Las nuevas trabas a las importaciones impuestas por el gobierno argentino provocaron reacciones en Brasil: el ministro de Industria enfatizó el descontento comercial por las disposiciones que comenzarán a regir desde febrero
Las nuevas trabas a las importaciones impuestas por el gobierno argentino provocaron las primeras reacciones: el ministro de Industria de Brasil, Fernando Pimentel, aseguró que la relación con Argentina «ha sido un problema permanente», dejando en claro el descontento comercial de la administración de Dilma Rousseff sobre las nuevas disposiciones que comenzarán a regir desde febrero.
En declaraciones a la agencia Dow Jones reproducidas en el portal del diario O Estado de San Pablo, el par de Débora Giorgi lanzó: «La Argentina ha sido un problema permanente. Tenemos buenas relaciones políticas, pero económicamente es difícil lidiar con ellos».
Más allá de declaraciones extraoficiales y de empresarios brasileños, hasta el momento no había voz oficial del gobierno de Dilma. El martes, la gerente de la Confederación Nacional de la Industria de Brasil, Soraya Saavedra Rosar, había manifestado la «preocupación» del sector por las trabas a las importaciones impuestas por el gobierno argentino y se quejó por «la falta de previsibilidad» del país.
En sus declaraciones Pimentel admitió que Brasil tiene «un superávit comercial de cerca de u$s6 mil millones con la Argentina» y señaló que no se iniciarán negociaciones hasta que las medidas no entren en vigor.
Hace una semana, se conoció una resolución de la AFIP que implementa a partir del 1º de febrero la Declaración Jurada Anticipada de Importación (DJAI). Se trata de una serie de medidas que otorgarán mayor control sobre las importaciones y se teme que los nuevos requisitos sean utilizados como herramientas para frenar el ingreso de mercadería del exterior.
Al momento de conocerse los dichos del ministro brasileño, el Ministerio de Industria emitió un comunicado donde recuerda que «a partir de una resolución tomada en diciembre pasado, los países socios del Mercosur están habilitados a aplicar individualmente derechos de importación sobre 100 posiciones arancelarias por encima del AEC, hasta el 35% permitido por la OMC», y agrega que Giorgi y Beatriz Paglieri, la secretaria de Comercio Exterior, están trabajando en la elaboración del listado de posiciones arancelarias que presentará la Argentina ante el bloque regional.
«Las 100 posiciones arancelarias que cada país presentará para que modifiquen su AEC serán informadas a la Comisión de Comercio del Mercosur y, de no haber objeciones bien fundadas por parte de los socios, la medida tomará vigencia», advierte.
Más temprano, el gobierno uruguayo se había expedido al respecto señalando que, pese a las trabas, el saldo entre ambos países fue positivo. En este caso habló el canciller Luis Almagro, quien comentó que tras analizar las «trabas comerciales que afectaban nuestras exportaciones y otro tipo de medidas que podían afectar nuestro vínculo comercial con Argentina, hemos visto, al cerrar 2011, que se ha logrado un crecimiento importante del 17% de nuestras exportaciones a la Argentina».
Fuente: Infobae