El odontólogo Ricardo Barrera de 75 años, hasta ayer en prisión domiciliaria por matar a toda su familia en 1992, fue beneficiado con la libertad condicional por un fallo de la Cámara de Apelaciones y Garantías de La Plata. “Está muy agradecido porque esta fue una batalla judicial de 12 años”, dijo su abogado Eduardo Gutiérrez. Barreda, que ahora podrá salir a la calle, fue condenado a reclusión perpetua en 1995 por el crimen de su esposa Gladys Mac Donald; su suegra, Elena Arrache, y sus dos hijas, Adriana y Cecilia.
La libertad condicional lo obligará a Barreda a cumplir ciertas pautas como fijar domicilio, comunicar cualquier cambio del mismo y presentarse una vez por mes ante el Tribunal.
En 2008 le concedieron el arresto domiciliario, y se fue a vivir al departamento de Belgrano de su novia Berta André, una maestra jubilada de 65 años.
¿Por qué le dieron la libertad? Una nueva resolución le computó 30 años de presión cumplidos. El cálculo surge a partir del 1994 hasta mayo del 2007, cuando quedó firme la sentencia. Hasta allí, por aplicación de la ley del “dos por uno”, Barreda habría acumulado 28 años de cárcel, a los que se suman los años de arresto domiciliario.
Fuente: La Razón