El juez les rechazó la excarcelación. Están acusados de encubrimiento agravado y falsedad ideológica por asesinato del hombre al que intentaron cremar con un certificado de defunción falso. Hoy amplia su indagatoria la ex mujer de la víctima y principal imputada.
Los dos médicos que están presos acusados del encubrimiento del crimen de Julio César Caprarulo, el hombre que fue asesinado e intentaron cremarlo con un certificado de defunción falso, seguirán detenidos luego de que el juez de la causa rechazara sus excarcelaciones.
Así lo informaron hoy los abogados Pablo De Fazio y Horacio Marcovich, defensores de los dos profesionales imputados, José Pinto García (53) y Omar Pedro Rossi (60), respectivamente, en las fiscalías de Berazategui donde además ampliaba su indagatoria la principal imputada del homicidio, Anagiota «Mariana» Alexopoulos (57).
Los pedidos de excarcelación de los médicos fueron rechazados por el juez de Garantías 4 de Quilmes, Damián Vendola. El magistrado «lo que no hizo fue fundamentar de qué manera nuestros defendidos podrían llegar a profugarse o a entorpecer la investigación judicial», dijo De Fazio, quien calificó la decisión del magistrado como «arbitraria y aberrante».
El defensor de Pinto García dijo que su cliente «demostró tener domicilio fijo, familia constituida y a su vez no tiene antecedentes penales, entonces las condiciones están dadas para que la excarcelación proceda efectivamente».
Por su parte, Marcovich señaló: «Vamos a proceder en forma inmediata a la apelación de dicha resolución y no tenemos la menor duda de que la Cámara va a hacer lugar a las excarcelaciones solicitadas por nosotros».
Marcovich explicó que su cliente, Rossi, «no conoce a la persona imputada del homicidio ni a la persona fallecida ni la casa» y dijo que cree que quedó involucrado por «un acto de negligencia», ya que reconoció su firma y su sello en el certificado de defunción, pero no «el cuerpo de escritura» del documento.
Según el abogado, Rossi reconoció en su indagatoria que «normalmente deja 12 o 13 certificados» en blanco y firmados «por si se necesitan».
Por ello, Marcovich comentó que «se ha hecho un cuerpo de escritura y un cuerpo de su firma para determinar en forma fehaciente con las pericias si es o no de él» el certificado apócrifo.
En tanto, Alexopoulos, la mujer griega detenida como presunta autora del crimen de su pareja Caprarulo, fue trasladada hoy a la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 descentralizada de Berazategui para ampliar su declaración indagatoria ante la fiscal de la causa, María de los Angeles Attarián Mena.
Además de esta mujer y los dos médicos, en la causa también fue detenida el sábado pasado una amiga de la principal imputada, acusada de haber colaborado con ella para preparar el cadáver para ocultar las heridas que preventiva.
El hecho ocurrió el 26 de noviembre último con la muerte de Caprarulo (58), quien vivía junto a su concubina Alexopoulos en una vivienda de Dardo Rocha 522, de Avellaneda.
La mujer inició los trámites para contratar un servicio fúnebre y optó por cremar el cuerpo en el cementerio Parque Iraola de Berazategui, para lo cual se comunicó con dos cocherías.
La primera fue la firma «La Paz», de Lanús, cuyos empleados se negaron a hacer el servicio por problemas de papeles y porque la mujer les dijo que había muerto de un paro cardíaco pero notaron que el cadáver tenía una curita en la cabeza.
La segunda cochería contactada por la mujer griega fue «Piñeyro», de Avellaneda, que sí aceptó el servicio con cremación para el día siguiente.
Gracias a que ya estaban alertados por un llamado de la primera cochería, al llegar el domingo el féretro de Caprarulo al crematorio, los empleados lo abrieron y, al notar las heridas que tenía, llamaron a la comisaría 4ª de Berazategui.
Más tarde el cuerpo fue sometido a una autopsia, donde los forenses descubrieron que el hombre que iba a ser cremado con un certificado de muerte natural, en realidad había sido asesinado a golpes en la cabeza.
Respecto del móvil, la policía y la fiscal Attarián Mena, manejan dos hipótesis: un tema pasional en el que podría estar involucrado un tercero o un tema económico.
Fuente: Télam