Piden penas de hasta 19 años por el ataque a un jefe de la Federal

Al comisario Roncaglia «le tiraron a matar» en un asalto en su casa, afirmó el fiscal

NO hay dudas. Al comisario inspector Néstor Roncaglia, jefe de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal, le dispararon para matarlo durante un intento de robo en su casa de Olivos, en el partido de Vicente López.

Así lo entendió el fiscal Eduardo Rodríguez al solicitar la pena de 18 y 19 años de cárcel para César Heredia y Mariano Carbajal, respectivamente. El representante del Ministerio Público acusó a los involucrados, hermanos por parte de madre, de los delitos de homicidio criminis causa (delito que se comete para ocultar otro) en grado de tentativa e intento de robo agravado por el uso de armas.

Ayer, con los alegatos del fiscal Rodríguez y de Flavia Astray, abogada de los acusados, culminó la segunda audiencia del juicio oral y público, a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 4 de San Isidro, integrado por los jueces Hernán San Martín, Osvaldo Rossi y Esteban Andrejin. El miércoles próximo se conocerá el veredicto.

Astray solicitó que, en el momento de la sentencia, los jueces consideren que sus defendidos no tuvieron la intención de matar al jefe policial.

El hecho del que fue víctima el comisario inspector Roncaglia ocurrió a las 21.45 del 1° de junio del año pasado, cuando volvía de un procedimiento antidrogas en Campana. En el momento en que el jefe policial estacionaba la camioneta de su esposa en el garaje de su casa fue sorprendido por los delincuentes.

Roncaglia salvó su vida de milagro. El instinto hizo que se cubriera el rostro con la mano derecha. Otro balazo le ingresó por la tetilla derecha.

«A Roncaglia le tiraron a matar en un contexto de robo. Lamentablemente sucedió pocos días después de que este fiscal diera a conocer la gran cantidad de hechos delictivos ocurridos en Vicente López y fue un inicio de una seguidilla de casos que tuvieron que lamentar muchas víctimas fatales y otras que, por azar, no perdieron la vida. Situación que se mantiene en la actualidad y que a medida que pasa el tiempo se va agravando», sostuvo en parte de su alegato el representante del Ministerio Público.

El juicio contra Heredia, de 27 años, y Carbajal, de 26, tuvo su momento de emoción el lunes pasado, cuando el jefe policial declaró ante los jueces y el fiscal. Emocionado, Roncaglia se dirigió en varias oportunidades a los acusados y les espetó: «Con mi esposa trabajamos 30 años para tener la casa que queríamos y la tuvimos que vender. Ustedes no tenían derecho de hacer lo que hicieron. Yo venía de trabajar, de luchar contra las drogas. Yo, como policía, me la puedo bancar, pero mi familia no».

A su turno, los acusados reconocieron el hecho, pero dijeron que no tuvieron intención de matar. «Somos vulgares ladrones. Se trató de un robo al voleo. Lo que hicimos está mal, pero este señor [por Roncaglia] atentó contra mi vida y la de mi hermano. Nunca tuvimos intención de matarlo, no le quisimos arruinar la vida a nadie», sostuvo Heredia en parte de su declaración.

Pero los hermanos no sólo llegaron a juicio por el hecho del que fue víctima Roncaglia. El mismo día, media hora antes, protagonizaron un robo violento en la casa del juez Marcelo García Helguera.

El magistrado, que integra el Tribunal Oral N° 3 de San Isidro, también declaró en la primera audiencia del juicio. Reconoció a los dos acusados como los autores del hecho y dijo que Carbajal además de estar armado con una pistola calibre 9 milímetros lo amenazaba con una picana eléctrica.

EL CRUDO RELATO DE UNA VÍCTIMA

Néstor Roncaglia, comisario inspector: «Tuvimos que mudarnos, junto con mi esposa trabajamos 30 años para tener la casa que queríamos y la tuvimos que vender. Ustedes -a los acusados- no tenían derecho a hacer lo que hicieron. Como policía me la banco, pero mi familia no»..

Fuente: La Nación