Chile–Copiapó se vistió de carnaval cuando izaron al número Entre aplausos, condignas patriotas y lágrimas los chilenos celebraron la noche del miércoles el final del rescate de los 33 mineros atrapados en el fondo de una mina norteña, imágenes que fueron transmitidas en vivo a todos los rincones del mundo y que vieron 1,000 millones de personas, según diversos reportes de prensa.
Ubicado en Copiapó, 850 kilómetros al norte de Santiago, la mina San José entró en la historia el 5 de agosto, cuando un gigantesco derrumbe dejó atrapados a 33 trabajadores en uno de los refugios construidos para este tipo de situaciones de emergencia.
En los primeros 17 días no se supo el estado de los mineros, hasta que una sonda los ubicó a unos 700 metros de profundidad. “Estamos bien, en el refugio, los 33” se leyó en una nota que fue izada a la superficie. De inmediato comenzó el rescate a mayor profundidad registrado en la historia, el que finalizó el miércoles con el rescate de todos los mineros, sanos y salvos.
«Lo hicimos a la chilena»
“Lo hicimos a la chilena, lo hicimos bien”, dijo el Presidente Sebastián Piñera cuando salió Luis Urzúa, el capataz de la cuadrilla y le entregó un reporte al mandatario. La tradición minera es similar a la tradición marina: el capitán es el último que abandona el sitio o la nave tras un naufragio, en espera que todos los que están bajo su mando se pongan a salvo.
«Espero que esto nunca más vuelva a ocurrir», dijo Urzúa al presidente. «Yo creo que es un hito en la historia y espero que esto sea para mejor, para un Chile mejor».
«Gracias a todos, gracias a todos los rescatistas», añadió.
Tras el rescate, cientos de conductores se desplazaron por las calles de Copiapó, la pequeña ciudad que alberga el yacimiento, para ondear banderas chilenas y accionar las bocinas de sus autos.
Fiesta en Copiapó
La plaza principal recibió a casi 3.000 habitantes que observaron desde una pantalla gigante la salida de Urzúa. «Esto es una locura, nunca antes la gente de Copiapó se ha reunido con tanta alegría en la plaza principal para celebrar un acontecimiento», dijo Pedro Medina, de 50 años, que ha vivido desde que nació en la ciudad.
En la misma plaza principal de la ciudad el municipio instaló un estrado donde diversas orquestas locales interpretaron conocidas canciones de la música popular chilena junto a cumbias peruanas, colombianas y salsa de Panamá y Puerto Rico.
«Tocamos música… como si tuviéramos un fuego incandescente en el interior, todo por la alegría de ver a nuestros 33 mineros», comentó Luis Jorquera, trompetista de la banda Sabor Moreno, que toca hace 15 años música tradicional de Copiapó y del norte del país.
Como en el mundial
Los comerciantes ofrecieron imitaciones de vuvuzelas rojas, azules y blancas -los colores de la bandera chilena- junto con banderines con las imágenes de los 33 rescatados.
Silvia Madariaga, una vendedora ambulante de café, escribió un poema para los mineros. «Voy a contar una historia, un hecho muy real; 33 mineros quedaron atrapados, en un derrumbe infernal», recito a un periodista de The Associated Press los primeros versos de un largo escrito titulado «Para los 33».
Otros creen que Dios debe ser el receptor de todos los agradecimientos. «La fe en Dios ha traído a esos hombres a tierra», dijo Luis Carbajal, un fervoroso creyente que vestía una camiseta con una enorme imagen de Cristo.
Carbajal le restó cualquier mérito a la tecnología o a la creatividad humana empleada en el rescate.
Las primeras horas
Piñera dijo que este jueves visitará a todos los mineros en un hospital cercano y más tarde los recibirá en la sede de gobierno, La Moneda, en Santiago.
Con 31 años trabajando en minería, Urzúa supo al ver la dimensión del derrumbe que la salida no sería fácil, según contó al presidente en declaraciones e imágenes transmitidas en vivo por la televisora estatal.
«Yo la vi (la roca del derrumbe) muchos pensaban que iba a ser dos días (el rescate y la salida)…pero yo cuando vi, supe que no», dijo Urzúa, asegurando que tardó por lo menos tres horas en bajar el polvo provocado por el derrumbe.
