Santiago de Chile, 17 nov (PL) Las 33 mujeres que se encerraron en una mina de carbón en el sur de Chile para exigir garantía de empleo radicalizaron hoy la medida de fuerza con el inicio de una huelga de hambre.
El grupo se internó la víspera en un yacimiento inactivo de la ciudad de Lota, región del Bío Bío, a unos 500 kilómetros de esta capital, en protesta por el fin de un programa emergente que daba trabajo a unas nueve mil personas en zonas afectadas por un terremoto en febrero de este año.
Las mujeres permanecen a 900 metros de profundidad en la denominada mina El Chiflón del Diablo y anunciaron este miércoles a través de un portavoz que dejarán de ingerir alimentos sólidos hasta tanto se restituya el programa fiscal de empleos.
Edelmira Zaldívar, una de «las 33», replicó a autoridades que criticaron la protesta y subrayó que los pobladores del Bío Bío se sienten abandonados luego de los daños causados por el sismo.
Sobre el hecho, la diputada del Partido Socialista Clemira Pacheco llamó hoy a evitar se produzca un desalojo por la fuerza de las manifestantes, quienes se inspiraron en los mineros que sobrevivieron 70 días en un socavón del desierto de Atacama.
Destacó Pacheco que sólo la desesperación, al quedar sin sustento para sus familias, las puede haber movido a tomar esa medida.
La parlamentaria lamentó que no prosperara y fuera desestimada en el Congreso una indicación orientada a la prolongación del referido programa de emergencia.