La extradición del señalado narcoempresario venezolano Walid Makled se está atravesando en las recién normalizadas relaciones con Caracas -iniciada por el gobierno Santos- y con Washington, principal aliado de Colombia en el exterior.
Tanto Venezuela como Estados Unidos quieren a Makled -preso hace tres meses en la cárcel colombiana de Cómbita- para que responda por narcotráfico y otros delitos.
Ayer, el presidente Juan Manuel Santos anunció que el señalado narco será enviado a Venezuela porque ese país fue el primero en radicar la solicitud de extradición.
«Le di mi palabra al presidente (Hugo) Chávez de que, una vez se surtan los trámites jurídicos, entregaríamos este individuo a las autoridades venezolanas. Siempre he creído que la palabra hay que cumplirla y la voy a cumplir», dijo Santos. Y agregó que el expediente venezolano incluye delitos más graves que el de Estados Unidos: lo piden por narco y por tres asesinatos.
Reacción en la Casa Blanca
La noticia no cayó bien en Estados Unidos, que de inmediato envió un mensaje a Bogotá para reiterar la necesidad de que Makled comparezca a la Corte de Nueva York.
Según fuentes de la Casa Blanca, ya han comenzado a presionar desde diferentes frentes para que Colombia entregue a Makled, como estaba planeado inicialmente.
«Hemos dejado en claro el interés de enjuiciar a Makled. Respetamos el proceso de extradición de Colombia y seguiremos trabajando de cerca con el Gobierno en este y otros casos», dijo Charles Luoma-Overstreet, portavoz del Departamento de Estado.
Funcionarios de la administración Obama, así como congresistas y analistas, han reiterado que Colombia «no debe ceder» ante las «presiones» de Chávez. Además, Makled es considerado ficha clave del ‘cartel de los soles’, que estaría integrado por altos funcionarios del gobierno Chávez.
De hecho, desde la cárcel ha sugerido que, si lo juzgan por narcotráfico, también deberían caer cuatro pesos pesados venezolanos.
Para Estados Unidos, tampoco sería comprensible que su aliado de años y a quien ha dado más de 7.000 millones de dólares en la lucha contra el narcotráfico se inclinara por Caracas. Sobre todo porque fue una corte norteamericana la que pidió la captura.
Por ahora, el balón está en la Corte Suprema colombiana, que se enfrenta a una situación inusual: definir qué concepto emite cuando dos países piden a un narco. En todo caso, si la Corte inclina la balanza a favor de alguno de los dos gobiernos, será finalmente el presidente Santos quien apruebe el envío.
¿Qué dice saber Makled?
Asegura tener evidencia de corrupción en Venezuela
«Con todo lo que tengo en mis manos, se lo muestro a EE. UU. y ellos pueden intervenir Venezue- la porque hay demasiada corrupción y narcotráfico. (…) Me acusan de que cargué (de coca) un DC-9 en el aeropuerto Simón Bolívar. Si tengo que ir preso por eso, también los responsables de la seguridad de esa terminal.»
Fuente: eltiempo