Sufrió más de cien robos, se tiroteó dos veces con los delincuentes y lo volvieron a asaltar

Ocurrió en el barrio platense Altos de San Lorenzo. Jorge Campos, dueño de dos locales sufrió más de 100 robos, se tiroteó 2 veces en 3 días con delincuentes, pasó semanas custodiando -con un arma en la cintura- el frente de sus comercios y sobrellevó la renuncia de empleados, que dejaron su trabajo hartos de los asaltos.

Desde hace años, convivir con la inseguridad se ha convertido para el comerciante Jorge Campos en una situación cotidiana. Pero no por ello más tolerable. En el camino sufrió más de 100 robos, se tiroteó 2 veces en 3 días con delincuentes, pasó semanas custodiando -con un arma en la cintura- el frente de sus comercios y sobrellevó la renuncia de empleados, que dejaron su trabajo hartos de los asaltos.

Sin embargo, a pesar de que la Policía había dispuesto un patrullaje constante por inmediaciones de sus negocios -un almacén y una juguetería-, ubicados en la calle 131 entre 83 y 84, el panorama se sigue presentando desolador: en los últimos 15 días, en sus comercios robaron dos veces a mano armada los mismos asaltantes.

En uno de esos ataques, los delincuentes le sustrajeron hasta un revólver 38 largo, que estaba reglamentariamente registrado a nombre de Campos y que el comerciante usaba para defenderse.

«Lo que pasó es que el negocio estaba cerrado y cuando entraron (al arma) la tenía guardada en una cajón», sostuvo Campos, en diálogo con este medio.

Ese hecho ocurrió hace 15 días, cuando estaban cerrando la librería, cerca de las 22.00. «Había una tormenta muy fuerte y se metieron cuando salía una de las empleadas. Robaron celulares, relojes, toda la plata y el arma», dijo.

OTRA VEZ

Ayer, hacia las 11.30, los mismos individuos dieron otro golpe en un negocio de Campos, aunque esta vez la principal víctima fue un repartidor de garrafas. El hombre estaba en la puerta del almacén, cuando los ladrones llegaron en una moto.

Sin darle tiempo, le apuntaron con un arma de fuego y le quitaron el dinero de la recaudación. Fue todo muy rápido. Una vez que le sustrajeron el botín, los ladrones se metieron en el almacén y también trataron de robar allí.

No obstante, fueron las empleadas quienes, atemorizadas, empezaron a gritar y lograron hacer que los sospechosos se fueran sin robar nada del negocio.

INDIGNACION Y RECLAMO

El comerciante aclaró que, si bien en ambos casos actuaron los mismos ladrones, no se trata de las personas con las que se tiroteó tras los dos asaltos que sufrió en agosto del año pasado. «Esos están todos presos», dijo.

Por otra parte, Campos contó a EL DIA que «el rondín policial está, pero hay momentos u horarios que no pueden cubrir y ahí aprovechan para robar».

«El tema es buscar otra solución. Que pongan gente a trabajar en las calles. Que la Policía salga a la periferia, que no se queden siempre en el centro, sino que estén en los barrios, que somos los lugares más castigados. Yo en los últimos 6 meses tuve 8 robos», resaltó.

Fuente: El Día