Parece que las noticias del aumento del 100% en las tarifas del
subterráneo han acaparado todo el espacio de la publicidad oficialista
y desde Página 12, Carta Abierta, 6,7,8, y demàs alcahuetes
mercenarios, se han confabulado para hacernos ver este aumento como
«una nueva canallada de Macri…»
Es por ello que se apuraron a tirarle a la Ciudad el subte y
deshacerse de ese pesado paquete. El gobierno nacional lo tenía a 1,10
fijo desde hace casi una década, con apenas unos centavos de aumento.
Es decir que aunque se hubiera aplicado el «Índice Moreno» de
inflación (A un 10% anual) ya estaríamos más o menos en el precio de
dos mangos y monedas. Y si la Nación cumpliera con la Constitución y
coparticipase como corresponde, ni la Ciudad ni las provincias
tachadas por el dedo de Kristina tendrían mayores problemas
financieros.
Pero toda esta hipócrita perorata no sólo sirve para estigmatizar a
Mauricio (Todavía tienen la sangre en el ojo por no haber podido
llevar a Ameal y su hijo conspicuo de la Cámpora a la Presidencia de
Boca) sino que, sumado a la campaña de «canonización virtual» de la
reina de los avatares y su carcinoma encapsulado, todo este combo
sirve para tapar la novedad de que el gobierno aumentó hasta un 400%
el servicio de gas en zonas residenciales de Capital Federal (Luego le
tocará el turno a las restantes) y esto todavía no tiene relación con
la quita de subsidios que está al caer y cuyo efecto se verá en un par
de meses.
Me siento muy pelotudo cuando me vienen a la mente los tiempos en que
tenìamos autoabastecimiento de gas, energía eléctrica, petróleo, con
pueblos del interior vivos y conectados con el resto del país… Gas
del Estado, Ferrocarriles del Estado, Agua y Energía, YPF… ¿Dónde
habrán ido a parar? Pensar que con su privatización (o sea su
desguace) se hicieron multimillonarios un par de docenas de hijos de
puta y nosotros seguimos oliendo el cloroformo…. dormidos pero no
del todo, es decir en una somnoliencia que, sin oponer resistencia
alguna, nos permite ver como nos engrupen, nos esquilman, nos meten el
dedo ya saben donde y nosotros ahí… y mientras tanto esos mismos
corruptos siguen robando con negocios sucios a costa de las arcas de
la Nación, claro que ahora apenas con un escritorio desde el cual
importan de remotos puntos del planeta la energía que hemos dejado de
producir, la que nos es traída en buques y transformada en nuestras
costas para ser distribuida… si hasta Bolivia nos tiene de rehenes.
Y bueno, es el «modelo», es la «inserción», es la corrupción
generalizada, es la Argentina.
Qué pena!!!
Fuente: Juan Manuel Otero.