En Misiones, cayó 3-1 ante Crucero del Norte y puso en peligro la chance de volver a Primera. Ahora está a dos puntos de Instituto y del propio conjunto misionero, que ocupan el último puesto de ascenso.
Independiente transita un espiral sin fin. Lo peor, parece, siempre está por venir. Tanto dentro como fuera de la cancha le cuesta una enormidad encontrar una salida. Porque la debacle institucional se está llevando todo puesto, como si no hubiese alcanzado el cachetazo que significó el descenso a la B Nacional para barajar y dar de nuevo. Ese en laberinto tortuoso, mientras las miserias dirigenciales afloran, mientras la barra brava organiza puestas de escena de terror, las respuestas futbolísticas no aparecen. La racionalidad indica que se trata de un proceso lógico. Sin embargo, el fútbol no entiende de razones. Y los hinchas no paran de recibir un cachetazo tras otro. Anoche, sobre la grama bahiana del estadio Comandante Andrés Guacurarí de Garupá, Crucero del Norte le dio a Independiente una lección práctica de fútbol. Fue 3-1 para el Colectivero, que ahora comparte el tercer escalón de la tabla con Instituto relegando al equipo de Omar De Felippe al quinto puesto. Sí, lleva tres sin ganar y cada vez aparecen más obstáculos en la carrera por volver a la A…
Crucero tardó apenas dos minutos en ponerse en ventaja. Diego Calgaro, con un frentazo a la salida de un córner, dejó sin chances al bueno de Diego Rodríguez. Sin embargo, cuando nadie lo esperaba, el Rojo reaccionó gracias a un colosal tiro libre de Rolfi Montenegro, cuando corrían 23 minutos. Con el 1-1, los de Avellaneda recuperaron el alma y la motivación para llevar peligro al arco defendido por Germán Caffa. Tenía juego, llegaba al área, pero le faltaba la puntada final. Y lo pagó caro. Porque a los 35’ apareció Ernesto Alvarez para vencer a Rodríguez con otro cabezazo tras una buena jugada colectiva tejida por Ariel Cólzera y Juan Olivares, que se inició por una pelota increíblemente perdida por Lucas Villalba.
Fue un golpe letal para el Rojo, al que no le alcanzó el descanso para recargar las pilas. Tanto es así que en la segunda parte fue una sombra. En realidad, fue más de lo mismo que viene siendo en este semestre. Entraron Pisano, Menéndez e Insúa y todo siguió igual. De hecho, todo empeoró porque Crucero lo desbordaba por todos lados y tuvo su premio cuando Enzo Bruno se escapó por la izquierda y habilitó a Alvarez para el 3-1 final.
Alerta Rojo.
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