Hubo destrozos e intimidaciones a comercios.
Cinco colectivos de la línea 126 fueron atacados por la mañana.
En lo que es un clásico de los gremios vernáculos, lo que no consiguen por adhesión voluntaria intentan hacerlo por la fuerza. Desde siempre para que un paro nacional tenga el efecto perseguido por los sindicalistas es clave que el transporte público no funcione.
En un escenario, en donde Hugo Moyano decidió romper filas con el oficialismo para abrigar el sueño presidencialista, son varios los gremios que no están con la CGT Azopardo, y que no están de acuerdo con la necesidad de realizar un paro nacional.
Es por eso que los gremios convocantes, CGT y CTA disidentes, decidieron movilizar tropa propia y ajena para lograr sitiar a la Ciudad y desalentara quienes quieren cumplir con sus tareas diarias. En distintos puntos de la Ciudad y del país se han registrado algunas agresiones a medios de transporte.
En tal sentido, a partir de la decisión de la UTA de no adherir al paro nacional, son varias las líneas de colectivos que vienen sufriendo ataques a las unidades para que no brinden el servicio. El delegado de la línea 126 Daniel Osso denunció que cinco unidades fueron apedreadas por desconocidos. En uno de los episodios resultó herida una persona. Por el momento la empresa decidió suspender el servicio que recorre La Tablada-Retiro.
«Nosotros no nos adherimos y estas acciones son para amedrentar», denunció el delegado gremial de la línea, Daniel Osso. «Hasta las seis de la mañana funcionaba el servicio con normalidad pero después de los incidentes decidimos interrumpirlo», agregó.
Por otra parte, en Mendoza al menos 11 colectivos fueron apedreados en Guaymallén, Luján y Maipú por prestar servicio. Según consigna el diario UNO personas que no fueron identificadas apedrearon y rompieron parabrisas y ventanillas de colectivos del Grupo 1, Grupo 5 y Grupo 10 por salir de sus respectivos controles.
Otro incidente se registró en Avellaneda, cuando militantes identificados con pecheras de la Corriente Clasista y Combativa amenazaron con palos al conductor de un micro escolar que se desplazaba por la avenida Pavón, a la altura de la Estación de Avellaneda.
El grupo de personas, que portaban palos y estaban identificadas con pecheras de la CCC, amenazó al chofer de un micro que transportaba alumnos de una escuela primaria de la zona, y que al querer avanzar por la avenida Pavon se vio obligado a desviar su recorrido para no sufrir roturas en su carrocería.
Bares, restaurantes y bancos
Un grupo de manifestantes que se desplazaba por la céntrica Avenida de Mayo irrumpió pasadas las 9.30 en las instalaciones del histórico Café Tortoni, provocando diversos destrozos y atacando al personal del lugar. Un grupo de personas -en apariencia afiliados al gremio de Gastronómicos que conduce Luis Barrionuevo- se movilizaban por la avenida porteña exigiendo a los restaurantes y cafés de la zona que cierren y se adhieran al paro.
Tanto el Tortoni como otros restaurantes y bares de la zona sufrieron daños y roturas producto del accionar de los activistas. Lo mismo ocurrió en establecimientos de la zona de Pilar, de microcentro (como el emblemático La unión), de zona oeste y en un local de Starbucks.
Asimismo, representantes del gremio de Bancarios también protagonizaron desmanes al provocar desmanes en distintas sucursales bancarias de instituciones privadas, si bien trabajan a puertas cerradas atendiendo sólo demandas puntuales. Un ejemplo de ello es la sucursal Rosario del HSBC, que ha recibido el ataque de los manifestantes.
ambito.com