El viceministro de Salud de la Nación, Gabriel Yedlin, y el presidente del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai), Carlos Soratti, junto a autoridades provinciales que participarán por videoconferencia, pondrán en marcha hoy la campaña para la detección precoz de la Enfermedad Renal Crónica (ERC) dado que es un problema de salud pública mundial. Se estima que un 16,9% de los mayores de 20 años padecen este problema de salud. Estudios en la Argentina muestran cifras similares. Nuestro sistema de salud cuenta con los recursos necesarios para efectuar un diagnóstico precoz de la ERC. Al mismo tiempo existen evidencias de que el tratamiento precoz de esta enfermedad puede prevenir o retrasar la progresión a estadios más graves.
El acto de lanzamiento tendrá lugar a las 10 en dependencias de la cartera sanitaria nacional, en la Ciudad de Buenos Aires.
Los interlocutores en las provincias serán las autoridades sanitarias, directores de hospitales, jefes de servicio de laboratorios y de nefrología, representantes jurisdiccionales del Incucai y de su Programa de Abordaje Integral de la Enfermedad Renal Crónica (Paierc).
La campaña, que involucrará tanto a las redes públicas como privadas de laboratorios de análisis clínicos, consistirá en enviar recomendaciones desde los laboratorios a los profesionales médicos solicitantes sobre la forma más adecuada de medir la función y el daño renal para realizar así una detección precoz de la ERC.
A nivel nacional e internacional hay consenso para promover el diagnóstico precoz de la Enfermedad Renal Crónica, para su estadificación, tratamiento y seguimiento pues la ERC es un problema de salud pública mundial. Mientras la incidencia de la Insuficiencia Renal Crónica Terminal (IRCT) se ha duplicado en los últimos 10 años, hay muchos pacientes con ERC en estadios tempranos que no tienen diagnóstico ni tratamiento.
Existen evidencias de que el tratamiento precoz de la enfermedad renal puede prevenir o retrasar la progresión a estadios más graves, sus complicaciones, así como disminuir el riesgo asociado a la enfermedad cardiovascular.
A pesar de ello, la mayoría de los pacientes con enfermedad renal no son reconocidos en el primer nivel de atención hasta que presentan síntomas.l
Fuente: EL LIBERAL