Ya hay otros con los mismos síntomas y el gremio dice que la pieza donde descansan es una «pocilga». El Ministerio de Salud provincial ordenó urgentes mejoras.
Al menos tres médicos de la unidad de cuidados intensivos del Hospital Centenario se contagiaron de sarna en su trabajo y en el sindicato que los agrupa adjudicaron la situación a las «pésimas condiciones de higiene» que los profesionales tienen en el cuarto donde descansan cuando están de guardia. Es más, la secretaria gremial de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra), Sandra Maiorana, no se anduvo con vueltas a la hora de calificar al lugar como una «pocilga» y adelantó que hay otros facultativos del servicio que «ya empezaron con prurito», pero aún no tienen confirmación del contagio. El responsable del nodo Rosario del Ministerio de Salud provincial, Gustavo Englander, prometió urgentes medidas de arreglo, limpieza y cambio de colchones y ropa de cama.
De los catorce médicos que integran el plantel dedicado a cuidados críticos en el Centenario, tres «ya tienen el diagnóstico de sarna confirmado y han hecho el tratamiento correspondiente», señaló Maiorana. Aunque la saga podría continuar, puesto que hay otros profesionales que ya «muestran síntomas», por lo que se les aconsejó que «den parte a la ART y no vayan a trabajar porque hasta podrían contagiar a los pacientes».
La insólita situación se debe, según Maiorana, a las «pésimas condiciones de higiene» que los médicos soportan durante sus guardias. La dirigente explicó que el plantel comparte una pequeña salita «de dos por dos», en la que se «amontonan» dos cuchetas, una mesa, una silla y una heladerita que los propios profesionales se compraron «para soportar el terrible calor que hace en esa pieza».
Pero lo más grave, apuntó, es que «los médicos no tienen dónde higienizarse» y la ropa de cama y las toallas no se cambian «desde hace meses». El lugar fue calificado por Maiorana como «pocilga, se mire por donde se mire».
Según la dirigente, la falta de condiciones «mínimamente dignas donde los médicos puedan descansar, en caso de que logren hacerlo, o mantener una reunión científica» es un problema común a todo el sistema de salud pública (tanto municipal como provincial) e incluso de la salud privada.
«No se piensa en el que trabaja, no se piensa ni siquiera en un lugar donde el médico pueda sentarse a escribir; sólo se piensa en que esté parado o atendiendo a pacientes», afirmó, algo que definió como un «maltrato vergonzoso hacia todos los equipos de salud».
La situación fue denunciada ayer por Amra ante el Ministerio de Trabajo provincial y también se advirtió a las autoridades de salud que «si no se dan las condiciones mínimas de trabajo» se «levantará la guardia», lo que implicaría «desmantelar la sala de terapia intensiva y hasta «tener que trasladar a los pacientes».
Los pedidos incluyen limpieza en cuartos y baños, cambio de sábanas y toallas e instalación de un aire acondicionado.
El responsable de Salud para el Nodo Rosario se mostró sorprendido del tenor de la denuncia. «Las puertas están abiertas para todos los gremios», afirmó, y recordó que su propia experiencia como médico hospitalario lo llevó muchas veces a «pelear por cosas como estas».
Así y todo, el funcionario aseguró que «el Centenario viene hace años con un proceso de arreglos, refacciones y ampliaciones, y en ese marco la unidad de terapia intensiva va a estar inaugurando en unos seis meses instalaciones nuevas y una sala médica, «moderna y con muchísimo mayor confort y comodidad» que la actual.
Pero Englander admitió que en el «mientras tanto» hay que mejorar las condiciones de trabajo y prometió «limpieza, pintura, arreglos, cambio de colchones y de ropa de cama».
El funcionario dijo que apenas conoció la denuncia gremial se comunicó con las autoridades del hospital para «tomar el toro por las astas en lo inmediato: hoy, mañana y pasado», puntualizó.
Además, adelantó que el «comité de infecciosas ya está evaluando» el cuadro de situación para ver si corresponde llevar adelante un operativo de fumigación o desinfección para cortar el contagio de la sarna. Que hasta ahora afectó a médicos, pero podría extenderse a los pacientes.
A tener en cuenta
La escabiosis o sarna es una enfermedad de la piel causada por el ácaro parásito Sarcoptes scabiei, llamado comúnmente arador de la sarna, muy contagioso y que se transmite en forma “interhumana” por contacto directo o a través de “fomites”, es decir, prendas, sábanas o toallas. En algunos casos se puede adquirir también por tocar animales infectados.
Otro paro de Siprus por paritarias
El Sindicato de Profesionales Universitarios (Siprus) concretará mañana su segundo paro de 2015, nuevamente por 24 horas, para reclamar la reapertura de paritarias y mejores condiciones de trabajo, a la vez de expresar su disconformidad ante el deterioro salarial y el incumplimiento de acuerdos con las autoridades sanitarias.
Se trata de una medida con alcance nacional, aunque las modalidades de protesta varían según cada jurisdicción. En Rosario, se resentirá especialmente la actividad en el Hospital Provincial, en el de Niños Zona Norte y en Atención Primaria de la salud.
“El deterioro de nuestro salario no admite más demoras”, afirmaron en el gremio. Y acusaron al gobierno provincial de no mostrar “la misma diligencia a la hora de negociar con los trabajadores” que la que “muestra inaugurando obras y haciendo campaña electoral”.
La titular de Siprus, María Fernanda Boriotti, sostuvo que Santa Fe debería “imitar a la provincia de Buenos Aires”, donde el gobernador Daniel Scioli “ya negoció un aumento al básico a cuenta de la futura paritaria para paliar el deterioro de los salarios”.
La dirigente advirtió también que, “de no recibir respuestas”, los profesionales de la salud estarán “dispuestos a sostener y profundizar el plan de lucha”, y adelantó que “ya está votado otro paro para el 27” de enero próximo.
“Las declaraciones del ministro (de Salud provincial, Mario) Drisun diciendo que desconocía los motivos de las medidas de fuerza reflejan el desconocimiento que tiene de la realidad del sector y la gestión deficiente que está llevando en políticas de recursos humanos”, sentenció Boriotti, convencida de que el funcionario “no puede desconocer las deudas salariales con los profesionales ni los acuerdos paritarios incumplidos”.
Fuente: http://www.lacapital.com.ar/contenidos/2015/01/21/noticia_0032.html