Carola, la mamá de Candela Rodríguez, se reunió con el juez de la causa

Carola Labrador mantuvo un encuentro de “carácter personal” con el magistrado que entiende en el asesinato de la pequeña de once años. Su abogado, Fernando Burlando, explicó en C5N que hay “cierta claridad” en el expediente sobre quién fue la persona que habría esperado a la niña a metros de su casa

El encuentro entre Labrador y el juez de garantías Alfredo Meade “fue muy extenso” y “amable”, según relató Burlando.

“Fue una charla en que se hablaron cuestiones fuera de lo que es la investigación la causa. Estuvo con el juez de garantías, que muy amablemente atendió a Carola. Es una nueva forma de presentarla a la mamá de Candela, que sufrió en estos últimos días una instalación que tenía más que ver con algún tipo de sospecha que con la claridad con la que se movió desde que desapareció la niña”, declaró su abogado.

El abogado de la familia de la niña de Hurlingham espera ser aceptado formalmente como particular damnificado en el expediente, decisión que podría tomarse mañana, de acuerdo a los tiempos procesales con que se suelen resolver este tipo de cuestiones. Mientras tanto, Burlando pidió colaboración de la “población carcelaria” para que aporten datos que pudieran ayudar a resolver el crimen.

“Apelamos a la población carcelaria a que cuente lo que sabe. Hay un viejo código que indica que cuando se afecta a un familiar de un detenido, todos los que están en la misma situación entregan rápidamente los datos que tienen para que se pueda resolver el caso. Es por eso que esperamos su colaboración, por un tema de solidaridad”, indicó Burlando.

Así aludió a la posición al padre de la niña, Laurerio Rodríguez, quien se encuentra detenido en el Servicio Penitenciario purgando una pena por participar de una banda de piratas del asfalto.

Burlando, que ayer y hoy ya pudo tener contacto con el expediente, admitió que ya hay “cierta claridad” sobre la persona que secuestró a la niña a metros de su casa, el lunes 22 de agosto.

Además, reiteró que a su entender no se trató de un secuestro extorsivo y por tal motivo desestimó las grabaciones telefónicas que trascendieron tras el asesinato de la niña. “Hubo muchas bromas y cosas complicadas porque el número de la casa salió publicado en todos los medios”, recordó el letrado.

El patrocinante de Labrador aventuró que de los cruces telefónicos surgirá información valiosa para hallar el móvil de la causa, eslabón clave que está faltando para unir a los detenidos con el asesinato. “Tenemos a los asesinos detenidos y a Candela muerta, pero todavía no hay motivos… Algo falta”, reflexionó.

Fuente: Infobae