a nivel mundial. Sin embargo, dos ONG sostienen que no hay «condiciones que permitan explicar» la baja y denuncian que se eliminaron más de 200 casos de los registros
El último informa epidemiológico del Ministerio de Salud señaló que la cantidad de casos desíndrome urémico hemolítico (SUH), un mal trasmitido por alimentos y agua contaminados con la bacteria Escherichia coli, se ha reducido más de 30% entre 2010 y 2013.
La cifra generó indignación entre organizaciones y especialistas dedicados a informar y prevenir acerca de la transmisión de la enfermedad, que afirman que no han existido acciones que hayan posibilitado ese descenso. Asimismo, indican que la cartera sanitaria eliminó 208 casos de SUH registrados hasta noviembre del año pasado en el Instituto Malbrán.
El cuestionado informe sobre síndrome urémico hemolítico apunta que en la Argentina se producenentre 300 y 500 nuevos casos de la enfermedad de forma anual. Afirma además que 2008 fue el año con mayor cantidad de ocurrencias entre 2005 y 2013, con 543 casos, mientras que el año pasado la cifra descendió a 319. En una revisión posterior del reporte, realizada hace dos semanas, el número para 2013 se corrigió a 355, según informó hoy el diario La Nación.
Sin embargo, los 319 casos originalmente reportados son 208 menos que los 527 presentados por una técnica del Instituto Malbrán en noviembre de 2013 durante una jornada organizada por el INTA, el Senasa, el Consejo Profesional de Médicos Veterinarios y la asociación civil Lucha contra el Síndrome Urémico Hemolítico (Lusuh).
En junio pasado, otra técnica del Malbrán sostuvo que fueron 480 los casos registrados durante 2013 en el «I Curso sobre el SUH». Sin embargo, dos meses después, una tercera técnica del mismo establecimiento presentó los 319 casos del informe oficial (previo a su corrección), al tiempo que habló sobre la caída en los casos del síndrome.
El presidente de la Asociación para la Prevención del Síndrome Urémico Hemolítico (Apresuh), Miguel Caracciolo, destacó: «Estamos convencidos de que los 319 casos o el descenso con respecto a los años anteriores que informan para 2013 no es la cifra real ni se condice con la falta de campañas de prevención sostenidas en el país y la promesa de poner en marcha el Programa Nacional de SUH. Si en noviembre había 527 casos, nunca puede darse un número menor para este año». «Esto nos hace acordar mucho al Indec», disparó.
Desde Lusuh opinaron en el mismo sentido. Marcelo Rocha, presidente de la organización, consideró que «ocultar las cifras es querer tapar el sol con las manos», al tiempo que sostuvo: «No vemos las condiciones que permitan explicar o sugerir el descenso de casos. Nunca nadie se ocupó del SUH en estos años, cuando prevenirlo le costaría al país el 10% de lo que le cuesta tratarlo. Y no estamos hablando de medidas de higiene complejas».
Sobre la reducción en las cifras, el viceministro de Salud, Jaime Lazovski, afirmó: «Hace pocas semanas hubo una reunión para revisar los datos, actualizarlos si había errores y completar la información. Esa noticia de que habían disminuido los casos se hizo con datos que no estaban completos. Ahora se corrigió, y para 2013 registramos 355 casos».
Asimismo, les fue explicado a las ONG que los registros oficiales no incorporan a los casos que se atendieron en el sistema de salud privado. En este sentido, Caracciolo disparó: «¿Acaso los otros que se enferman no son tan seres humanos como los que se atienden en hospitales públicos?Se tiende a minimizar y ocultar la enfermedad. Y quien no reconoce que tiene un problema no lo va a solucionar. ¿Qué esperanza tenemos de que el Estado haga algo para reducir la enfermedad?».
Al respecto, Lazovski indicó que si bien el sistema de salud público dispone la notificación obligatoria de los casos de males como el SUH, «no siempre los centros o los médicos la realizan, particularmente los del sector privado».
El Instituto Malbrán recibe información sobre SUH enviada por hospitales centinela de cada provincia. Dos fuentes constataron que las ocurrencias del síndrome en la provincia de Buenos Aires cayeron hasta 2012 y el año pasado aumentaron. Sin embargo, en el informe oficial la tendencia se invierte, con aumentos hasta 2012 y descenso en 2013.
En tanto, en el reporte no aparecen casos de Formosa desde 2010. Apresuh da cuenta de otra realidad: «Nos consta que se ignora la enfermedad. Es una de las provincias que no informaron casos, cuando tiene muchos problemas de agua, cloacas y manejo de los alimentos«, sostuvieron desde la organización.
Desconocimiento sobre el síndrome
La Argentina concentra el 51% de los casos anuales de SUH a nivel mundial. El síndrome es laprincipal causa de insuficiencia renal aguda y la segunda en insuficiencia renal crónica infantil. La atención del mal le cuesta aproximadamente $121.2 millones por año al Estado, de acuerdo con la actualización de cifras de un estudio publicado en 2006 por la doctora María Gracia Caletti del hospital Garrahan.
Lusuh y Apresuh calculan que el total de casos por año rondaría los 2.000, si bien se notificarían alrededor del 50 por ciento. Especialistas además señalan que se ha registrado una mayor virulencia de la enfermedad en los últimos años.
El presidente de Lusuh afirmó que entre el 80% y el 90% de todas las ocurrencias suceden en el hogar, producto de contaminación de carnes, verduras, agua y la falta de lavado de manos. «Son medidas que hay que aplicar en casa y con la comida comprada, y que hay que sostener en el tiempo. Es indispensable crear la figura del consumidor responsable de alimentos», afirmó.
Los especialistas coinciden en que hay un gran desconocimiento de la enfermedad en el país: solo el 40% de los argentinos conoce el SUH. Desde Apresuh y Lusuh apuntan a la falta de campañas de divulgación como causa de la ausencia de información, en especial en colegios. Asimismo, indican que no se implementó del Programa Nacional de SUH.
El viceministro de Salud sostuvo que si bien «no hay campañas públicas masivas» «el trabajo para controlar los alimentos o de bromatología y la capacitación sobre su manejo seguro es permanente». Señaló además que se están llevando a cabo actividades sobre «la preparación segura de los alimentos», al tiempo que destacó que en las «escuelas hay campañas en las que están participando activamente las ONG y los hospitales».
Fuente: InfoBAE.com