Román quiere; Angelici, no; ¿quién será el ganador?

El contrato del 10 finaliza el 30 de junio y es el gran tema de Boca. Bianchi lo apoya.

El tiempo está obligando a Daniel Angelici a decir la verdad. Está claro que no era el plan pensado y que la idea inicial era otra pero, de algún modo, el correr de las horas se hizo lento y el presidente de Boca se encuentra entre la espada y la pared. Si Angelici cuenta lo que realmente piensa, deberá afirmar que desea que el ciclo de Juan Román Riquelme termine el 30 de junio. Mientras tanto, la incertidumbre se mantiene. ¿Qué busca el presidente de Boca sosteniendo una larga espera sobre algo que ya tiene decidido?

Angelici se lo dejó en claro a Carlos Bianchi. Le dijo que la decisión será de “los dirigentes” y que “el que baja el martillo” es el presidente. El Virrey , por su parte, está seguro de que Román es la bandera de su equipo, aunque no desea expresarse públicamente antes de que Riquelme lo haga. Llegado el caso, más allá de su buena relación con Angelici, pedirá por el 10.

Riquelme mantiene el silencio. El 10 tiene decidido que quiere seguir jugando al fútbol y que, claro, desea hacerlo en Boca. Sin embargo, mantiene la cautela con apariciones públicas a cuentagotas. Sabe lo que se viene y tiene en claro que, igual que en el 2010, la idea es resolver todo lejos de los focos populares, durante el Mundial. ¿Qué dirá cuando finalmente se pronuncie sobre el tema? Ayer, su hermano Cristian publicó una foto del 10 posando subido a una moto y escribió: “Enseñás cada partido cómo se juega a la pelota”.

En su aparición del domingo por la noche, Angelici ofreció cuestiones intangibles. “Boca está por encima de todos los nombres. Primero queremos finalizar el campeonato. Román es el ídolo que tiene Boca, me voy a sentar con él a charlar”, soltó. Y apuntó: “Si entendemos que no tiene que seguir, o no nos ponemos de acuerdo en lo económico, tomaremos la mejor decisión para el club”.

Desde el entorno de Riquelme afirmaron que la situación económica “no será un impedimento para negociar”. La misma fuente explicó: “Si alguna vez resignó un año de contrato para firmar o devolvió la plata que debía cobrar por estar lesionado, no creo que ahora eso se vuelva un problema. Cuando Román decidió volver, se resolvió en 15 minutos en un asado en su casa y ni se habló del contrato”.

Mientras Riquelme se mantenga dentro del equipo titular, el margen de maniobra de Angelici se acotará. Y si hay algo que pesa en la cabeza de los dirigentes es aquella tarde del 2012, en la que la cancha habló y las balas picaron cerca. Después de eso, Falcioni dejó de ser el entrenador y Bianchi volvió al ruedo. ¿Qué pasará si el estadio vuelve a pedir por el 10? El reloj se está poniendo ingrato con las intenciones del presidente de Boca.

Fuente: Clarín