Llegaron los informes de ADN del FBI pertenecientes al caso de Nora Dalmasso. Tras el exhorto que el fiscal Javier Di Santo le envió a los Estados Unidos, los papeles arribaron a la Argentina, según comunicó la Embajada de ese país.
Aunque estos resultados juegan un rol fundamental en la investigación del crimen, los informes tardaron tres años en llegar. Todavía no se adelantó ningún resultado del estudio comparativo de ADN que podría determinar de quién es el patrón genético que había en el cuerpo de Dalmasso y en el cinto de la bata con la que fue ahorcada la noche de su muerte.
Con los restos analizados se hizo un paralelismo con las muestras de ADN de los imputados y sospechados: Facundo Macarrón, hijo de la víctima; Gastón Zárate, el pintor; el suegro de Nora y Marcelo Macarrón, el marido.
A su vez, el FBI prometió que evaluará el caso e investigará en busca de conclusiones y el perfil del supuesto asesino. Para eso, el fiscal mandó una copia de la autopsia psicológica de Nora (el estudio sobre su persona y entorno), una sinopsis de la escena del crimen y una descripción de los acontecimientos.
El FBI ya había intervenido en esta causa, pero en aquella oportunidad los resultados de un también análisis genético no convencieron a los investigadores.
Aunque todavía no se sabe qué pasó durante la madrugada del 25 de noviembre de 2006, en la causa están imputados el hijo de la víctima y el pintor. Diego Estévez, el abogado de la familia Dalmasso, siempre sostuvo que a Nora la mató un violador y psicópata que conocía los movimientos de la casa de los Macarrón.
En julio de 2009, se empezó a investigar al viudo, quien habría estado en Uruguay –en un torneo de golf- el día del crimen. Aunque desde el país vecino confirmaron que entre los días 23 y el 26 de noviembre de 2006 se llevó a cabo un campeonato, el departamento de Migraciones en Argentina registró el regreso de Macarrón a la Argentina, pero no su llegada a Uruguay.
Fuente: TN