“A Carrizo lo apoyamos durante toda la tarde…”

Romero contó que, con Martín Tocalli, entrenador de arqueros, arengaron a JP en el día después del descenso con River. “Tiene nuestra confianza”, dijo el 1 titular.

Todos los jugadores de la Selección siguieron en directo el trágico desenlace de River. Y varios integrantes del plantel, antes y/o después del descenso, le mandaron un abrazo a Juan Pablo Carrizo. Sergio Batista, por caso, le ofreció al arquero, ya entrada la noche del domingo, posponer un día su inserción en la preparación de la Selección para la Copa América.

Carrizo agradeció todo, pero eligió no perder más terreno del que ya ha perdido y le dijo al Checho que se presentaba el lunes, tal cual lo pautado. Y ahí estuvo JP, en el predio de Ezeiza, donde, junto al resto del plantel, desde ayer quedó concentrado para el debut del viernes, frente a Bolivia. Apenas tuvo una durísima madrugada y una triste mañana para elaborar y digerir el duelo por haberse ido a la B con River, por haberse devaluado como ídolo, por haber perdido el puesto en la Selección. Porque el Checho lo imaginaba titular. Pero el buzo, hoy, es de Romero.

Y fue Romero a quien ayer le tocó hablar. Y responder, obviamente, por su competencia en la hierba. “A Carrizo lo apoyamos durante toda la tarde con (Martín) Tocalli. Desde ayer (por el domingo) que lo venimos haciendo. Estamos 100% con él, tiene toda nuestra confianza”, sintetizó Chiquito la banca brindada a JP en su vuelta a la Selección. Un retorno en silencio para con la prensa, pero sin el botón de mute apretado a la hora de usar los guantes. Porque Carrizo atajó en el primero de los ensayos de fútbol reducido que armó Batista, y, si bien atajó para los titulares, lo que le adjudicó poco trabajo, prácticamente nulo, teniendo en cuenta que lo atacaban los sparrings, el arquero se mostró activo, atento para sacar rápido a la hora de reanudar el juego, y para nada inhibido a la hora de ofrecerle, como apoyo, sus dúctiles pies a Gaby Milito o Burdisso, o simplemente para animar a Zanetti. Sí, 100% JP.

Enfundado en un camperón, mientras se bancaba el frío de la quietud por no recibir ataques rivales, quizá haya tenido que bancarse, también, ver pasar por su cabeza imágenes, flashes de lo tanto que padeció, junto a millones de hinchas de River como él, en la cruda tarde y noche de domingo. De un domingo que no fue cualquiera. En una vuelta a la Selección que no resultó la que hubiera imaginado, y sobre todo deseado…

Fuente: Olé