El violento episodio ocurrió en La Plata, donde una mujer de 56 años que llegaba a su domicilio junto a su sobrina y madre de un bebé de seis meses, y una nena de 10, fue sorprendida por tres encapuchados. La arrastraron por el piso y escaparon con el botín
Las víctimas fueron reducidas en una casa de Villa Elvira por tres sujetos encapuchados, armados y con guantes, quienes tras amenazar de muerte a los chicos y arrastrar por el piso a la dueña de la finca, lograron un botín estimado en más de 100 mil pesos.
El violento episodio sucedió anteanoche en una vivienda de calles 3 entre 84 y 85, cuando Celina Amarilla llegó a su hogar luego de pasear con su sobrina, oriunda de la localidad de Escobar, informó el diario Hoy.
Celina dio detalles del dramático asalto en su casa. “Soy taxista y estoy encargada de dos autos. Ayer por la tarde la llevé a Nancy (la sobrina) y a su hijito, quien se recupera de una doble operación de intestino, a ver la ciudad de La Plata de noche. Visitamos la Plaza Moreno y regresamos. Estacioné el auto y abrí el garaje. Hasta ahí todo bien, pero de pronto un tipo me agarró desde atrás del cuello y me puso el caño de una pistola en la cabeza”, detalló Amarilla.
“Me empujaron hasta tirarme en la cama de uno de los dormitorios. Me llamaban por mi nombre y me avisaron que era una batida”, recordó la mujer. Los delincuentes sólo encendieron la luz de una de las habitaciones y nunca gritaron, para no alertar a los vecinos de lo que estaba pasando. “A mi sobrina la ataron de pies y manos con unas medias y a mí me amenazaron para que revelara dónde tenía escondido el dinero. “Te matamos al bebé, insistían”, señaló Celina.
La propietaria de la finca no quiso poner en peligro a sus familiares y les indicó a los intrusos dónde tenía la plata. “Era dinero que ahorré con un montón de sacrificio para cambiar los dos taxis y ponerles equipos de GNC de quinta generación. Me hicieron un daño terrible. No soy una empresaria, soy una laburante que se rompe el lomo todos los días”, se quejó, desconsolada, Amarilla.
De acuerdo con su relato, uno de los delincuentes le pasó una bufanda por el cuello y la arrastró por la casa en penumbras, por lo que sufrió varios golpes y moretones.
Además de la importante suma de dinero que encontraron, los sujetos engrosaron el botín con joyas, tres celulares y una mochila con documentos. “A pesar de que ya tenían todo, en menos de diez minutos me dieron vuelta toda la casa. Rompieron cajones y armarios. Se pensaban que tenía más dinero”, explicó Celina.
La nena de 10 años agregó que “a mi abu le dijeron que si encontraban más plata, iba a cobrar”.
Fuente: Infobae