Las sociedades se conmueven ante la desaprición de un menor y sobretodo si su ciudad de residencia es pequeña y no cuenta con más de 40 mil habitantes.
Es el caso de la localidad de Lincoln donde desde hace varios días se busca al niño Tomás Dameno Santillán, un niño de 9 años de edad, de quien nada se sabe hasta el momento.
Un cronista que cubría la nota en esa localidad bonaerense se encontró sorpresivamente con estos carteles, pegados en los postes de luz de las calles, que simulan a aquellos que se colocan cuándo se busca a una persona, pero si leemos sus contendios nos econtramos con algo insólito. (Recomendamos abrir la galería de fotos para leerlos mejor).
Aquello que parece ser gracioso o irónico no lo es en esta circunstancia, sobretodo cuando no se sabe que pasó con Tomás. Un hecho que llama la atención. (Fuente: Blog del periodista Mariano Rinaldi)