Los pesquisas esperan los datos del cotejo de las muestras genéticas de la adolescente con otras tomadas en el Renault Megane del portero. Además, resta conocer las pruebas recolectadas en el sótano y en un contenedor
En el marco de la causa en la que se investiga el crimen de Ángeles Rawson, el lunes se conoció el resultado del cotejo de ADN realizado entre las muestras extraídas de las uñas de la joven con el patrón genético de Jorge Mangeri, el único imputado y detenido, cuyos resultados aportaron una prueba para incriminarlo.
Ayer, además, se informó que en otras dos uñas de la adolescente, de 16 años, siempre de la mano derecha, también se encontró ADN del encargado.
Su abogado, Miguel Ángel Pierri, remarcó que también se halló material genético de un tercero, por lo que puso en duda la autoría del crimen por parte de su defendido y planteó que en la escena “hubo al menos dos personas”, de las cuales Mangeri se manifiesta “inocente respecto del homicidio”.
En este marco, hoy podría ser otro día clave, de conocerse los resultados del cotejo de las muestras genéticas de Ángeles con otras tomadas en el automóvil Renault Megane, de Mangeri.
Los pesquisas procuran determinar si en esas muestras está el ADN de Ángeles, ya que una de las sospechas es que el auto pudo haber sido el vehículo para trasladar el cadáver de la adolescente. También se esperan los resultados de pruebas recolectadas en el sótano del edificio Ravignani 2360, donde vive la familia de la adolescente, así como de un contenedor, ubicado cerca de esa zona de Palermo.
La fiscal del caso, María Paula Asaro, considera que Ángeles regresó de su clase de gimnasia alrededor de las 10 de la mañana aquel 10 de junio, pero no llegó a entrar a su departamento porque habría sido interceptada por el portero.
Mientras tanto, Mangeri permanece en la cárcel de Ezeiza. Lo detuvieron el sábado 15 de junio, cuando en medio de la testimonial le habría dicho a la fiscal María Paula Asaro: «Fui yo».
Fuente: Infobae