El Flaco no pudo festejar en casa, pero con su andar firme en el polvo se ganó un lugar en la Davis.
En esta etapa de transición que está viviendo el tenis argentino, Juan Ignacio Chela se muestra como uno de los más firmes en el circuito, pese a sus 31 años. El Flaco viene de cumplir una gran temporada en 2010 con dos títulos, arrancó este año con mucha regularidad en la gira latina sobre polvo de ladrillo y el gran premio lo encontrará seguramente hoy, cuando Modesto Vázquez lo nombre en el cuarteto que enfrentará a Rumania del 4 al 6 de marzo en Parque Roca, en la 1ª ronda de la Davis. “Tengo muchas ganas de jugar la Copa, creo que paso un momento muy bueno y por eso me gustaría formar parte”, contó el de Ciudad Evita, quien acompañará a David Nalbandian, Juan Mónaco y Eduardo Schwank.
El hueco se le abre al Flaco por mérito propio y porque la actualidad del resto de los normales (Pico, Cebolla, Edu) es irregular. Están fuera de esta discusión David, el as nacional, y Juan Martín del Potro, que se sumaría a partir de cuartos. Así, después de dos años de su última participación (5-0 ante Holanda, en 2009), Chelita regresaría al equipo que dará a conocer hoy Tito, a las 11.30 en el Hotel Panamericano.
Si bien Chela no pudo coronar con el título en la Copa Claro la mejor semana en Buenos Aires de su carrera, el sabor final es dulce y el ranking será 31º (trepará cuatro puestos). Ante Nicolás Almagro, el Flaco jugó un encuentro con muchos vaivenes y perdió por 6-3, 3-6 y 6-4. En un Lawn Tennis con 3.500 personas, que se fueron metiendo en el partido para silbar al español y alentar al local, Chelita aprovechó los errores de su rival, que crecieron en el segundo set. La ilusión para Juani se incrementó cuando igualó en sets y empezó el tercero con su servicio. Sin embargo, se dieron quiebres sucesivos que hicieron incierta la definición: Almagro despegó con un break más y tuvo algún sustito al servir para llevarse el match, debido a que Juani se encontró con una chance de recuperación. Pero el nacido en Murcia le cortó el entusiasmo al Flaco y al público al remontar el marcador con una poderosa derecha y encaminarse a su noveno título. “Hoy (ayer) Almagro jugó bien y por eso perdí, pero mi balance es positivo”, explicó Chela.
Todavía con nafta, aunque él mismo se trate de viejito, esta semana iniciará un nuevo desafío, en Acapulco, última semana de preparación para la Davis. La principal duda de cara a la serie frente a los rumanos es saber si el Flaco saldrá como single 2 o si integrará el doble junto con Eduardo Schwank, con quien arribó a las semifinales de Wimbledon el año pasado. En los últimos dos singles que disputó por la Ensaladera, ante Holanda hace dos años, mostró alguna complicación para ganar el primer punto de la serie (en cinco sets, contra Huta Galung) y se quedó con el último juego -de relleno- ante Thiemo De Bakker. Hoy tiene y transmite confianza: pidió Davis con palabras y con hechos. Sólo le falta escuchar su nombre en boca de Tito.
Fuente: Olé