El gobierno de Barack Obama decidió trabajar en la venta a Israel de aviones de repostaje avanzado y bombas anti bunker, cambiando así la política diseñada por su antecesor, George W. Bush, quien se negaba para evitar que Tel Aviv las utilice en ataques a Irán.
De acuerdo a lo informado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió al secretario de Defensa de Estados Unidos, Leon Panetta, que aprobara la venta de aviones de repostaje avanzado y bombas anti búnker GBU-28 durante el encuentro que mantuvieron la semana pasada.
Tras el pedido, Obama instruyó a Panetta para que trabaje directamente con su homólogo israelí, Ehud Barak, sobre este asunto, una señal de que Washington vería con buenos ojos esta entrega, informó la agencia de noticias Europa Press.
Durante el Gobierno de Bush, Estados Unidos se negó a vender bombas anti búnker y aviones de repostaje avanzado a Israel al considerar que Tel Aviv utilizaría estas armas para atacar las instalaciones nucleares de Irán.
Tras la entrada de Obama en la Casa Blanca, Washington aprobó una serie de peticiones armamentísticas por parte de Tel Aviv, según recordó el diario israelí Haaretz, pero nunca del tipo solicitado ahora por Netanyahu.
Varios cables diplomáticos revelados por Wikileaks mostraron los debates existentes sobre la entrega de armamento avanzado a Israel.
Uno de ellos, que versaba sobre las discusiones en materia de defensa entre ambos países y que está datado en noviembre de 2009, recoge que «ambas partes debatieron la entrega de bombas anti búnker GBU-28 a Israel y que la transferencia debería realizarse en forma silenciosa para evitar que se acuse a Washington de ayudar a Tel Aviv para a atacar Irán».
La información se conoce en un momento delicado de la relación de Tel Aviv con Teherán, ya que el propio Netanyahu reclamó apoyo para atacar las instalaciones nucleares iraníes, movida que no encontró, por el momento, apoyo público de Obama.
Fuente: Télam