Se usará en el Mundial de Brasil; instalar un dispositivo de este tipo demanda un gasto cercano a los 160.000 dólares
Desde ya que no se trata de un tema nuevo y todos reclaman cuando se sienten afectados. La tecnología aplicada al fútbol es una de las cuestiones más polémicas y más resistidas en el universo de la pelota. Aunque la cuestión se reinstaló a partir de la sanción de Fernando Echenique que convalidó anteanoche un gol de Belgrano ante River, cuando el balón no había cruzado la línea de meta.
Ante la situación, el técnico millonario, Ramón Díaz, reabrió la discusión al solicitar el uso de la tecnología para esclarecer este tipo de jugadas. No es un detalle menor, porque en otros torneos ya se aplica. En la FIFA, el debate se produjo tras el Mundial de Sudáfrica 2010, durante el cual Inglaterra fue privado de un gol legítimo en un juego ante Alemania, por los octavos de final. Ese error lo dejó fuera de la competencia. Por eso, para Brasil 2014 se aprobó la utilización de un sistema para detectar y ayudar a los árbitros en este tipo de jugadas, una tecnología que se aplicó en la Copa Confederaciones del año pasado, que se pone en práctica en el Mundial de Clubes desde 2012 y que ya se usa en la Premier League.
En su momento, el presidente de la FIFA, Joseph Blatter explicó: «En Brasil tendremos la tecnología para la línea de gol. No podemos volver a permitirnos un desastre como el del gol de Inglaterra contra Alemania en Sudáfrica 2010. Cuando lo vi, quedé como paralizado».
Así, la FIFA comenzó a analizar la incorporación de dispositivos de detección automática de goles, denominado DAG. El organismo aprobó las licencias de cuatro empresas: tres compañías alemanas (Cairos Technologies AG, GoalControl y GoalRef-Fraunhofer IIS) y una inglesa (Hawk-Eye Innovations).
En la Copa del Mundo que se avecina, en Brasil, el sistema que se utilizará es el GoalControl. ¿Cómo funciona y cómo se aplicará? En cada uno de los estadios de la Copa del Mundo serán instaladas 14 cámaras de alta velocidad distribuidas por todo el campo de juego, de las cuales siete enfocan a cada arco. Así, la posición de la pelota queda captada en 3D de forma continua y automática. En el caso de que se produzca un gol, los árbitros recibirán la señal en un reloj que llevarán en sus muñecas. Se iluminará la palabra «Goal» si se marcó un tanto.
En la Premier League, desde el comienzo de la actual temporada, se utiliza un sistema similar. Incluso se utilizó en el partido que marcó el regreso del técnico José Mourinho a Chelsea. El equipo de Mou festejaba un tanto ante Hull City, pero el árbitro no lo convalidó, porque en su reloj nunca recibió la señal de gol.
Mientras, en el fútbol argentino las voces se multiplican pidiendo la aplicación de los recursos tecnológicos. Como Ramón Díaz tras el partido con Belgrano, también lo hizo el ex árbitro Horacio Elizondo y hasta en alguna oportunidad se manifestó a favor de esta medida Miguel Scime, el director nacional de Árbitros de la AFA.
El problema principal es que este tipo de sistema está lejos del alcance económico de los clubes argentinos. Y más allá de que se podría especular con que los gastos corran por parte de la AFA, el desembolso sería demasiado grande, ya que la instalación en cada estadio de GoalControl tiene un costo aproximado de unos 160.000 dólares..
LA Nación