La joven india Yamani Karanam sufría fuertes dolores de cabeza que le impedían no sólo estudiar lo que más le gustaba, la informática, sino tener una vida normal. Sin dudarlo, consultó a un médico.
Luego de varios estudios, le informaron que tenía un tumor en el cerebro pero que la operación era riesgosa. Sus amigos, entonces, juntaron fondos para que la viera un reconocido especialista.
Tamani consultó a Hrayr Shahinian, en Los Ángeles, quien le dio un diagnóstico totalmente distinto. El supuesto tumor era, en realidad, un «teratoma», es decir, un feto no desarrollado que tenía huesos, pelos y dientes.
Por fortuna, la operación fue exitosa y la joven estudiante se recupera favorablemente.
Fuente: Diario Hoy