Pavone dice que Almeyda “tuvo unos huevos bárbaros” en la corajeada previa al gol y asiente que el capitán podría integrar la Selección: “La edad no importa…”.
No hay dudas de que este River puntero del Clausura es un equipo luchador, liderado por guerreros más que por jugadores talentosos. En el podio están Matías Almey-da y Mariano Pavone, los autores (uno por la heroica gestación y el otro por la definición) del gol del triunfo ante Banfield. El Pelado ya había comparado al Tanque con un “espartano” cuando el 7 ganó el partido ante Independiente con una guapeada. Y ahora es el delantero el que devuelve el elogio, casi en los mismos términos: “Matías es un gladiador”.
Si bien Pavone no necesita demasiado contagio para dejar el alma en cada pelota, el ejemplo de Almey- da le da un plus. “Su presencia es un empuje para nosotros. Es el abanderado del equipo, por algo es nuestro capitán. Demostró lo que significa en la jugada del gol, peleándola entre tres jugadores de Banfield. Tuvo unos huevos enormes, parecía un pibe de 20 años”, describe, con admiración, el goleador, que se permite bromear con la situación: “Ahora el Pelado es asistidor, pero todavía le falta el gol, ja”.
Obviamente, el Tanque se suma al deseo de los hinchas de River de ver al Pelado en la Selección. También el volante de 37 años admite que “volver a vestir esa camiseta está entre mis sueños”. Y si bien chicanea que está “para la Selección Senior (de veteranos)”, Pavone considera posible que el Checho Batista le dé una chance al ídolo: “Si está bien, no importa la edad. Hay jugadores como Verón y Zanetti, por ejemplo. No se tiene que mirar ni medir por la fecha de nacimiento, sino por rendimiento”.
En lo que no se embala el Tanque es al mirar las tablas. Sigue atento a las a pesar de que River es el único puntero del torneo: “Hemos sacado una diferencia importante en los promedios, pero igual no nos confiamos ni nos relajamos. Esa es la virtud que tiene este equipo y, como premio a todo eso, llegó la punta del torneo. Hay que estar tranquilos”. Claro, seguir en la lucha. Como espartanos y gladiadores…
Fuente: Olé