El revuelo que generó en San Isidro la intención del Jockey Club de construir un estadio techado en parte de sus tierras llegó ayer a su fin. Ante el fuerte rechazo de los vecinos, el intendente Gustavo Posse firmó un decreto en el que invalida ese proyecto por “no tener el consenso de los vecinos”.
“En estos casos lo primero que se busca es que haya consenso entre los habitantes. En este caso los vecinos se opusieron y la opinión de ellos es fundamental. El intendente notó a la gente preocupada y cerró el tema”, le dijo a La Razón el secretario de Gobierno, Héctor Prassel. Para los vecinos, la iniciativa presentada por el Jockey Club (ya fue notificado de la negativa) jamás estuvo del todo clara. “Creo que hubo un error en la forma en que se lo comunicaron a la población. Tuvieron tiempo para explicar en los medios de comunicación de qué se trataba”, agregó Prassel. Los vecinos objetaron varios aspectos a la construcción, desde las complicaciones en el tránsito que podrían surgir en una zona que ya de por sí tiene mala circulación, hasta el impacto visual y cambios en la calidad de vida.
La idea del club era ceder en alquiler tierras para construir un megaestadio para 15 mil personas, con estacionamiento y un sector comercial, en las avenidas Centenario y Márquez. Se haría en un predio de 4,3 hectáreas que está en desuso y la construcción estaría a cargo del arquitecto Carlos Ott, autor de la Opera Bastilla, en París.
Fuente: La Razón