La ANSeS anunció que podrá pagar las sentencias por retroactivos previsionales dos veces al mes, con el fin de agilizar esos procedimientos.
Según se anunció, las siguientes fechas de pago están estimadas para el 1 de julio y el 20 del mismo mes.
Desde enero de este año, el organismo previsional realizó un inventario y tipificación de los expedientes y elaboró un sistema informático parametrizado.
Asimismo, el organismo que encabeza Diego Bossio precisó que se clasifican los expedientes teniendo en cuenta las siguientes características: rango de haberes, edad y antigüedad.
De la combinación de esos registros surge periódicamente el orden de pago y así «se logra una mayor transparencia y se reduce el margen de error en las operaciones», se indicó.
Para cumplir con el objetivo de abonar las sentencias dos veces por mes, la ANSeS dispuso la creación del «Grupo de Apoyo Sentencias», con la finalidad de ayudar en la resolución del stock de expedientes de cumplimiento de sentencias judiciales por reajuste de haberes.
Según el organismo, el retraso del pago de las sentencias se debió, entre otras acciones transformadoras implementadas por el organismo, a la puesta en marcha de este sistema que implica nuevas pautas y procesos para su correcto funcionamiento.
El 21 de junio se abonarán 794 sentencias judiciales por reajuste de haberes.
Las sentencias liquidadas fueron más de mil, pero no todas benefician, a algunas no les corresponde el retroactivo y otras fueron dadas de baja o retenidas por el control que se realiza con posterioridad a la liquidación.
La ANSeS insiste en apelar los fallos de primera instancia que la justicia previsional dicta a favor de los jubilados que reclaman un ajuste de sus haberes.
Lo hace a pesar de que hace más de dos semanas la Corte Suprema la intimó para que en 30 días informe qué está haciendo «para evitar conflictos innecesarios o prolongar los existentes » debido a la enorme cantidad de juicios de los jubilados y sentencias impagas.
En lo que va del año, por esas apelaciones, ingresaron en los juzgados de segunda instancia el récord de 16.213 sentencias que así no quedaron firmes para ser pagadas a sus beneficiarios, alargando la litigiosidad.
Se trata de una cifra récord ya que representa casi un 40% más que en igual período de 2010 y supera las marcas de los años anteriores.
Fuente: Noticias Argentinas