Además de su habitual mercadería, los puestos ofrecen banderitas, camisetas y pelotas falsificadas. Ya coparon las avenidas Avellaneda, Pueyrredón y Rivadavia. También aprovecharon el fin de semana largo.
Con la fiebre mundialista en su punto cúlmine, los manteros se multiplicaron en diferentes avenidas de la Ciudad. Incluso aprovecharon el cierre de los locales durante el feriado del viernes para copar los principales centros comerciales con banderitas, camisetas, cornetas y vinchas celestes y blancas.
La avenida Avellaneda, en Flores, fue una de las ocupadas durante el fin de semana largo, seguida por Pueyrredón, Rivadavia y Corrientes. La consigna fue la misma: aprovechar el Mundial y los triunfos de la Selección argentina para vender la habitual mercadería y sumarle las camisetas de Messi o las banderas en todos sus tamaños.
Según un informe de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en abril pasado se registraron 8.200 vendedores ilegales en la Ciudad, casi un diez por ciento más que el mismo mes del año anterior. La cifra corresponde a puestos en las calles (2.500) y en las ferias irregulares (5.700), conocidas como saladitas.
Desde la CAME advirtieron que la actividad ilegal rondó los 710 millones de pesos, una cifra “muy significativa”. Y se estima que los resultados de junio serán aún más alarmantes, pues el Día del Padre, el Mundial de Brasil y el feriado por el Día de la Bandera se convirtieron en un terreno fértil para la multiplicación de los manteros.
Fuentes del Ministerio de Espacio Público reconocieron el avance de la venta ilegal y explicaron que no hay suficientes agentes de la Metropolitana para estar todos los días y a toda hora custodiando que los vendedores no se vuelvan a ubicar, una vez que fueron desalojados.
Fuente: La Razón