«Hicimos varios intentos… de salir por arriba», añadió. «No sabíamos qué pasaba».
En medio de la desesperación «mucha gente trató de hacer cosas que no eran las mejores», dijo Urzúa, pero no dio detalles.
«Damos gracias a Dios que pudimos resistir…teníamos poquita comida» al principio, y para sobrevivir esos primeros 17 días dijo Urzúa. «Al último estábamos comiendo casi cada 48 horas».
Costo del rescate
El presidente Piñera afirmó en una entrevista con la televisora estatal que eventualmente se dará a conocer el costo total de la operación de rescate y que lo calcula entre $10 millones y $20 millones.
Un tercio de ese dinero fueron en donaciones, y otra parte aportes del gigante estatal Corporación Nacional del Cobre de Chile (Codelco) y del Estado, pero no dio detalles.
Con la salida del último de los rescatistas, Manuel González, acabó el operativo denominado San Lorenzo.
González, quien además fue el primero en bajar para ayudar a los mineros, alzó sus brazos e hizo una pequeña reverencia ante la cámara instalada en el socavón por los propios obreros, antes de introducirse en la jaula para ser izado a la superficie.
“Se olvidó de apagar la luz”, dijo uno de los técnicos que monitoreaba la señal de televisión que dio la vuelta al mundo
Cronología del rescate
00.04 a.m. – Florencio Avalos, 31, fue escogido para ser el primero por su buen estado físico. Podía brindar información sobre el trayecto de subida.
01:10 a.m. – Mario Sepúlveda Espina, 40, cautivó a los chilenos por su simpatía y carisma en amenos vídeos enviados desde el socavón, que le ganador los apodos de «El Periodista» o «Animador de televisión».
02:08 a.m. – Juan Illanes, 52, ex soldado que instaba a los mineros a mantener la disciplina y la organización.
03:09 a.m. – Carlos Mamani, 24, el único boliviano, había comenzado a trabajar en la mina sólo cinco días antes del derrumbe del 5 de agosto. Fue visitado por el presidente Evo Morales, quien le ha ofrecido empleo y una casa en Bolivia.
04:10 a.m. – Jimmy Sánchez, 19, el más joven de los 33, padre de un bebé de un mes.
05:34 a.m. – Osman Isidro Araya, 30, padre de tres hijos, planeaba abandonar el trabajo en la mina por considerarla peligrosa.
06:21 a.m. – José Ojeda, 47, viudo. Sufre de diabetes. Fue recibido por dos sobrinos al emerger.
07:02 a.m. – Claudio Yáñez, 34, operador de taladro, pedía cigarrillos que le fueron negados. No le gustaron los parches de nicotina que le dieron como alternativa.
07:59 a.m. – Mario Gómez, 63, el mayor de todos y el más experimentado, ya que comenzó a trabajar en minas a los 12 años de edad.
08:52 a.m. – Alex Vega, 31, casado, dos hijos, estaba ahorrando dinero para comprar una casa, ya que vive con sus padres. Su padre, en el primer día del accidente, usó sin éxito un nombre falso para tratar de entrar a la mina a rescatar. Lo hizo porque no se permite ser rescatista a familiares de los atrapados.
09:31 a.m. – Jorge Galleguillos, 55, había sufrido lesiones en al menos otros dos accidentes mineros. Tiene 13 hermanos, sufre de hipertensión, y le prometieron ayudar a su hijo que es estudiante universitario.
10:11 a.m. – Edison Peña, 34, casado. Se cree que es el que sufrió más depresión en el encierro. Pidió que le enviaran abajo una foto del sol. Se ejercitaba constantemente.
10:54 a.m. – Carlos Barrios, 27, padre de un niño de 5 años. Está separado de su esposa.
11:30 a.m. – Víctor Zamora, 34, mecánico, trabajaba en la mina desde hace cinco años. Sufrió dolores de muelas durante el encierro.
12:09 – Víctor Segovia, 48. «El Escritor», mantuvo una bitácora detallada de lo que ocurría día a día en el socavón.
