Salió a la luz gracias a una investigación iniciada por el gabinete criminológico de la seccional 6a, de Claypole, donde se allanó un «consultorio» donde se realizaban abortos clandestinos. Su propietario es un médico que tiene la matrícula suspendida y el que se encuentra en libertad provisoria.
Según informa el portal Precinto56.com.ar, por medio de diferentes llamadas al 911 que informaban que varias personas (mujeres) ingresaban al domicilio, como asi tambien matrimonios, se llegó al lugar.
Cuando se le dio intervención a la UFI nro. 07 a cargo del Dr. Bisquert, Juzgado de Garantías Nº. 06 a cargo del Dr. Baccini, estos ordenaron a los detectives cargo del subcomisario Sebastián Perea y el jefe del Gabinete Principal Marcelo Calarotta, que obtengan pruebas sobre el posible ilícito.
Fue así que los investigadores consiguieron pruebas documentales, testimoniales y filmaciones, para los magistrados intervinientes en el caso.
Se estableció que el propietario de la clínica es Teófilo Angulo Plasencia, un médico peruano que tiene su matricula suspendida y que se encuentra en libertad provisoria cumpliendo una condena por los delitos de abortos .
Con la correspondiente orden de allanamiento y contando con el personal policial y bomberos del destacamento de Claypole, el mismo fiscal irrumpió en la clínica de la calle 17 de Octubre (ex Gowland) 1016 .
Los efectivos secuestraron instrumental quirúrgico para realizar estas operaciones, medicamentos , suvenir que le daban cuando terminaban de realizarse los abortos.
Los bomberos realizaron excavaciones, y se comprobó que en el pozo del baño arrojaban químicos potentes para destruir los fetos. En la fachada de la llamada «clínica del terror » funcionaba un kiosco denominado King Kong. También habían carteles en toda zona sur; iba gente de Wilde, Florencio Varela, Lomas de Zamora, etc.
El «Doctor Muerte» como lo conocen en el barrio a Plasencia quedó imputado por Infra. art. 85 inc. 2 del Codigo Penal( Realizar Abortos con el consentimiento de los pacientes).
En varias oportunidades este «centro de la muerte» fue allanado, y también los medios periodísticos en su momento realizaron cámaras ocultas donde el propio Plasencia ofrecía su servicio.
cronica.com.ar