Los alquileres porteños subieron un 25% durante el último año Comentar

El valor promedio de un departamento de 3 ambientes supera los $4.000 por mes. Recoleta es el barrio más caro.

El sueño de la casa propia se convirtió, desde hace tiempo, en una meta difícil de lograr para la mayoría de los porteños. La inflación alcanzó al mercado inmobiliario, por lo que los alquileres se transformaron en la primera opción al momento de acceder a una vivienda. Sin embargo, esa alternativa también se tornó cuesta arriba a raíz de la situación económica del país. El precio de los alquileres en Capital subió un 25 por ciento en promedio durante el último año, según un relevamiento de la consultora Reporte Inmobiliario.

El informe indica que el valor promedio de toda la Ciudad para departamentos de 2 ambientes se ubicó en $3.389 al mes de febrero, mientras que las unidades de 3 ambientes registraron un promedio de $4.030. Así, con respecto a ese período del año pasado, el alquiler promedio de una unidad de dos dormitorios creció un 26,59%, a la vez que el valor locativo promedio de las unidades ofertadas de dos ambientes aumentó casi un 24%.

En la tabla que comprende a 36 barrios porteños, Recoleta aparece como la zona más cara, tanto para conseguir viviendas de dos como de tres ambientes. En el primer caso, el valor mínimo es de $3.500 y el máximo llega a los $5.000, dando un promedio de $4150. Sumándole un dormitorio, el costo más bajo es de $4.700 y el más alto, de $5.800 ($5.115 promedio).

Barrio Norte (la media para los tres ambientes es de $4.965) y Palermo ($4.700), completan el podio de los más costosos.

Por su parte, Constitución, Boedo, Nueva Pompeya, Parque Avellaneda y Parque Patricios figuran entre los barrios más baratos. Si la búsqueda se limita a los dos ambientes, los valores oscilan entre los $2.400 y los $3.600.

Si la intención es agregar una habitación, se destacan Barracas, La Boca y Mataderos como las zonas más económicas. Las cotizaciones van desde los $3.000 hasta los $4.000 mensuales.

Fuente: La Razón