«Era para caerse de rodillas»

Romero tuvo una actuación sólida y aseguró que después del cabezazo en el palo estaba para tirarse al piso y decir «gracias». Y afirmó que «llegó el premio a falta de dos minutos y la suerte acompañó».

Tuvo algunas intervenciones, sobre todo en el primer tiempo. No tuvo demasiado trabajo pero, para su suerte y la de todo Argentina, terminó con la valla invicta. Sergio Romero padeció desde el arco propio la trabajada victoria por 1-0 sobre Suiza. «Tocó sufrir, un partido largo… Los muchachos se mataron. Por suerte nos llevamos el partido», se desahogó el arquero que llegó al cuarto partido sin recibir goles en mundiales (igualando a Fillol y Pumpido) y se quedó con el récord exclusivo de llegar a 23 sin que le conviertan en la Selección.

¿Cómo vio el encuentro? «Sin lugar a dudas se metió en un partido trabado y duro. Tuvimos chances, por ahí no tanta claridad en el primer alargue pero no nos entregamos nunca. Llegó el premio a falta de dos minutos, gracias a Dios, el Enano agarró la pelota. Y después la del palo… La suerte acompañó», reconoció el Uno.

Y sobre el momento del gol de Di María, comentó: «¿Qué se puede decir? Era para caerse de rodillas y decir gracias. Se sabía que se iba a sufrir y que iba a ser duro». Por supuesto que se festejó el pase a cuartos. «Estamos contentos, la verdad es que se cantó, se gritó, se cantó por llegar al final con este desahogo. Ahora a preparar el partido que viene», concluyó Chiquito.

Fuente: Olé