12:50 – Daniel Herrera, 27, conducía camiones por las galerías de la mina. Recibió en el socavón camiseta de su club de fútbol favorito, Audax Italaiano. Su madre lo esperaba a la salida del ducto.
13:41 – Omar Reygadas, 56, tiene experiencia de 30 años trabajando en minas y sufrió accidentes antes. Se caracterizó por contribuir a mantener en orden los suministros que llegaban desde la superficie y describir las necesidades a la gente en la superficie.
14:49 – Esteban Rojas, mecánico y especialista en explosivos, desde el socavón prometió a su esposa y madre de sus tres hijos concretar el postergado matrimonio religioso, comprándole un vestido adecuado. Sufre de hipertensión, y había dicho que dejaría el trabajo en la mina.
15:28 – Pablo Rojas, 45, especialista en explosivos. Casado, padre de tres hijos, incluyendo un estudiante universitario. Trabajaba desde hace cinco años en la mina. Tenía un hermano y un primo entre los atrapados.
16:00 – Darío Segovia, 48, experto perforador, hijo de minero que lo llevaba a la mina desde niño pequeño. Padre de seis hijos. Antes del accidente había advertido que existía peligro. Tenía planes de dejar el trabajo de minero y abrir un negocio de venta de verduras. Es hermano del Florencio, primer rescatado.
16:42 – Yoni Barrios, 50, electricista e improvisado enfermero que fue clave para ayudar a los médicos que monitoreaban al grupo en la superficie. Hizo cuando se reveló que su esposa y su amante se conocieron a la entrada de la mina.
17:04 – Samuel Ávalos, 43, había ingresado a la mina hace sólo cinco meses, buscando un ingreso mejor que el que lograba como vendedor ambulante. Padre de tres hijos con su pareja, con quien dijo hablaría sobre matrimonio al salir.
17:32 – Carlos Bugueño, 27, llegó a trabajar a la mina hace poco porque ofrecía mejor sueldo que su anterior empleo como guardia de seguridad, pero ahora espera recuperarlo. Su meta era comprar una casa para vivir con su madre. Es soltero, sin hijos.
17:59 – José Henríquez, 54, perforador con 33 años de experiencia. Profundamente religioso, fue una especie de guía espiritual de los atrapados. Casado, padre de dos hijas gemelas.
18:24 – Renán Avalos, 29, tiene escasos cinco meses de experiencia en trabajo como minero, y proyectaba retirarse en diciembre para estudiar. Apasionado por el fútbol. Hermano del primer rescatado, Florencio Avalos.
18:56 – Claudio Acuña, 44, perforador, casado, dos hijos. Familiares dicen que también deseaba dejar la mina, donde había estado sólo dos meses. Aficionado al fútbol, recibió en la mina una camiseta firmada por uno de sus jugadores preferidos, el colombiano Macnelly Torres.
19.18 – Franklin Lobos – 53, chofer de maquinaria, ex futbolista profesional, cambió su trabajo como taxista por el de la mina. Durante su encierro, grandes figuras del fútbol le manifestaron su apoyo.
20:44 – Richard Villaroel, 23, estaba especialmente ansioso por salir, ya que su esposa se encuentra en la etapa final de su embarazo.
20:13 – Juan Carlos Aguilar, 46, ha trabajado como minero desde los 19 años. Está casado, dos hijos.
20:36 – Raúl Bustos, 40, ingeniero hidráulico, casado dos hijos. El tsunami causado por el terremoto del 27 de febrero destruyó el astillero en que trabajaba en el sur, por lo que viajó al norte a trabajar en la mina.
21:02 – Pedro Cortez, 25, electricista, instaló el sistema de comunicaciones usado para contactar a la mina con la superficie. Tiene una hija, está separado de su esposa.
21:28 – Ariel Ticona, 28, su esposa dio a luz a su segunda hija mientras él estaba atrapado. Apropiadamente, la niña recibió el nombre de Esperanza. Ticona colaboró con Cortez en la instalación de las comunicaciones.
21:55 – Luis Alberto Urzua, 54, capataz y jefe de turno en el momento del derrumbe. Eligió ser el último en salir, como el capitán que es el último en abandonar el barco.
Fuente: univision.com