La estrepitosa caída de Agustín Rossi en los comicios del día de ayer, dejaron al descubierto a todo un Gobierno nacional. Cuando la derrota se adueño de las filas kirchnerista, ningún integrante del Gabinete nacional estuvo para apoyar, Randazzo el hombre que viaja en cada elección para apoyar al candidato K, ayer prefirió quedarse.
El kirchnerismo volvió a demostrar su imposibilidad de estar en las más fuertes derrotas, el 10 de julio ningún ministro de primera línea, más allá de Tomada quien era candidato a vicejefe de Gobierno, fue al bunker de Daniel Filmus.
Ayer la provincia de Santa Fe volvió a ser testigo de la incapacidad de reconocer la derrota dentro de las filas K. Agustín Rossi, pasadas las diez de la noche se paró frente al micrófono del bunker y felicitó a los ganadores, pero ni el ministro del Interior, ni ningún otro dirigente de peso de la Rosada estuvo para apoyarlo.
Sorprende que Florencio Randazzo, una persona que viajó en pocas horas a Tierra del Fuego para festejar el triunfo de Rosana Bertone, que finalmente fue para Fabiana Ríos y que lo obligó al hombre K a cambiarse de bunker para no reconocer la derrota, ayer no haya podido hacer un viaje mucho más estrecho.
Randazzo llegó en cuestión de horas a Misiones para mostrarse ganador con Maurice Closs, radical K, pero repitó, no pudo viajar a la provincia santafesina.
Es muy llamativo que el ministro del Interior, por orden de La Rosada, también estuvo con Beder Herrera en La Rioja, aunque ayer en Santa Fe no se vio a nadie.
Esto muestra a las claras que desde el Gobierno nacional hay una clara postura, ir a mostrarse con el candidato provincial que gana y al que pierde, por más que sea un defensor a ultranza del “modelo”, dejarlo solo. Por eso ayer se vió a Agustín Rossi, un candidato que en la derrota se quedó solo.
Fuente: www.agenciacna.com