Desesperada, tuvo que caminar 10 kilómetros para llevar a su beba al hospital

Una mamá caminó poco más de 10 kilómetros sobre una ruta con su hija de nueve en meses en brazos porque en la salita sanitaria de su pueblo no la atendieron. La nena tenía fiebre y convulsiones. Ocurrió en Relmo, un paraje de unos 100 habitantes del este de La Pampa, a cien kilómetros de Santa Rosa.

Lis Mercedes Pereyra (25) llevó a su hija Micaela el viernes pasado a las 8 y media de la mañana a la posta sanitaria. “Tenía la piel brotada, ronchas”, dice David Burgardt, el padre de la pequeña y esposo de Lis. “La enfermera no le dio paracetamol. Dijo que no tenía. Y que la bañara e intentara bajarle la fiebre”.

La pequeña tenía 39 grados y además las manchas se le extendían a todo el cuerpo.

Cerca de las 2 de la tarde, la hora que cierra la posta, Lis volvió. La nena estaba peor. Y tampoco la atendieron. “No es nada”, le dijo la enfermera. “Si querés que la atiendan, llevala a Miguel Cané”, le dijo. Cané es el pueblo más cercano a Relmo, a 15 kilómetros. Pidió una ambulancia, pero la enfermera le dijo que no había.

Lis Pereyra, desesperada y después de pelearse con la enfermera, salió caminando por la ruta provincial 1. Dejó sus otros hijos de 8 y 4 años, con una familia amiga. Recorrió con su hija en brazos más de 10 kilómetros. Micaela pesa unos seis kilos. Cerca de un cruce, un camionero la levantó. Llegó al hospital Cané, cerca de las 7 de la tarde. Inmediatamente llevaron a la pequeña en ambulancia a General Pico, donde la internaron. Micaela tenía fiebre y convulsiones. La internaron y la mantuvieron un día en observación. “Era la sexta enfermedad”, dijo Burghardt, una eruptiva. Lo peor, fue la fiebre que sufrió durante varias horas.

“Yo estaba en Pico. No podía hacer nada”, agregó Burghardt, albañil de 42 años. General Pico está a 80 kilómetros de Relmo. Y el hombre recorre esa distancia cada tres días en moto y se queda a dormir en obras en construcción. “No tenía tiempo de ir”, explica. Hace un año y medio vive con Lis. Es uno de los pocos que llegó al pueblo, ubicado a la vera de una línea del tren Sarmiento, inactivo hace décadas.

El Ministerio de Salud de La Pampa anunció que inició un sumario a la enfermera, quien negó lo que sucedió.

Fuente: Clarín