El secretario blanqueó sus prejuicios contra los medios en el Senado: “Hay que emanciparse de las corporaciones”, pidió.
Carlos Zannini dio la cara ante el Congreso por primera vez en diez años, al ser obligado por Cristina Kirchner a ir al Senado a explicar el acuerdo con Repsol.
Tras emocionarse al recordar a los trabajadores de YPF que sufrieron la privatización, Zannini salió a responder preguntas y se animó a blanquear su rechazo a los medios.
“Los políticos tenemos que sacarnos la adicción a los medios. A los diarios, a la televisión y a las redes sociales y no nos escuchamos entre nosotros”, puntualizó, tras oír un duro discurso de Fernando “Pino” Solanas.
“Los medios son como la droga y quien llega al poder rápido con esas artes luego lo vienen a buscar. Reivindico nuestra idea de emancipar a las corporaciones”, se jactó Zannini, convertido en un centro de atracción en el Senado, donde todos saben de su influencia en los Kirchner, pero nunca habían oído su voz.
“El Chino” intentó mostrarse correcto pero no evitó sonreír ante descalificativos como el de Ernesto Sanz, quien lo definió como “destructor estructural de acuerdos”.
Sanz y Morales, los radicales que llevan la voz cantante de la oposición en cada visita oficial.
“Vine a buscar su voto, su apoyo”, le dijo en un momento Zannini, para explicarle que el 51% de YPF va al Estado.
El chubutense Marcelo Guinle fue el único oficialista que salió en su defensa: “Zannini es un hombre de la política que no merece esas descalificaciones”. El Chino ni se inmutó.
lapoliticaonline.com