Unas 15.000 personas, según los organizadores, se manifestaron hoy en Santiago para solidarizarse con la población palestina de Gaza, donde Israel mantiene una ofensiva militar desde el pasado 8 de julio y para demandar al gobierno de Chile que rompa relaciones con el Estado israelí.
«Chile no puede ser cómplice de un Estado genocida», dijo a los periodistas Tarik Lama, dirigente de los palestinos residentes en Chile.
En Chile vive la comunidad palestina más numerosa fuera del Oriente Medio, de unas 400.000 personas, resultado de una inmigración iniciada en la segunda década del siglo XX y compuesta casi exclusivamente por cristianos.
Los manifestantes, convocados por la comunidad palestina residente, organizaciones de derechos humanos y federaciones de estudiantes marcharon por la Alameda Bernardo O’Higgins, la principal avenida de la capital chilena, exigieron un alto el fuego inmediato en Gaza, roto tras 72 horas de calma por los nuevos ataques con cohetes del movimiento palestino Hamás contra Israel.
El Gobierno de Chile convocó la semana a consultas a su embajador en Israel y ha emitido varios pronunciamientos pidiendo el fin de los ataques «desproporcionados» del Ejército israelí contra la población civil de Gaza, aunque también ha condenado el lanzamiento de cohetes contra el territorio israelí por parte de Hamás.
La marcha llegó hasta el palacio de la Moneda, sede de la Presidencia de Chile, donde los organizadores entregaron una carta con sus demandas dirigida a la presidenta Michelle Bachelet, que actualmente se encuentra de gira por Sudáfrica, Mozambique y Angola.
Según datos difundidos en las últimas horas por Naciones Unidas, desde el pasado 8 de julio el conflicto ha causado la muerte de 1.898 palestinos, en su mayoría civiles, incluidos 447 niños y de 67 israelíes, en su mayoría soldados.
abc.es