Centenares de personas asistían esta mañana al velatorio de sindicalista Roberto Roger Rodríguez, presidente de la obra social y tesorero del Sindicato de Maestranza asesinado en la noche del miércoles de un balazo en la cabeza, tras ser secuestrado por dos hombres armados de un club del barrio porteño de Villa Devoto.
El velatorio del sindicalista se realizaba esta mañana en la casa funeraria de avenida La Plata 924, y Directorio, en el barrio porteño de Caballito.
Los restos del tesorero del sindicato de Maestranza serán inhumados esta tarde a las 16 en el cementerio privado «Parque Colonial», de Ituzaingo.
Rodríguez, de 49 años, fue encontrado en la noche del miércoles pasado, alrededor de las 22.20, gravemente herido, con un disparo detrás de la oreja izquierda, en la calle Salliqueló y Pampa, en la localidad bonaerense de Bella Vista, partido de San Miguel, y murió cuando era trasladado al Hospital Larcade.
Fuentes policiales informaron que esta mañana se realizaban numerosas diligencias -ordenados por el fiscal Raúl Cavallini- en Capital Federal y el Conurbano Bonaerense en busca de los responsables del secuestro y posterior asesinato del sindicalista Rodríguez, sin éxito en un primer momento.
Las instrucciones de caso son llevadas adelante por la comisaría 45, que focaliza en tres hipótesis más fuertes, que tienen que ver con una deuda, una extorsión familiar o la vinculación con la “mafia de los medicamentos”, cuyo sindicato estaba siendo investigado.
La investigadores del crimen calificaron el caso como mafioso y por la características del hecho, suponen que fueron contratados sicarios para matarlo.
A estas conclusiones llegaron luego de analizar las formas en que se cometió el asesinato, la manera en la que fueron a buscarlo, llamándolo por su nombre y preguntando previamente si la camioneta que estaba estacionada fuera del club era de el.
La hipótesis más fuerte tiene que ver con una deuda, es por eso que ayer se investigaban las cuentas bancarias y tarjetas de créditos de la víctima, para buscar alguna pista para empezar a develar el hecho.
Otra de las hipótesis se enmarca en alguna extorsión familiar o alguna venganza por cuestiones sentimentales.
La posibilidad de que un móvil político haya sido el detonate del crimen tampoco era desestimada entre los investigadores porque recordaban que la obra social del Sindicato de Obreros de Maestranza está entre el medio centenar de entidades que están siendo investigadas por el juez Oyarbide en la causa por la mafia de los medicamentos.
Fuente: Diario Hoy