Una pareja que en el año 2001 fue absuelta por el crimen de de una niña de 2 años y medio, hija de la mujer, comenzó ayer a ser nuevamente juzgada por el hecho. A fines de 2010, el Tribunal de Casación Penal bonaerense anuló por mayoría el polémico veredicto dictado por el Tribunal Oral Criminal I de La Plata. Según los peritos la criatura murió por una “brutal” golpiza que habría sufrido en la casa de Punta Lara en la que vivía junto a su madre y la pareja de ésta. Ayer declaró la hija de la imputada y complicó la situación procesal de su padrastro. Hoy se realizarán los alegatos y el fiscal pedirá la pena máxima para ambos, aunque aun no está claro quién fue el autor de la golpiza ni el rol que tuvieron ambos acusados en el hecho.
Lorena Barrera y Julio Maximiliano Morán enfrentan un nuevo juicio oral por la muerte de Mailén Barrera, quien el 20 de noviembre de 1998 llegó muerta al Hospital Cestino de Ensenada. La autopsia fue contundente: falleció a raíz de una salvaje golpiza que, se sospecha, sufrió de parte de su madre y pareja en la casilla que compartían en columna 272 de Punta Lara.
En el primer juicio, realizado en 2001, el Tribunal Oral Criminal I de La Plata, con voto de los jueces Guillermo Labombarda y Samuel Saraví Paz, absolvió a los acusados por el beneficio de la duda. Los jueces concluyeron que se había probado que uno de los acusados la había castigado a golpes y le produjo el deceso, pero como en el juicio no se pudo probar la autoría, decidieron la absolución de ambos.
La tercera integrante del Tribunal, Patricia De la Serna interpretó que Morán debe ser penado por homicidio calificado por alevosía y Barrera por el delito de abandono de persona seguido de muerte.
El fiscal de Juicio, Jorge Bettini Sansoni, apeló el veredicto ante Casación. La Sala II de ése órgano, integrada por Ricardo Borinsky, Carlos Natiello y Carlos Mahiques convalidó el planteo acusatorio: en el debate oral había surgido que “uno de los dos imputados había sido el autor del crimen, aunque no se pudo acreditar quién la mató”, y ordenó que se realice un nuevo juicio oral.
SEGUNDO ACTO. Este nuevo debate comenzó ayer, y tres testigos resultaron claves en la primera jornada. Los médicos Helena María Huarte y David Costi no dejaron dudas. La primera profesional fue quien atendió a la nena en la guardia del Cestino. Lleva más de 30 años de carrera y sostuvo: “No se me va a olvidar jamás la brutalidad que presentaba el cuerpo de esa criatura, nunca vi algo igual en mi carrera”.
En el mismo sentido se expresó el forense policial: “Jamás en mi vida vi semejante brutalidad contra una criatura” y confirmó que Mailén, además, “estaba desnutrida”.
El tercer relato clave lo brindó Antonela Barrera, hija mayor de la acusada. “Julio nos pegaba a mi y a mi hermana con el cinto en la cola, nos trataba mal, nos encerraba en la pieza para que no veamos cómo le pegaba a mi mamá”. Así arrancó el primer tramo de su relato que fue abruptamente cortado por una crisis de llanto al rememorar lo vivido hace catorce años, cuando tenía apenas cuatro años.
“Mi mamá nunca me pegó, yo me salvé porque mi tía y mi abuela me sacaron de esa casa, Julio me quiso matar, me ahorcó”, rememoró más tranquila. “El nos pegaba cuando no estaba mi mamá, y cuando ella llegaba se hacía el boludo, como si no hubiera pasado nada”, agregó ante los jueces.
Antes había declarado su abuela, Mirta Barreda, madre de la sospechosa quien, como se esperaba, intentó despegar a su hija y apuntar contra su ex yerno.
La misma estrategia, pero en sentido inverso, desplegaron los familiares de Morán que declararon en la extensa jornada de ayer.
El debate se reanudará hoy a las 11 con los alegatos de las partes y la próxima semana será el veredicto.
Fuente: El Argentino