El gobernador de las Malvinas reclamó que se reconozca la existencia del gobierno de los isleños. Y dijo que los habitantes del archipiélago «sienten que Argentina es un país hostil». Además destacó la buena tarea de acercamiento que en los 90 hizo Guido Di Tella.
A tres días del 30º aniversario de la guerra por Malvinas, Nigel Haywood se refirió a la tensión existente (y reavivada) entre la Argentina, Inglaterra y los kelpers, por la soberanía de las Islas.
El líder de los isleños consideró que el gobierno nacional «viene haciendo muchas cosas que afectan a la vida de la gente, que los perjudica».
Por esta razón, Haywood dice que es difíicil trabajar sobre cuestiones en común, como la pesca, y la posible explotación petrolera. «Tiene que haber alguna medida concreta que demuestre buena voluntad. No tenemos ninguna evidencia de algo así por el momento, lamentablemente», señaló.
Para el gobernador, lo que se vive no hace más que provocar un efecto negativo en los kelpers, porque ahora «ellos sienten que Argentina es un país hostil».
En declaraciones al diario La Voz, el gobernador de las Islas Malvinas sugirió que «el día que su gobierno haga un intento serio de bajar la tensión, como se hizo durante los 90 (durante la gestión de Guido Di Tella como canciller), entonces quizá se puedan establecer relaciones más fructíferas con las islas en cuestiones de mutuo interés».
Fuente: InfoBAE.com