El fiscal Federico Fiszer solicitó que se tome declaración indagatoria a cinco policías acusados de haber «dejado actuar» al grupo que agredió a ferroviarios tercerizados durante la protesta que terminó con el crimen del militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra.
Fuentes allegadas a la causa indicaron que Fiszer pidió que se indague al comisario inspector Luis Mansilla, titular del Departamento de Control de Líneas; y al comisario Jorge Ferreyra, jefe de la División Roca de Ferrocarriles, entre otros.
La requisitoria también alcanza al principal Gastón Conti, de la Dirección General de Operaciones; al subcomisario de la Seccional 30 –con jurisdicción en la zona donde se produjeron los hechos el 20 de octubre de 2010-, Rolando Garay, y al agente David Villalba.
Según el representante del ministerio público, los policías tenían «los medios para evitar» el ataque de la patota de la Unión Ferroviaria, no obstante lo cual «no ordenaron interrumpir la conducta de los nombrados, abandonando a su suerte a las víctimas y poniendo en peligro la vida y la salud de los mismos».
De acuerdo al dictamen fiscal, los policías «permitieron que los autores huyan y oculten los elementos utilizados para el ataque» y complicaron la investigación pues «no se adoptaron los recaudos para la obtención y preservación de la prueba en el lugar del hecho y no revelaron la totalidad de los elementos que en el lugar se hallaban».
Fuente: TN