La UE «alienta al Consejo Transitorio Libio» y lo reconoce como interlocutor, según lo adelantó hoy viernes el presidente francés. Dicho Consejo propone una cumbre tripartita entre Unión Africana, Liga Árabe y la UE para tratar la crisis Libia.
«El Consejo Europeo ha decidido saludar y alentar al Consejo Nacional Transitorio Libio basado en Bengasi», ha declarado el presidente francés, Nicolas Sarkozy, a su salida de la reunión del Consejo extraordinario que se celebra en Bruselas para tratar las revueltas en Libia.
«Gadafi ya no es un interlocutor válido para la UE», ha añadido el presidente francés, uno de los primeros líderes en intervenir tras la reunión. Sarkozy ha adelantado que la UE «permitirá el acceso a la agencias humanitarias para ayudar a los desplazados», al tiempo que el Consejo ha acordado preparar una cumbre tripartita entre la UE, la Liga Áraba y la Unión Africana.
La Unión Europea había recibido con cierto escepticismo la petición del presidente francés, Nicolas Sarkozy, secundada también por el primer ministro británico, David Cameron, de reconocer al Consejo Nacional libio, una especie de Gobierno que gestiona la zona controlada por los rebeldes, y de llevar a cabo, con el respaldo de EE UU, ataques selectivos para el establecimiento de una zona de exclusión aérea en el país magrebí. En su intervención tras el Consejo, el presidente no ha hablado en ningún momento de pleno reconocimiento, pero si de una apertura de interlocución directa con los rebeldes basados en Bengasi.
Al inicio del Consejo europeo extraordinario que se celebra en Bruselas, Sarkozy había a los Ventisiete a seguir el ejemplo de su Gobieno y conceder legitimidad a la cúpula rebelde que lucha por derrocar a Muamar el Gadafi. Además, había reclamado la creación de un corredor humanitario para canalizar la ayuda a la población sublevada. «Francia pide a Europa que reconozca a las autoridades libias agrupadas en el Consejo Nacional», ha asegurado el presidente francés a su llegada a la cumbre comunitaria.
Sarkozy ha explicado que Francia y Reino Unido están «abiertos», siempre y cuando cuenten con el respaldo estadounidense, a ataques «defensivos» contra las fuerzas leales a Gadafi si éste continúa empleando la aviación para masacrar a la población civil. París y Londres ultiman un borrador conjunto que presentarán ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para que autorice el uso de la fuerza en su objetivo de establecer una zona de exclusión aérea en Libia. Otros países europeos han expresado su preocupación de que una hipotética intervención militar en el país del norte de África complique aún más las cosas, y apuestan por una decisión que también implique a las naciones vecinas árabes y no sea interpretada como un ataque a la soberanía libia.
La canciller alemana, Angela Merkel, todavía no ha dicho si su Gobierno respalda la creación de una zona de exclusión. Pero, en cualquier caso, se ha mostrado más cauta que su colega francés. «Debe quedar totalmente claro que cualquiera que hace la guerra contra su propio pueblo no es un socio adecuado para la Unión Europea. Por ello exigimos la salida inmediata de Gadafi. Haremos todo lo posible para enviar una señal de unidad. Las sanciones económicas y financieras darán una muestra de esa unidad», ha dicho Merkel.
«Para mi, cualquier discusión sobre una intervención militar debe ser abordada en el Consejo de Seguridad, en la Liga Árabe o en la OTAN; no es responsabilidad de la Unión Europea», ha advertido por su parte el primer ministro sueco Fredrik Reinfeldt.
Nuevas sanciones económicas
Con su reunión de hoy, la UE busca recuperar la iniciativa política en la crisis libia después de que Francia se desmarcara ayer de sus socios comunitarios. Los jefes de Gobierno de los Veintisiete reclamarán al dictador que abandone el poder y podrían decidir más sanciones contra su régimen. Así lo ha avanzado el ministro de Exteriores húngaro, cuyo país ostenta la presidencia de turno del Consejo europeo. Janos Martonyi ha asegurado que las nuevas sanciones podrían extender la congelación de activos a las cuentas de empresas libias de gas y petróleo. «Antes de tomar cualquier decisión militar debemos enviar mensajes políticos muy claros, y espero que la reunión extraordinaria de hoy del Consejo europeo sirva para eso», ha dicho el jefe de la diplomacia húngara. «La esencia de ese mensaje político es que Gadafi tiene que abandonar para que se creen las condiciones democráticas necesarias para iniciar la transición en Libia».
Veto a la delegación libia en El Cairo
El futuro de Libia también será abordado por la Liga Árabe en su reunión del sábado en El Cairo. Al encuentro acudirá la coordinadora de la política exterior de la UE, Catherine Aston, que ayer enfatizó la necesidad de contar con los países árabes para resolver el jeroglifico libio. Entre otras cosas se espera que la Liga ofrezca pistas a los europeos sobre quiénes están en el Consejo libio.
Fuentes de la Liga, que mantiene en suspenso a Libia en protesta por la represión y la violencia, han descartado que la delegación de emisarios enviada por Gadafi a la capital egipcia vaya a participar en la reunión de emergencia prevista para mañana. «No creo que sean admitidos porque la decisión de los ministros árabes fue suspender la participación de la delegación libia», ha anunciado Hesham Youssef.
Este responsable no ha querido cerrar del todo la puerta al diálogo con el régimen libio, al asegurar que podría producirse finalmente un encuentro con los emisarios del dictador pero no en el contexto de la reunión de la Liga Árabe. «Todavía no hay nada programado», ha aclarado. «Necesitamos discutir toda clase de detalles con las autoridadesa libias», ha justificado Youssef, que también ha dicho que hay contactos con los rebeldes del Consejo Nacional de Bengasi. «Estamos discutiendo con ellos la situación humanitaria y la situación en general. También nos interesa su evaluación de los acontecimientos», ha dicho. En la reunión de la Liga Árabe tampoco habrá ningún representante de la oposición libia.
Fuente:El País.