La operación «no tuvo complicaciones» y Cristina «evoluciona satisfactoriamente».
La presidente Cristina de Kirchner «evoluciona satisfactoriamente» luego de ser sometida a una neurocirugía en la Fundación Favaloro, que transcurrió «sin complicaciones», según cita el parte médico que difundió el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, quien aseguró que «está bien y de buen ánimo».
Según pudo saber ámbito.com, la mandataria ingresó al quirófano del tercer piso del centro de salud a las 7:40, donde permaneció por aproximadamente dos horas. En primer término se le aplicaron sedantes y otras medicinas y después se «evacuó» un cúmulo de sangre alojado en el lado derecho de la cabeza, provocado por un golpe ocurrido el mes pasado.
El equipo quirúrgico estuvo encabezado por el doctor Cristian Fuster, e incluyó a los doctores Jorge Mandolesi, Pablo Rubino y Javier Salazar. La anestesia estuvo a cargo de Luis Valdivieso.
Extraoficialmente el primero en revelar el fin de la intervención fue Jorge «Locomotora» Castro, que por un día se convirtió en el interlocutor de Cristina (ver nota aparte). «Terminó, pero no sé cómo salió», dijo antes de las 11 a este cronista luego de visitar la clínica. Minutos después, fuentes del equipo médico que la atendió confiaron en exclusiva a este medio que la operación había sido «un éxito».
Pasadas las 13, el vocero presidencial Scoccimarro fue el encargado de hablar con los medios y se divulgó el parte sobre el estado de salud. Desde una tarima y con dos micrófonos en mano, el funcionario reveló que la mandataria «está bien, de buen ánimo y acompañada por su familia», al tiempo que «agradeció a los médicos y a quienes rezan por ella».
Cristina fue trasladada en un principio a la Unidad de Cuidados Intensivos del instituto y luego al noveno piso, donde se acondicionó una suerte de «suite presidencial» para que se recupere junto a su círculo más íntimo.
• Sin complicaciones
El comunicado repartido a los periodistas lleva la firma del jefe del Instituto de Neurociencia de Favaloro, Facundo Manes, y del director médico del centro, Gerardo Bozovich. «En el día de la fecha se le realizó la evacuación de un hematoma subdural derecho a la Presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner, en una cirugía sin complicaciones efectuada en el Hospital Universitario de la Fundación Favaloro», comienza el texto.
«Previo a la operación -continúa-, fueron descartados los riesgos cardiovasculares a través de distintos exámenes complementarios que incluyeron la participación de su cardiólogo, el Dr. Ramiro Sánchez y el jefe de Cardiología Invervencionista de la Institución, el Dr. Oscar Mendiz. La paciente evoluciona favorablemente permaneciendo internada en la Unidad de Cuidados Intensivos dirigida por el Dr. Francisco Klein quien es Director del centro de accidentes cerebrovaculares del Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro».
En el parte se indicó asimismo que «todo el proceso de diagnóstico y tratamiento estuvo supervisado y acompañado por los profesionales de la unidad médica presidencial, Luis Buonomo y Marcelo Ballesteros».
• Apoyos
En los alrededores del hospital universitario, un centenar de militantes y decenas de medios de todas partes del mundo siguieron la operación minuto a minuto. Por seguridad, se desplegó un fuerte operativo en los dos accesos a la clínica, donde agrupaciones oficialistas concretaron una vigilia a la espera de la intervención.
El frente del hospital amaneció tapado por carteles, banderas, fotos y mensajes de aliento. Sobre la avenida Entre Ríos -cerrada al tránsito-, la ansiedad se calmó con cánticos y algunos rezos. Excombatientes de Malvinas fueron aplaudidos al colgar una bandera argentina con el dibujo de las Islas. Llegaron hasta allí vendedores ambulantes con el merchandising kirchnerista: ofrecían pins, afiches, banderas y pañuelos.
Hasta se montó un improvisado puesto de hamburguesas a la chapa en el medio de la arteria porteña. Entre las agrupaciones presentes se destacaron Unidos y Organizados, Tupac Amaru, MUP, JP Evita, Nuevo Encuentro, Oktubres y sindicalistas de la Uocra, Suterh y la UOM Capital, entre otras.
En el noveno piso la acompañaron la madre, Ofelia Wilhelm, sus dos hijos, Máximo y Florencia, su hermana Giselle Fernández y su nuera Rocío García. También estuvieron sus colaboradores cercanos y un grupo reducido de funcionarios. Todos ingresaron en autos polarizados por el estacionamiento de la calle Venezuela para evitar a la prensa.
• Internada
La jefa de Estado fue internada sorpresivamente el lunes para realizarle estudios pre-quirúrgicos. El domingo Cristina alertó por una sensación de ‘hormigueo’ en su brazo izquierdo y eso motivó la evacuación del hematoma. A priori, el sábado se le había indicado reposo por 30 días, pero los nuevos síntomas cambiaron el panorama.
«Ante tal sintomatología nuestro equipo se constituyó en la residencia de Olivos a los efectos de proceder al examen físico-neurológico constatando una transitoria y leve pérdida de la fuerza muscular del mismo miembro superior», indicó el primer comunicado difundido, también firmado por Bozovich y Manes.
La mandataria fue diagnosticada con un cuadro de «colección subdural crónica», un coágulo en la cabeza producto de un traumatismo que sufrió el pasado 12 de agosto.
Uno de los interrogantes es el tiempo que le demandará a la Presidente retomar sus actividades, por lo que antes de la cirugía el vicepresidente Amado Boudou firmó ante el escribano General de la Nación el traspaso del Ejecutivo, algo que en principio no estaba previsto ya que la intención del Gobierno era que sea la propia Cristina la que siga tomando las decisiones de gestión mientras mantenía el reposo. La delegación de las facultades fue un anticipo de la decisión que tomaron los médicos de operarla y así erradicar todo tipo de complicación futura.
El próximo parte médico se difundirá este miércoles al mediodía.
Ambito.com