AMAN (Reuters) – Estados Unidos retiró a su embajador de Siria por razones de seguridad, después de que los contactos del enviado con grupos opositores llevaran a ataques contra su embajada y residencia por parte de seguidores del presidente Bashar al-Assad, dijeron el lunes diplomáticos.
Robert Ford dejó Siria en medio de protestas y una incipiente insurgencia armada que creció a pesar de la condena occidental. En tanto, muchos negocios y oficinas cerraron en el sur de Siria en la huelga más prolongada del levantamiento popular de siete meses.
Su partida refleja un nuevo deterioro de las relaciones entre el Gobierno sirio y Washington, que ha pedido la renuncia de Assad y profundizado las sanciones contra Damasco para incluir a su pequeño pero clave sector petrolero.
«El embajador Robert Ford fue traído de vuelta a Washington a raíz de creíbles amenazas contra su seguridad personal en Siria», dijo el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner.
«En este momento no podemos decir cuándo regresará a Siria. Dependerá de nuestra evaluación sobre la incitación liderada por el régimen sirio y de la situación de la seguridad en el terreno», agregó.
Ford dejó Siria durante el fin de semana, afirmaron diplomáticos occidentales a Reuters, después de una serie de incidentes que llevaron a daños físicos aunque no dejaron víctimas.
«Recientemente han aparecido en la prensa artículos más críticos sobre Ford que lo usual. El se fue el sábado», dijo uno de los diplomáticos, que al igual que otros funcionarios pidió no ser identificado debido a lo delicado del tema.
En la ciudad central de Homs, a 140 kilómetros al norte de Damasco, dos personas murieron cuando tropas y milicias leales dispararon contra distritos de mayoría musulmana suní que han sido bastiones de la protesta y, recientemente, refugio para desertores del Ejército que lideran una resistencia armada allí, dijeron residentes.