El asesino de Berardi habría tomado como rehén a una pareja en Cañuelas

Fugado del penal de Marcos Paz, Gabriel Figueroa y un cómplice irrumpieron en la casa con un arma blanca, los asaltaron y los tuvieron cautivos durante cinco horas.

 

«Somos los que nos escapamos de la cárcel de Marcos Paz. Así que no se muevan.» De esta forma, se identificaron los dos sospechosos que, el domingo a la madrugada, irrumpieron en una casa del barrio cerrado Las Cañuelas, situado en el kilómetro 56,300 de la ruta 3. Según fuentes de la policía bonaerense, el objetivo que perseguían los asaltantes para identificarse de esa forma era atemorizar a los propietarios de la vivienda y evitar que opusieran resistencia.

Luego de amenazar con un arma blanca al dueño de casa, que habría sido identificado por fuentes policiales como Juan Eduardo Goya, los sospechosos Gabriel «Larry» Figueroa, condenado por el secuestro y asesinato del estudiante Matías Berardi, y Luciano Campos. Durante cinco horas los prófugos se dedicaron a cambiarse de ropa, comer, robarles dinero y luego lo tomaron cautivo junto a su novia, los obligaron a subir a bordo de su camioneta Ford Ranger y los llevaron hasta González Catán. Al llegar a esa localidad del partido de La Matanza, los asaltantes abandonaron sanos y salvos a los integrantes de la pareja y se llevaron la camioneta.

Fuentes policiales indicaron que, para salir del barrio cerrado sin despertar sospechas, los malvivientes se escondieron en la parte trasera del vehículo, sin dejar de apuntar a la pareja.

Cuando pudieron regresar a Cañuelas, Goya y su novia hicieron la denuncia en la comisaría local. Desde la dependencia le dieron intervención a la Unidad Funcional de Investigaciones, a cargo de la fiscal Norma Pippo, quien ordenó una serie de medidas para tratar de localizar a los delincuentes y recuperar el vehículo robado.

En su denuncia, las víctimas del asalto indicaron que ambos sospechosos buscaban ropa para cambiarse y un vehículo para poder abandonar la zona en la que se había montado un operativo para recapturarlos. Figueroa y Campos huyeron el sábado pasado del penal de máxima seguridad de Marcos Paz, cerca de Cañuelas. Según fuentes judiciales, aprovecharon la falta de controles del personal penitenciario para romper una ventana del salón de usos múltiples al que habían accedido para ver el partido entre Boca y River, que se disputó en Mar del Plata.

Luego de forzar la ventana saltaron tres alambrados perimetrales y lograron escapar de la cárcel. Los investigadores indicaron que fallaron los sensores de movimiento de los tres cercos, debido a que una sobrecarga de tensión los sacó de funcionamiento durante al menos diez minutos.

Hasta anoche los responsables del sumario judicial que se inició para tratar de establecer si hubo complicidad de algún guardiacárcel no habían determinado si la suba de tensión fue accidental o se trató de un sabotaje pergeñado para concretar la evasión.

Campos y Figueroa estaban alojados en el pabellón II del módulo II. Sólo los internos de dicho pabellón estaban autorizados para concurrir al salón de usos múltiples a ver el partido. Lo curioso del caso fue que las autoridades del penal permitieran que un preso como Campos accediera a un lugar con poca seguridad. Hace un año y medio, con otros 12 presos, se escapó de la cárcel de máxima seguridad de Ezeiza. Fue recapturado en octubre de 2013.

En tanto, hoy, a las 19, los familiares y amigos de Matías Berardi convocan a reunirse en el Obelisco para reclamar que sea recapturado Figueroa, uno de los responsables del asesinato del joven. «La idea es difundir la imagen del prófugo para que la gente esté alerta. No sólo para reubicarlo, sino para que las personas estén prevenidas ya que se trata de un hombre muy peligroso», explicó la mamá de Berardi, María Inés Daveiro. La mujer reclamó, además, que la foto de Figueroa sea llevada en móviles policiales..

 

Fuente: La Nacion